Lokison --- Terminada.

Mente bloqueada

-¿Por qué tardan tanto? Sólo iban a ver el hotel.
Thomas estaba impaciente, y yo también. Necesitaba ordenar mis ideas y quería estar en paz, y quería dormir un rato, pensé que me explotaría la cabeza por lo mucho que me estaba doliendo, sin tomar en cuenta mi brazo vendado. Nos habíamos quedado en el auto ya que ni él ni yo queríamos caminar. Se había parado y estaba asomado entre los asientos delanteros.
-No lo sé, pero no deben de tardar mucho... Por cierto, ¿crees que puedas ser el paje de anillos en la boda? Digo, después de hoy quizá estés algo agitado.
-Sí, prometí que lo sería y voy a cumplirlo.
-Gracias nene.
Hubo una pausa... ¿Qué necesitaba saber de mí misma?
-¿Qué es la luna de miel?- inquirió Thomas. Carajo... No le iba a decir las cosas como eran.
-Es cuando el nuevo matrimonio pasa tiempo juntos, salen de vacaciones, conocen lugares y se conocen el uno al otro.
-Yo pensé que era cuando le escribían a la cigüeña para que les trajera un bebé.
Me quedé helada, esta era la razón por la que nunca quise relacionarme con niños, hacían demasiadas preguntas, las cuales muchas veces no sabría cómo responderles.
-Pues no necesariamente, hay parejas que prefieren esperar un tiempo, hay quienes no esperan demasiado, hay quienes no se casan y tienen un bebé.
-¿Por qué?
-Es cuestión de ideologías, no están obligados a casarse y si lo hacen, no es por un medio en específico, es algo personal.
-¿Y tú te quieres casar con mi papá?
Me reí, este niño no dejaba de ponerme a prueba.
-¿Por qué quieres saber eso?- me giré más hacia él.
-Porque he visto cómo se miran. En especial él a ti. Y se ven lindos juntos.
-Bueno, pues gracias...
-Y también porque quiero un hermanito.
Resistí el impulso a cubrir mi rostro con mis manos. Si antes no me había desesperado con Thomas, estaba a punto de hacerlo... ¿¡Un hermanito!? ¿¡Quería que Loki y yo tuviéramos un bebé!? Ni siquiera habíamos tenido nada que ver aún... Lo más apasionado que habíamos hecho era besarnos a la luz de la luna en el "ático" y nada más.
-Tal vez deberías decirle a Loki, posiblemente se anime a que le escribamos a la cigüeña- para mis adentros pensé que no era mala idea, pero no podía llenarme la cabeza de esas cosas en ese momento.
De nuevo hubo un silencio, pero no iba a durar mucho.
-Kat, ¿papá es malo? ¿Por qué se quería esconder?
-Lo fue pero ahora es una persona diferente, es amable y considerado. Se escondía porque en muchos planetas lo buscaban, y quería vivir en paz... Sin mencionar que son considerados solamente personajes de leyenda y si fueras por la vida diciendo que tu padre es Loki Laufeyson, algunos creerían que estás demente y otros que supieran la verdad los buscarían y no los dejarían en paz.
-¿Y yo soy malo?
-Eso depende de ti, nada ni nadie puede definir eso mas que tú, no está en tus venas ni en tus genes. Tú eres Thomas Lokison, y tú mismo dictarás tu camino.
-¿Y si me equivoco? Quiero decir, si no puedo hacer las cosas por el miedo a fallar.
Lo miré a los ojos, y en ellos identifiqué el miedo de Helena cuando Loki (o Loren en ese entonces) la había invitado a salir por primera vez, aquel miedo a fallar y a no cumplir con las expectativas; era idéntico a ella. Pero también vi el rostro de su padre, en el cual había audacia y decisión por hacer las cosas, era una persona completa.
-Oh Thomas- dije abrazándolo -, no tengas miedo a fallar. Comete errores, encuentra problemas, es parte de la vida y del aprendizaje. No pienses ni por un momento que hay alguien que no ha cometido un error en la vida.
-Serían dioses.
-Incluso los dioses se equivocan, un ejemplo es tu padre. Loki puede ser un dios poderoso y astuto, pero eso no quita que ha tenido equivocaciones. Es lo que nos hace no humanos, sino lo que nos mantiene conscientes de que la vida no es fácil y que tienes que luchar por lo que quieres.
-¿Crees que si me esfuerzo algún día seré como papá y como mamá y como tú? Quiero ser guerrero e inteligente y saber tratar a las personas.
-Cuenta con ello, nene, cuenta con ello.

***

-Esto va a resultar extraño al inicio, pero ya sabes de que se trata. Voy a entrar a tu cabeza y remover un bloqueo. Mantente relajada.
-¿Bloqueo?
Eran las 7pm y estaba de pie en medio del estudio frente a Loki, tal como lo prometió íbamos a hablar sobre lo que desconocía de mí misma. Thomas estaba dormido y no nos interrumpiría. Yo igualmente hubiese querido estar durmiendo pero necesitaba saber eso.
-Escucha, cuando te traje aquí dijiste algo sobre unas visiones que tenías, pero debido a lo inusual y sorprendente de esas visiones puse un bloqueo en tu mente mientras dormías para evitar que te afectaran mientras trabajábamos con Thomas. Iba a quitarlo en cuanto las condiciones fueran óptimas pero debido a los acontecimientos de hoy y lo que dijo Fury, creo que es hora de quitarlo.
¿Visiones? Este hombre estaba loco... Yo no tenía visiones, no que yo recordara...
-Ok, haz lo tuyo, Loki.
Cerré los ojos y él hizo su magia, entró a mi cabeza y movió algunas cosas dentro de mi mente, ya no resultaba tan extraño ya que previamente había entrado a mis pensamientos. Cuando dejé de sentirlo urgando en mis memorias, abrí los ojos, todo daba vueltas y fue una suerte que hubiese estado sentada o me habría caído. Y sentí como si algo volviera a mí, algo que me había sido arrebatado.
-Bien, creo que estamos listos... Verás, tus visiones tenían que ver con la ciudad de los Aesir y el rey Gylfi, también te veías muerta en Asgard durante un ataque y llevabas puesto un vestido de novia, también hablaste sobre un mundo de hielo. El mundo de hielo, por obvias razones, es Jotunheim, el reino del que provengo.
-¿Me borraste la mente?
-No borré nada, puse un bloqueo.
-¿Qué mierdas te sucede Loki?- lo empujé por el pecho con las manos -. ¿Esto era parte del trato, hacer cosas dentro de mi cabeza?
Me di la vuelta y caminé hacia la puerta, pero él me abrazó por la espalda, bloqueando mis brazos dentro de su agarre. Me giré para verlo frente a frente y supe que su intención no fue mala.
-Era para evitar que entraras en crisis, con todo lo que había que hacer, no quería que tuvieras problemas.
-Eres un bastardo- murmuré con el rostro enterrado en su pecho. Luego puse de costado la cabeza, dejando la oreja pegada a él, escuchando el suave palpitar de su corazón, ese corazón fuerte, decidido e inquebrantable, pero sensible y dulce.
-¿Quieres escuchar lo que tengo que decirte?
-Sí, necesito saberlo.
-Bien, cuando dijiste lo de las visiones, pensé que era broma, pero creo que es algo más que eso... Creo que no son visiones sino memorias.
Me separé de golpe y lo miré en los ojos, esto estaba raro.
-Eso es ridículo, Loki. ¿Cómo podrían ser memorias?
-Ahí está la magia del asunto, pero no sé cómo lo tomarás.
-Sólo dímelo.
-Hay algo sobre mi pasado... La única mujer que amé con locura, lo suficiente como para querer contraer matrimonio con ella, era Sigyn, pero fue asesinada durante un intento de ataque a Asgard- su voz tembló y supe que en verdad la había amado.
Estaba tan acostumbrada a verlo fuerte, orgulloso y siempre sonriente, que verlo decaído me rompía el corazón y un horrible sentimiento de impotencia ardía en mi pecho, como si quisiera hacer un hoyo en mi alma. Me di cuenta de algo... Amaba a este hombre, estaba enamorada de él, de ninguna otra manera me dolería ver a alguien triste... Y mucho menos estaría dispuesta a renunciar a algo importante para mí con tal de que el recordarlo no lo afectara ni lo lastimara.
-Loki... No tienes que decírmelo si no quieres, está bien, no lo necesito saber- me interrumpió con la mirada, y no me atreví a desobedecer lo que sus ojos me imploraban.
-Katherin- esa forma de acariciar mi nombre se había ido y ahora sólo era una palabra pronunciada sin emoción alguna, aunque había un tono de dolor y de pasión mezclados -, creo que eres tú eres su reencarnación.