Sin rumbo

Empresa Dividida

-Al fin se encuentra en la ciudad y por lo que parece solo estará unos días Sofi, así que hice una cita con el, luego de que me entere que no corridas ningún riesgo.

-Espera, ¿Como lo sabes?.

-Gabriel me lo dijo en cuanto salieron de la consulta con la doctora.

-¿En serio?, el te lo dijo, solo así.

-Creo que aún no mides todo lo bueno que sacas de mi hermano Sofi, desde que estas con el es menos Gruñón. La noche en que desapareciste, cuando te encontró en tu departamento me abrazo e incluso lloro un poco en el auto.

-Dam no me mientas. - digo mientras mis siento mis ojos llenarse de lágrimas.

-No tendría porque. Pero no llores Sofi - dice en cuanto la primera lagrima cae por mis mejillas.

-Perdón Dam estoy algo sensible con esto del embarazo. - apoyo mi cabeza en mi silla hacia atrás y controlo mi respiración, cuando estoy más tranquila continuamos con la conversación.

-La cita la hice para el día de mañana, era el único día disponible que tenía.

-Bien entonces mañana iremos a platicar con el padre de Sara.

-Así es Sofi, pedí vernos en su oficina para que todo sea más discreto. De hecho cuando le dije quién eras no se negó, e incluso nos invitó a comer pero mejor en otra ocasión.

-Gracias por hacer todo esto por mi Dam. - Solo asienta con la cabeza.

-Ahora tenemos que buscar la forma de ir sin que Gabriel mande a los guardaespaldas.

-No te preocupes Dam yo hablo con el.

-¿Segura?.

-Si, es más, voy de una vez. - me levanto con cuidado de mi asiento.

-Sofí tu barriguita - dice con ternura.

-Dam basta, crece a su tiempo ¿si?.

-Doña ogra.

-¡Damián!.

Se ríe un poco - lo siento es que aveces te pareces a mi hermano, perdoname Sofi. - dice dándome un beso en mi frente.

-Yo te perdono, pero tu sobrino no.

-¿Qué tengo que hacer para que me perdone?.

-Dice que un poco de helado hará que se le olvide ese insulto tan feo. - nos soltamos a carcajadas.

-Bien, te lo llevaré a casa Sofi. Ahora tu ve con mi hermano y yo iré a trabajar, que necesito terminar todos los pendientes de mañana y ademas hoy saldré a comer con Valeria.

-La saludas de mi parte.

-Claro.

Cuando terminamos de platicar salgo de mi oficina y me dirijo a la de Gabriel. No veo a su secretaria así que se me hace fácil entrar, pero lo que veo me deja en un shock momentáneo.

Justo a un costado de Gabriel se encuentra Míriam su ex pareja, la cual lleva entre sus manos algunos papeles y por lo que veo Gabriel se nota preocupado, pues lleva su mano a la cabeza.

Evitó hacerle la típica escena de celos como en las películas y espero a que se de cuenta de que estoy aquí para que me lo explique.

-Gab, ¿tienes tiempo cariño?.

-Sofí - dice sorprendido cuando me ve- dame dos minutos ¿si?.

-Bien, te espero afuera.

-No, quedate aquí, toma asiento en el sofá. - asiento con la cebeza y solo veo que Míriam se me queda viendo feo, que literal si las miradas mataran ya se imaginan.