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Llegaron a la escuela y entraron a sus respectivos salones, el menor se encontraba sentado con la mirada baja como de costumbre.

Todo transcurría normal hasta que sintió un ligero golpe en el brazo, miró a su alrededor y se encontró con un papel hecho bolita y lo tomó.

Que no se te olvide la cita de esta tarde.
Soonyoung

Abrió los ojos con sorpresa y se sonrojó, volteó a su izquierda y vió a un sonriente Soonyoung que después le guiñó el ojo.

Volvió su mirada hacia el frente, su corazón latía con fuerza y su cara se sentía caliente. No pudo concertarse en lo que restó de la clase.

Al llegar la hora del descanso, salió casi corriendo y fue en busca de sus hyungs.

Al divisarlos paró, tomó aire y se acercó a ellos tratando de parecer tranquilo.

Se dirigieron a la cafetería, se sentaron en la mesa de siempre y comenzaron a comer.

Jihoon no podía dejar de pensar en Soonyoung, ¿por qué se portaba así de repente? Jamás se habían hablado hasta el día anterior...

Jihoonie, la comida se va a enfriar—dijo Joshua, notando qué no había probado bocado y no parecía querer hacerlo tampoco.

El menor asintió, comenzó a comer y luego recordó que tenía su "cita" con Soonyoung, por lo cual no volvería a casa con sus hyungs.

Quería decirles que hoy no voy a poder volver a casa con ustedes—habló Jihoon.

Los dos mayores se extrañaron, Seungcheol habló—¿por qué?, ¿pasa algo?

No, no pasa nada—dijo rápidamente—uno de los profesores nos encargó un proyecto y me voy a quedar aquí con uno de mis compañeros después de clases para hacerlo.

Podemos esperarte si quieres—ofreció Joshua amablemente.

No, claro que no hyung—respondió—no sé cuanto tardaré y no quiero tenerlos esperando mucho tiempo.

Joshua suspiró—bien, pero por favor llamanos cuando llegues a casa.

Jihoon sé sintió aliviado, un poco más tranquilo respondió—claro hyung.

El estómago de Jihoon sé revolvía de sólo pensar en que tenía que pasar la tarde con Soonyoung, ahora que se estaba portando tan raro con él y se preguntó si este sería así con todas las personas a las que acababa de conocer.

Decidió dejar de pensar en eso, juntó todo el coraje que pudo y entró a su salón.

Soonyoung estaba sentado junto a sus inseparables amigos, reían y bromeaban.

Jihoon se sentía un poco solo sin sus hyungs, pensó que tal vez tenían razón y debería tratar de ser más sociable.

Tal vez podía empezar tratando de ser amigo de Soonyoung, la mayor parte ya estaba hecha y sólo tenía que tratar de fluir con la situación.

Pensó tanto en eso que no se dió cuenta cuando las clases terminaron, una mano frente a él lo sacó de su ensoñación y al levantar la vista se encontró con la mirada curiosa de Soonyoung.

Deseaba con todas sus fuerzas haberse ido con sus hyungs, no podía con la vergüenza y no sabía todavía por qué le interesaba tanto lo que Soonyoung pensara de él.

¿Te sientes bien?—preguntó el mayor, luego puso una de sus manos en la frente de Jihoon—estás muy caliente.

Jihoon soltó un grito ahogado, removió rápidamente la mano de Soonyoung de su frente y asintió—estoy bien.

Soonyoung lo miró con preocupación—¿en serio? Porque si quieres te puedo llevar a la enfermer-

Jihoon interrumpió—no hace falta, estoy bien, vamos, hay que hacer el proyecto.

El menor se levantó de la silla y caminó hasta la puerta, para luego salir.

Jun tenía razón... Parece que sólo quiere hacer el trabajo y no saber nada de mi—pensó Soonyoung.



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