Eleanor después del día regreso a casa, recién entra y se encuentra con su madre quien ya está a punto de marcharse.
—Hola mamá, ¿ya te vas?
—Si ya me voy a trabajar al bar.
—¿Descansaste?
—Cómo un tronco.
Ríe Eleanor.
—¿Has comido?
—Siii, recuerda que aquí la mamá soy yo, deja de preocuparte por mí... Bueno ya me voy, cuídate por favor ehh, yyyy deja de vigilar al vecino. —Le da un beso en la frente a su hija.
— O-O-Ok mamá.
Se marcha Imelda.
A Eleanor le frustra ver a su madre partirse en dos para mantener sus vidas, su madre se hace cargo sola de todos los gastos.
***
Eleanor
Es de media noche por más que trato de conciliar el sueño no puedo, estoy impaciente, necesito relajarme, entonces por lo que decido ir al supermercado, para mí no hay cosa más relajante, me gusta ir cuando está regularmente vacío y eso es de noche.
Ahora mismo me encuentro en los pasillos del supermercado, este está abierto las 24 horas del día y queda muy cerca de mi casa. Alrededor hay unas cuantas personas, me preguntó ¿Por qué vendrán hacer sus compras a estas horas? Porque yo me siento como una persona totalmente rara, ¿acaso será para aliviar ese sentimiento de soledad que sentimos? Ese es mi caso, además que disfruto hacer las compras. Me alegra saber que no soy la única loca.
Centro mi vista en el estante de verduras, escojo algunas, en eso que levanto la vista logro captar ¡¡Que mi maestro está aquí!! Abro mis ojos como platos de la impresión. Dios que persona tan más loca, vaya solo una persona que no está en sus cabales viene a hacer sus compras tan tarde. Este es otro motivo para pensar que es un psicópata.
Me escondo entre los estantes para que no se percate de mi presencia, es una oportunidad perfecta para expiarlo y saber quién realmente es. Lo sigo por todo el lugar, ay no pero que tipo tan más aburrido, se ha detenido en la librería, si lo aburrido no es leer, sino lo aburrido es el tipo de libros que escoge ¿Libro de leyes? ¿Para que quería eso? Si su materia se trata de química y la otra materia que imparte es matemáticas ¿Para que rayos quiere eso? Al fin se me prende el foco, lo más seguro es que está estudiando leyes para saber cómo esquivar sus crimenes o como defenderse en un futuro en caso de que lo capturen, si que es inteligente. Por estar sobre pensando las cosas ya lo perdí de vista, demonios.
Termino de escoger mis compras, ahora me dirijo a la caja. Después de esperar al fin llega mi turno, le pasó las cosas a la cajera para que las marque, olvide saludar pero mi mente solo está pensando en mi maestro. Salgo de mis pensamientos cuando la cajera me habla.
—Son $87.00 dólares señorita.
—¿Que? —Abro los ojos como platos, no imaginé que fuera a ser tanto, por estar de detective no me fijé en los precios.
—¿Señorita va a pagar? —Me pregunta de nuevo la cajera.
Dios que vergüenza.
Le digo en voz baja.
—¿Cree que pueda regresar a algunos artículos? —Quiero que la tierra me trague.
La cara de la cajera se torna amarga y lo comprendo solo he venido a hacer su trabajo más duro.
—Llamare a la gerente para...
En eso el torso de un hombre pasa por un costado de mí para entregar una tarjeta a la cajera, rozo mi hombro, lo tuve tan cerca su rostro, pude ver sus venas del cuello sobresalientes y palpitando, siento una vibración que me recorre todo el cuerpo, contengo la respiración pues su aroma varonil a inundado mis fosas nasales, trago saliva.
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Mi Maestro Es Mi Vecino
Mistério / SuspenseEleanor se esfuerza en sus estudios, cursa su cuarto semestre en la universidad. Hace unas semanas ha llegado un nuevo maestro a impartir clases, quien le desconcierta, sus actitudes misteriosas han despertado su interés sobre él. Y por si fuera poc...