Lokison --- Terminada.

Confundida

Nos duchamos y vestimos (había un pants y unos tenis en la mochila, comodidad al fin, ropa de persona), yo ni siquiera me tomé la molestia de maquillarme, era domingo; Loki usó la misma ropa, por desgracia no tenía una maleta oculta en el departamento, sin embargo no se veía nada mal. Nos despedimos de todos, muy a nuestro pesar. Hicimos la promesa de estar presentes en la boda el sábado siguiente. Esa tarde comenzaría la mudanza de las pertenencias de Bri y de Vanessa, a las casas de sus respectivos novios. Podía ver el nerviosismo en ellas, no podían disimularlo. Era lógico, yo también había estado asustada cuando me mudé con Loki, aunque el objetivo principal nunca había sido formar una vida a su lado, a diferencia de ellas.
Cuando por fin estuvimos en la limosina, me desparramé sobre el asiento, estaba fatigada. Miré junto a mí las bolsas donde la ropa para la boda estaba pulcramente colocadas en un gancho, no podía esperar para sorprender a Loki con el color del vestido. Recordé su traje, y me sonrojé ante la idea de algún día verlo vestido así.
De la nada Loki comenzó a desvestirse, al notar mi expresión de incredulidad mezclada con sorpresa, sonrió y levantó una mochila junto a él.
-Pedí un cambio de ropa, no pensaba usar esto todo el día.
Alcé las cejas y asentí a modo de que había entendido. Me incorporé en le asiento y miré a través de la ventana, todo era tan aburrido, solamente la carretera.
>¿Qué tienes amor?
Me sacó de mis cavilaciones, había comenzado a divagar en torno a lo que había dicho Loki hacía un rato sobre los trámites de divorcio, ¿era cierto? ¿Estaba dispuesto a cambiar su estancia en la Tierra y su tranquilidad por su felicidad?
-Nada, es sólo que... ¿En serio vas a estar presente en la boda?
Miró hacia la ropa, al igual que yo. Se terminó de abotonar la camisa y se recorrió hacia donde yo estaba sentada, me ofreció sus brazos y yo me lancé a abrazarlo.
-Katherin, lo que digan no me harán cambiar de opinión. Te lo prometí y como sé que es importante para ti y para Brianna, lo haré, di mi palabra.
Alcé la cabeza hacia él, acaricié su mejilla mientras sonreía y lo besé.
-Gracias Loki, no sabes cuánto vale para mí que mantengas tu promesa.
-Puedo tener millones de faltas, pero nunca falto a mi palabra.
Me senté junto a él y recargué mi cabeza en su hombro izquierdo, él me rodeó con el brazo y besó mi cabeza. Esto era lo que tanto tiempo anhelé: una pareja con la cual sentarme a platicar de nuestras inquietudes para resolver las cosas juntos, una relación no basada en el placer o el sexo sino en la confianza mutua, una persona con quien compartir mis sueños. Luego de eso me dormí y estaba sorprendida, porque después de varios meses, volví a soñar sobre las ciudad de los Aesir y mi muerte mientras vestía un vestido de novia.

***

>Has estado muy callada, Katherin.
Habíamos llegado hacía unas horas, Thomas nos recibió con abrazos y besos, luego vimos películas en la sala mientras comíamos botanas y otras cosas. Ahora estábamos sólo Loki y yo, viendo una película de terror; a él le encantaba ver esas películas, ya que yo me abrazaba a él durante todo el rato.
-No es nada, sólo sigo molesta por lo de Tony... Y estoy apenada de que hayas tenido que lidiar con él.
Él me miró, no entró en mi cabeza pero era obvio que mi expresión no escondía la verdadera razón de mi debate interno.
-No... Es otra cosa, algo que yo dije... Es por lo del trámite de divorcio que mencioné, ¿no es cierto?
Suspiré, no podia ocultarle nada a Loki, o me conocía muy bien o había averiguado cómo urgar en mi mente sin que yo me diera cuenta.
-Es verdad, es por eso... No tenía idea de- hice una pausa -... Ni siquiera sé si lo dijiste para cerrarles la boca o si era verdad.
-Era cierto. No voy a mentir, obviamente nunca hubiera podido dejar de quererla ya que es la madre de mi hijo, pero esto se volvía enfermizo. Ni ella ni yo estábamos bien, y Thomas se comenzaba a aislar cada vez más porque se daba cuenta de las cosas... Eran cosas difíciles y duras para todos.
-¿Por qué no me lo dijiste?
-No había razón para atiborrarte de nuestros problemas.
-Supongo que tiemes razón.
El resto de la película transcurrió con un silencio entre nosotros, no quería hablar, no sabía qué decir. Una vez que acabó, recogimos los cubiertos y yo me dirigí a mi habitación, donde me encerré como cuando Brianna se enojó porque me iría. Quería llorar, quería hacerme bolita en una esquina y llorar histéricamente porque no sabía qué estaba pasando. Entonces llamaron a mi puerta.
>¿Qué pasa, Loki?
-Nena, quiero hablarte, abre por favor.
Me levanté y abrí la puerta.
-¿Sí?
-¿Te afecta que no te diga todo acerca de los problemas que teníamos? Porque en serio no planeo usarte como paño de lágrimas, no quiero cargarte todos esos conflictos que no te involucran.
-Loki, no es que me afecte ni que quiera que te desahogues conmigo, sólo es que no sé realmente qué hago aquí. No sé si estoy aquí por Thomas o por ti. Dímelo, estoy aquí, ¿para ayudar a quién?
-Katherin, entiendo que esto te resulte difícil, lo es también para mí. Dame tiempo y te dejaré entrar, sólo quiero tiempo.
-Pensé que habías dejado atrás a tus fantasmas, que habías cerrado ese ciclo con lo que me dijiste de Sigyn.
-Sigyn es otra historia, eso se acabó...
-¿Entonces ya no tengo que lidiar con tu amor por Sigyn sino con el amor por Helena?
-Creo que me estás malinterpretando...
-No malinterpreto nada, Loki... Sólo entiendo lo que sucede... Tal parece que sólo estabas buscando a alguien que te consolara por ambas pérdidas...
-¡Eso no es cierto!
-¿Entonces qué es?
No respondió.
>¿Es realmente por Thomas?
De nuevo nada.
>Dime una cosa, Loki... ¿Has conseguido algo que no sea por medio de tus poderes?
Estaba cabizbajo, no sabía qué me dolía, si verlo así o no saber el porqué de mi estancia ahí.
>Loki... ¿Me amas?
Alzó la mirada, parecía confundido.
-¿Qué?
-Dime si me amas. Si lo que sientes es sincero, olvidaré todo lo demás, pero dime la verdad.
-Yo... Ehhh... Katherin, yo...
-¿Lo ves? No sabes lo que sientes, y siento que no correspondes a mis sentimientos hacia ti... Hasta que lo sepas, quiero que nos mantengamos al margen, tú como mi jefe y yo como empleada.
-De acuerdo, si es lo que quieres- murmuró.
-Buenas noches, Loki.
-Buenas noches, Katherin.
Cerré la puerta... ¿Qué rayos estaba ocurriendo? Me sentía usada y confundida, herida... Me metí a la cama y lloré en silencio esperando que Loki no siguiera fuera de mi puerta, pero a la vez quería que entrara para poder abrazarlo... Estaba confundida, no otra cosa sino confundida.