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Soonyoung no podía dejar de sonreír de oreja a oreja, estaba recostado en su cama mirando al techo.

No podía dejar de pensar en lo que había sucedido ese día, llamó emocionado a sus mejores amigos y les contó.

Jun y Wonwoo sonrieron victoriosos, su plan había funcionado.

Luego recordó algo, Seokmin.

Jihoon aceptó salir con Seokmin, no con él, y... ¿Por qué los había invitado a los dos, sin comentarles nada?

¿Qué era lo que Seokmin trataba de hacer?, de pronto recordó que el menor le prometió ayudarlo a conquistar a Jihoon, pero.... ¿En serio lo intentaría?

Es decir, Jihoon esperaba ver a Seokmin ahí, no a él.

Además, Jihoon prácticamente buscaba la forma de irse, alegando que el estar ahí con Soonyoung era un error.

Sintió su cara arder, lágrimas formandose en sus ojos, un dolor en el pecho.

Se preguntó cómo podía sentirse tan feliz, al recibir tan mínima atención de una persona, que ni siquiera buscaba dársela a él.

Esa atención, esa emoción, esa amistad, ese amor no era para él, era para Seokmin.

¿Cómo no se dio cuenta antes?, había estado "tranquilo" por el hecho de que Seokmin le jurara que Jihoon era sólo un amigo para él, hasta cierto punto se sintió feliz... Pero, ¿no era eso egoísta?, ¿sentirse feliz porque a Seokmin no le gustaba Jihoon?

Lloró, lloró y no dejó de llorar.

Maldijo el día en que el profesor de literatura les pidió hacer ese trabajo en equipo, nada lo atormentaba hasta que conoció a Jihoon.





Llegó a la escuela algo desganado y se sentó en su lugar, rescostando su cabeza sobre sus brazos en el escritorio.

No tenía ganas de hacer nada, no había llamado a Jun, Wonwoo o a Seokmin desde el día sábado, tampoco había contestado sus mensajes.

Quería estar solo, quería sufrir, quería llorar sin que nadie le dijera nada.

Unos minutos después llegó Jihoon, se sentó a su lado y Soonyoung no pudo evitar volver a soltar una lágrima.

Jihoon notó su comportamiento extraño, pensó que tal vez estaba enfermo y se preocupó.

Soonyoung—llamó el menor—¿estás bien?

Soonyoung levantó la vista, se giró al lado contrario y se limpió las lágrimas—si.

Jihoon lo miró con duda, pero decidió no decir nada cuando Soonyoung se recostó nuevamente y se quedó así hasta que comenzaron las clases.





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