NO - SoonHoon

28

El día siguiente, Soonyoung y Seokmin llegaron juntos a la escuela como de costumbre.

Al ingresar al salón, Jihoon ya se encontraba ahí.

¡Buenos días Jihoon hyung!—dijo alegremente Seokmin.

Buenos días—respondió.

Soonyoung lo miró—buenos días Jihoon.

Buenos días Soonyoung—dijo y volvió su vista a su libreta, donde estaba haciendo algunos apuntes.

Soonyoung echó una mirada de reojo a su libreta, pero lo que alcanzó a leer no era nada relacionado con alguna matería que llevaban, parecía más bien la letra de una canción o un poema.

Jihoon hyung—llamó Seokmin, el mayor lo miró—¿por qué no te unes a nosotros en el receso?

Jihoon soltó una risa—no puedo.

Seokmin hizo un puchero—¿por qué, hyung?

Jihoon sonrió—siempre como con mis amigos, me paso el receso con ellos.

Oh... Entiendo—dijo Seokmin—lo siento.

Jihoon negó con la cabeza—no te disculpes, igual agradezco la invitación.

Soonyoung se sorprendió por la actitud y las palabras de Jihoon, ¿por qué se portaba totalmente diferente con Seokmin y con él?, jamás lo había visto hablar tan tranquilo con alguien como con el menor, además de sus ya mencionados amigos.

El timbre sonó, Seokmin salió y las clases comenzaron.

No voy a poder acompañarlos a casa hoy—dijo Seungcheol, algo desanimado—tengo práctica de fútbol y no sé a qué hora terminará.

Joshua asintió—no te preocupes Cheol, yo voy a acompañar a Jihoon a su casa y luego iré directo a la mía.

Seungcheol los miró—está bien, por favor llamenme cuando haya  llegado.

Los dos menores asintieron, después de esa pequeña charla siguieron comiendo.

No le importó qué estuviera a más de 30°, se puso su gabardina, su sombrero y una bufanda para intentar ocultar su rostro.

Cuando le dijo a Soonyoung que lo iba a ayudar, hablaba en serio, muy en serio.

Alcanzó a escuchar que el mayor de los amigos de Jihoon no iría con ellos en el receso, así que planeó seguirlos mientras caminaban a casa para ver si podía averiguar algo que fuera de utilidad.

A la salida, Seokmin salió tras Jihoon y Joshua, siguiéndolo sigilosamente.

Y, ¿cómo va todo?—preguntó Joshua—¿has estado mejor?

Jihoon asintió—mucho mejor, hyung. De hecho, seguí tu consejo y la verdad que ha dado buenos resultados.

Joshua sonrió—me alegro mucho por ti, Jihoon.

El menor asintió—he estado pensando en el chico de la sonrisa perfecta, Seokmin.

Seokmin se extrañó al escuchar su nombre, se acercó un poco más.

¿Ah, si?—Joshua preguntó—¿qué pasa con él?

Lo he dejado acercarse—dijo Jihoon—me parece una persona muy alegre y eso me gusta, es todo lo contrario a mi, además es muy tierno.

Joshua soltó una risa, y bromeando comentó—no me digas que te gusta.

Seokmin se quedó congelado en su lugar.

Ya, hyung—dijo el menor—no te burles de mi.

Los vio alejarse, se quitó el sombrero y la bufanda, definitivamente esto no había salido como esperaba.

¿Él, gustarle a Jihoon?, tenía que ser una broma.

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