Capitulo 32

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Narra Kimberly

Caminábamos sigilosamente detrás de Giss por el bosque, hasta que paro frente a un árbol, levanto su mano izquierda y lo empezó a golpear con coraje, ahora se que por eso que aveces llegaba a casa con moretones en los brazos, dejo caer todo su cuerpo al suelo, comenzó a llorar en silencio, a ella nunca le gusto demostrar que era débil frente a los demás, desde aquel incidente con su familia, desde ese día no la había visto derramar ninguna lagrima frente a nadie, se mantenía fría con todos, y eso causaba que muchas personas de su escuela le temían, tenia reputación de drogadicta, prostituta, huérfana y satánica, pero en realidad no era nada de eso solo parece serlo para que nadie se le acerque y no tener que llevarse mas decepciones, pero los que se dan el tiempo de conocerla y se ganan su confianza sabrán que tienen una amiga en quien confiar y apoyarse durante toda su vida, ella nunca permitirá que llores por algo o alguien ni que te insulten o golpen y si alguien lo hace, que su familia resé por el en el hospital, recuerdo que de chicas un niño se acerco a mi y me insulto para luego tirarme mi barra de chocolate al suelo yo comenze a llorar, Giss le susurro algo al oído y dicen sus amigos que el no dejo de llorar por tres semanas, aun no se lo que le dijo pero debió ser muy traumante para dejar a un niño llorando por tanto tiempo.

Yo se su historia y se por que cambio y ahora es así con las personas, le cuesta mucho confiar en ellas y no demuestra sus sentimientos frente a los demás

Antes todo era diferente era una niña común y corriente que lloraba por cualquier cosa y confiaba en cualquier persona tanto que una vez casi muere intoxicada por un dulce que le dio un vagabundo, ella era muy amable con todas las personas incapaz de golpear o herir a alguien verbal o físicamente, pero todo cambio un día de la manera mas dolorosa que pudo suceder.

Veía como el tren se acercaba a ella a gran velocidad, mis lagrimas salían solas, veía pasar todos los años que había estado junto a ella desde que estábamos en México con tan solo cinco años hasta ahora con catorce casi quince, había aprendido muchas cosas de ella, era impresionante como una persona se vuelve en algo tan importante en cuestión de segundos, el primer día que la conocí nos hicimos amigas y desde entonces no hemos dejado de serlo.

*Flash Back*

Me encontraba sentada en el borde de la escalera con mi amiga Kate, veíamos correr a todos los estudiantes en busca de la pelota, nunca me gusto jugar temía que la pelota me golpeara, levante mi vista del suelo, me quede como piedra, la pelota venia directo a mi cara, esta impacto en mi rostro, causando que mi nariz comenzara a sangrar, todos siguieron jugando como si nada hubiera pasado, excepto ella, que se acerco corriendo hacia mi, se inclino hacia mi quedando a mi estatura y me tomo de la cara con delicadez, mis lagrimas no tardaron en salir.

-Vamos no llores- dijo envolviéndome entre sus brazos -Vamos a la enfermería, parece que esta rota- dijo tomándome de la mano, guiándome hacia aquel lugar que muchos temían, entramos pero no había nadie cerca, me dijo que me sentara en la camilla y ella fue hacia el botiquín, tomo un algodón y agua oxigenada, limpio mi herida y luego me dio un dulce como si fuera una verdadera enfermera, nos pusimos a conversar y después de un tiempo nos dimos cuenta que nuestros hermanos eran mejores amigos, lo que hizo que todos los días nos viéramos constantemente.

*Fin del Flash Back*

El tren no dejaba de hacer sonar ese horrible sonido que avisaba que pronto pasaría, Giss intentaba salvar a ese pequeño de ser atropellado por el tren, arriesgando su vida por alguien que no conoce, es lo que odio de ella, no aprecia su vida, se preocupa mas por el bienestar de los demás que el de ella, no importa si lo conoce o no, ya había salvado mi vida en varias ocasiones, la de una anciana que estaba apunto de caer de un balcon y la de Niall, ahora salvaba a ese pequeño sin importarle lo que le pudiera pasar a ella.

El tren paso y no logramos ver si habían salido o no, solo escuchamos los gritos de los demás, bajamos corriendo esperando con ansias al que el tren se terminara, pasaron como diez horas que en realidad fueron cinco minutos y pudimos observar a mi mejor amiga abrasando al pequeño que lloraba sin parar tocándose la rodilla, ella se inclino y beso su frente , le saco las lagrimas y cargo al pequeño con una sonrisa se lo entrego a su madre, esta la estrecho entre sus brazos y repetía constantemente "Gracias" entre sollozos, ella le dio una ultima sonrisa y se fue de hay como si nada hubiera pasado tomando su patineta que se encontraba partida en dos a causa del tren, el chico aun sostenía la cámara grabando todo detalle de lo sucedido estaba pálido.

Giss no nos vio ya que en todo momento se preocupo por el bienestar del pequeño niño que llevaba en brazos, luego salió de hay sin decir ni una sola palabra.

Pude sentir a Harry y a Niall abrasandome, cada uno a mis costados.

-Es la cosa mas dramática y hermosa que haya visto- decía Harry entre lagrimas

-Esta chica quiere que me de un ataque al corazón con cada movimiento que hace- continuo Niall en el mismo estado.

¿Mi Angel o mi Demonio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora