No pude dormir, estaba triste, enfadada, molesta, cabreada, lastimada, herida, celosa, rabiosa, irritada, todo lo malo lo sentía, no podía entender el por qué?
Era las 12.00 y a las 14.00 tenía que estar en el estudio de grabación para repetir alguna escena, como tenía que estar en el aeropuerto a las 17.00 ya que mi vuelo salía a las 18.30, decido hacer mi maleta y ya llevármela, así directamente del estudio me iría al aeropuerto, suspiré ya que ayer no fue lo que me esperaba y hoy ya me marchaba.
Me ducho, me visto, y hago la maleta, ya era las 13.30, bajo a recepción para realizar el check out de mi habitación, y les pido que llamen a un taxi.
El taxi no tardó en llegar, subo y le indico la dirección donde me tiene que llevar.
Llego al estudio antes de lo que me había imaginado, se ve que cuando iba con Bruno daba más vueltas, para estar más tiempo a solas, lo que me hace sacar una sonrisa, subo y veo a todo el equipo pero Bruno no estaba, noto que mi móvil suena en mi bolso.
Era Bruno
Estoy abajo del hotel, bajas?
La verdad es que no me apetecía hablar con él, pero para ser educada tenía que contestar.
Ya estoy en el estudio, gracias.
Ya no me volvió a contestar, en unos 15 minutos apareció por la puerta, con cara de preocupación, tocándose el pelo en cada momento y resoplando, intente no mirarlo, me resultaba difícil, más que molesta estaba triste.
Nos pusimos a repetir alguna secuencia que teníamos pendiente por hacer.
Nos sentamos los dos en el sofá, en ese momento no tenía otra que mirarle, él sólo repetía "lo siento", y yo apartaba la mirada, cada vez que me lo decía.
Tenemos que hablar - me susurró.
No quiero ninguna explicación, no me debes nada, no somos nada para que me expliques que pasó - mi voz se entrecortaba, estaba nerviosa.
Mejor lo dejamos así como está - le susurre - no te preocupes, lo entiendo.
No quería hablar del tema, porque sabía que no iba a aguantar la presión, y al final, iba a llorar, los ojos ya los tenía aguados.
El director se acercó y nos colocó tal y como él pensaba que sería mejor, pero para mí, no me pareció la correcta, ya que él estaba sentado y yo tan cerca de él, mis piernas encima del sofá, rozándole, no quería ningún roce ya con él.
Empezaron a grabar y su mano toco mi pelo, yo tenía que interpretar esta vez, me resulta más difícil hoy que ayer.
Pero cuando me tocaba, seguía sintiendo lo mismo que todas las veces, sentía ganas que siguiera, sentía el deseo de besarle, de acariciarle, y que él hiciera lo mismo conmigo, quería estar a solas, que todo hubiera sido diferente, no quería sentirme mal, y menos el último día.Hicimos todas las escenas, y el director me comentó que por mi parte, ya estaba todo hecho.
Abrieron la puerta y apareció Phil, todo un amor, se acercó e intercambiamos los números de teléfono, se despidió de mí, dándome dos besos y deseándome un buen vuelo.
Bruno vino donde estábamos nosotros y me preguntó.
A qué hora tienes que irte al aeropuerto - su voz era entrecortada, y su mirada ya no tenía el brillo de siempre.
Miré el reloj y me asombre, el tiempo había pasado muy rápido, ya eran las 16.30 y tenía que estar en el aeropuerto a las 17.00.
Pues ya - le miré.