Capitulo 109

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Al instante que el televisor se apago, uno de los policías corrió a romper la cámara que se encontraba entre los libros de la repisa que tenían mis padres, yo estaba incontrolable, mis manos temblaban y sudaban y mi odio hacia ese tipo crecía cada segundo, me paré de manera brusca y caminamos a paso rápido hacia la puerta.

-Se va a morir- chilló Kimberly aun sentada en el sofá.

-No se va a morir, ella va a estar bien- dije entre dientes, no se si se lo decía a Kim o trataba de convencerme a mi mismo.

-Se va a morir y lo ultimo que le dije no fue nada bonito, me voy a ir al infierno por ser la peor amiga que haya existido- siguió chillando y eso me ponía los pelos de punta, estaba muy estrezado y asustado y Kim diciendo eso lo hacia mas difícil.

-!Cállate!, lo haces mas difícil- dije frustrado jalándome el cabello.

-Estamos perdiendo tiempo- Dijo Liam y jaló a Kim hacia la salida.

-Dejen sus celulares- dijo Ray deteniendonos, lo cuestionamos con la mirada -Parece tener conocimientos electrónicos, probablemente nos este escuchando a travez de uno de ellos- todos dejaron su celular en la mesa de entrada y salimos volando hacia la camioneta de papá que era la mas grande, Ray subió como piloto y mi Greg subió como copiloto, le rogamos a mis padres que se quedaran en casa ya que no quería que les pasara nada ellos, aceptaron con la condición de que los mantengamos informados, Zayn, Harry y yo íbamos en el asiento de enfrente, y Kimberly y Liam y dos policías iban con ellos en el asiento trasero, estaba de lo mas nervioso, ya quería llegar y tenerla en mis brazos y decirle que todo estaría bien y que ella y todo se mejoraría.

-Algo que puedas decirnos sobre el lugar- habló Ray a Greg.

-Es como un almacén, solo tiene una puerta y no tiene ventanas mas que una demasiado pequeña que es la del baño, la puerta es de hierro y es enorme, solo vi cinco cuartos pero estoy seguro que hay mas, el cuarto principal esta totalmente despejado no hay absolutamente nada mas que una silla y las cadenas en la pared, y puedo asegurar que puede haber tres hombres y solo uno está ahí contra su voluntad así que podría ayudarnos- terminó de Hablar podía notar su nerviosismo en sus palabras, Ray asintió con la mirada fija hacia enfrente, Greg lo guiaba por las calles, luego de unas interminables horas nos encontrábamos en un bosque, había demasiados arboles por todos lados y no nos dejaban ver hacia el interior de este, Ray se estacionó y todos salieron del auto, los tres policías cargaron sus armas.

-Ustedes irán detrás de nosotros en todo momento, no quiero que hagan ninguna estupidez- eso lo dijo mirando hacia mi y yo lo mire mal -No hagan ningún ruido y no hagan nada sin antes decírmelo- habló de manera seria después de tener una pequeña pelea ya que el no quería que nosotros fuéramos, caminamos entre los árboles siguiendo a Greg que era el que sabia el camino, a lo lejos vimos el gran almacén totalmente descuidado, las paredes se veían viejas y como la pintura se caía de lo viaja que estaba, la rodeamos hasta encontrar la puerta, suspiré fuertemente mientras Ray empujaba la puerta, no ocupó demasiada fuerza ya que se encontraba abierta, cerré los ojos y recé por que Gisselle se encontrara a salvo, primero se metió Ray y a continuación los otros dos policías, detrás íbamos nosotros, estaba totalmente obscuro, los policías prendieron sus lamparas y nos tendieron a tres de nosotros una que tenían de repuesto, la tomé y alusé el camino, estaba totalmente vacío, Greg señalo una puerta al fondo con la linterna, entramos y sentí como el estomago se me revolvía, era el cuarto blanco del que Greg me habló, con la lampara apunte hacia la pared y puede distinguir la sangre en ella, sentí el sollozo de Kim, Harry la abrazó por los hombros para tranquilizarla, alumbramos el cuarto con las lamparas, y un escalofrío recorrió mi columna al ver los ganchos que colgaban del techo y bajo de ellos una enorme mancha de sangre seca, tragué saliva en seco, me sentía en una película de terror, pero solo era la horrible realidad que estaba viviendo mi novia, salimos de ahí y nos metimos a un pasillo, entramos a la única puerta que había, encontrándonos con el salón, esto era un estilo mas rústico, Greg encendió la luz y vimos el cuarto vació, estaba comenzando a sudar nuevamente, ¿Y si se la había llevado a otra parte?, ¿Y si nunca la volvía a ver?, todo esto me estaba matando lentamente, detrás de una columna encontramos otra puerta y recé para que ella estuviera ahí con su hermosa sonrisa que siempre tenia, pero sabia que era imposible después de todo lo que le habían hecho, solté un suspiro de frustración al ver que ella no se encontraba en ese cuarto, era mucho mas pequeño que los demás y solo había una silla de metal al centro.

¿Mi Angel o mi Demonio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora