Entramos en el coche, en la parte trasera, estábamos en el parking por lo que cualquiera nos podría ver, pero en ese momento, ese pequeño detalle no tenía importancia.
Bruno se sentó y yo encima de él, empecé a desabrocharle la camisa que llevaba, estaba nerviosa, y me costaba quitársela.
Mientras él me besaba insaciable, estábamos con ganas.
Le quité la camisa, y tenía su pecho desnudo, sólo llevaba la cadena de oro en su cuello, estaba irresistible, no se lo que tenía que sólo su aroma me atraía tanto.
Me quitó el top que tenía, y el sujetador.
Empezó a acariciar mis pechos, a lamerlos mientras yo agarraba su pelo con fuerza.
Te voy a poner una barra en casa, para que me bailes así para mi solo - me dijo
Yo hago lo que tu quieras - le dije mientras mi respiración era cada vez más rápida.
Me encantas!! - me dijo - te necesito tanto tanto
Bruno, no pares - le dije - te necesito
Me separé de él para quitarme el pantalón y mi ropa interior y él aprovechó para bajarse sus pantalones y su bóxer.
Me volví a sentar encima, y noté piel con piel su excitación, bastante pronunciada.
Mmmm veo que te ha gustado mi baile - le dije
A mi solo no!! - me dijo - pero yo sólo pensaba en tenerte así esta noche, y se está cumpliendo.
Sus manos se centraron en mis nalgas, y empujaron con fuerza hacia él. Me encantaba esa situación.
Nos deseábamos y nos íbamos a tener, los cristales del coche estaban empañados de nuestro aliento.
Se colocó el condón, y entró dentro de mi.
Empecé a moverme con fuerza haciendo que el coche también se moviera, los dos gemimos, los dos suspiramos, los dos estábamos al máximo.
Nos mordíamos, lamíamos, acariciábamos con pasión, estábamos al límite, no nos cansábamos, no nos satisfacíamos a la primera, siempre queríamos más y más.
Nos gustaba estar así, nos deseábamos cada vez más.
Bruno era mi vicio, mi pasión, mi locura y no evitaba demostrarlo.
Me dejaba llevar por mis sentimientos, por mis ganas de tenerlo.
Era una locura estar allí, pero no nos importaba, seguíamos moviéndonos, besándonos y lamiendo nuestros cuerpos.
La pasión se volvía locura, y había parte de desenfreno.
Los dos suspirábamos, me encantaba ver a Bruno al máximo.
No pares - me decía
Y yo cumplía con sus deseos, no iba a parar yo también quería más.
No pares, amor sigue - me gritaba, cada vez más fuerte.
Llegamos al orgasmo y chillamos.
Nuestros cuerpos temblaron y cada vez yo iba más lenta. Sus labios seguían besándome, nos abrazamos.
Como veía la novela??? No se sí me esta quedando bien los últimos capítulos... Espero vuestros comentarios para guiarme.... Gracias HOOLIGANS