Re: Zero Arco 7 La tierra de los lobos.

Capítulo 68: Guía del Lobo de la Espada

Gustav: Espera un momento, Schwartz. Deja que revise esto hasta que llegue a un buen lugar para dejarlo.

Dicho esto, Gustav no dirigió ni siquiera una fugaz mirada hacia Subaru, a quien había llamado a la sala. Su mirada permaneció dirigida hacia el escritorio, sobre la carta que tenía en sus manos.

Guiado por el guardia, Subaru había sido llevado al estrato más alto de Ginunhive. Tras una puerta que parecía lujosa, Subaru fue recibido por una habitación simple y sencilla.

Dentro de la espaciosa habitación no había nada más que un escritorio para trabajar, una estantería para trabajar y una caja de herramientas para trabajar. Como la habitación era demasiado espaciosa para saber qué hacer con ella, era posible que hubiera habido más cosas llenándola originalmente.

La habitación que iba a utilizar el Gobernador, que había sido despojada de todo lo innecesario para su trabajo, tenía un aspecto muy ordenado, lo que en realidad era tranquilizador, ya que era el reverso del carácter serio de Gustav.

Subaru: Dice que esperemos hasta encontrar un buen lugar para parar, pero no hay ninguna silla.

Subaru estaba perdido cuando Gustav le había ordenado que esperara en la sala. Pero si le habían dicho que esperara, no tenía ninguna otra opción. Sin tener nada que hacer por el momento, Subaru miró alrededor de la habitación hasta que sus ojos se encontraron con una persona de clara presencia extranjera.

Lo observó, o mejor dicho, lo encontró saludando despreocupadamente hacia Subaru con una mirada empapada.

Cecilius: Ah, oye, oye, Basu, seguro que has trabajado mucho. ¿Tienes algún asunto con Gustav-san?

Subaru reprimió un suspiro y se acercó al falso Cecilus, que le hablaba en un tono tan despreocupado. Preguntándose qué podría decir, la relación entre Subaru y el falso Cecilus se había vuelto un poco más complicada de nuevo. Hasta cierto punto, la participación de Subaru en Sparka fue el resultado de ser instigado por el falso Cecilus.

Aunque Subaru pensaba que se habría unido al Sparka incluso si no hubiera habido ninguna disputa...

Subaru: Ceci, todavía quería vengarme de ti, no hay duda de ello.

Cecilus: ¡Vaya! Vengarse de mí es un objetivo muy ambicioso. ¿Por eso te uniste a Sparka? Si es así, lo siento.

Subaru: ¿Lo sientes?

Cecilus: No, verás, no fui a ver al Sparka que estaba pasando antes.

Subaru se quedó boquiabierto ante el falso Cecilus, que le había sacado la lengua con bastante indiferencia. Sin embargo, inmediatamente surgió una oleada de ira que gritaba "Bastardo".

Ese Subaru se había decidido a disputar con él, y ese Subaru también se había apresurado a anular lo que Cecilus había dicho, a pesar de haberlo visto ante sus propios ojos.

Subaru: T-tú, BASTARDO...hk.

Cecilus: ¡Ya, ya, ya, ya, no te enfades! Vale, vale, entiendo tus sentimientos de querer enfadarte, pero resulta que yo también tengo mis razones.

Subaru: ¡Entonces qué tal si me dejas oírlas! Más vale que sean buenas, o si no...

Cecilus: Quiero decir que ya sabía el resultado sin necesidad de verlo, ¿sabes? Basu lo habría terminado rápidamente con un enfrentamiento perfecto. Entonces no había razón para que yo fuera, ya que mi vida no estaba en juego después de todo.

Subaru: ――――

Ya que no mostró ninguna reacción al ser acosado, Subaru se alejó del falso Cecilius y de sus inmutables gestos. Para ser honesto, Subaru era consciente de que por todo lo que hacía, era natural que Hiain le llamara mocoso espeluznante.