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Llevaba ya un par de días metida en el santuario, siendo parte de esta tontería de las esposas de Negan. Por suerte, el sujeto había estado bastante ocupado como para no "consumar" el matrimonio o lo que el creyera que era esto.
Pero eso también me dio tiempo a inspeccionar un poco el lugar. Gracias a varias de las chicas que estaban ahí en calidad de esposas. Sabía que ninguna de ellas eligió ser parte del harem por el placer de ser su esposa. Todas tenían otro motivo y para ser sincera, no sabía si eso me asustaba más de lo que me tranquilizaba.
Sherry, me había contado su historia y haciendo conexiones. Resulto que Daryl intentó ayudarlos en algún momento, pero ellos volvieron, teniendo como consecuencia la cara quemada de Dwight y que ella ahora formara parte de sus múltiples esposas.
Aunque eso me daba una ventaja. Ella me ayudaría a saber en donde tenían a Daryl, empezar el plan de huida y regresar con nuestra familia lo más pronto posible.
—lo tiene en las celdas – me dijo Sherry susurrando, luego de que volvió de uno de sus encuentros –. Él es el único que vigila, por órdenes de Negan
—¿crees que puedas distraerlo unos minutos? Necesito hablar con él – suplique
—sí, pero ten cuidado...
—lo sé, si me ven merodeando soy mujer muerta – suspire
—peor aún, Daryl será quien pague las consecuencias y te dejará viva para que cargues con eso – tomo mi hombro –. No conoces bien a esta gente, por eso debes tener cuidado en lo que haces y lo que dices
Asentí con pesadez. Eso era verdad, Daryl pagaría los platos rotos si yo me atrevía a hacer algo estúpido y no salía como lo esperábamos.
Aquella noche, Negan hizo acto de presencia en la habitación donde debíamos estar a su disposición. Una sonrisa instalada en sus labios mientras contemplaba a cada una de nosotras.
Le pidió a una de las más jóvenes que le sirviera un trago, y con el vaso en mano, se acercó a mí. Quería patearlo en la entrepierna, sin embargo, no podía hacer esas cosas.
—veo que el vestido resalta todo lo que debe de resaltar – sus ojos recorrieron mi cuerpo –. Perdón que no he podido atenderte, las cosas se están poniendo un tanto complicadas con tu grupito
—ellos no van a doblarse ante ti y eso lo sabes...
—quizás no todavía, pero creme cariño que lo harán – me guiño –. Preparare algo especial para nosotros
—no gracias
Negan soltó una carcajada que me hizo sobresaltar. Se tomo el licor de un solo golpe, dejo el vaso con cuidado en una de las mesitas cercanas y de nuevo su atención estaba sobre mí.
No hagas nada estúpido, piensa en Daryl.
Pero no era tan fácil y menos cuando me tomo de la nuca con tal fuerza que solté un pequeño quejido.
