Al entrar nos quedamos helados al ver a una rubia que parecía Taylor en una mesa, pero no estaba sola, estaba con un chico, y lo peor era que ese chico era David. Sin pensármelo dos veces salí corriendo hacía aquella mesa.
-David, ¿qué haces aquí con esta?- Dije señalando a Taylor.
-Primero: Esta tiene nombre y es Taylor, y segundo: es mi amiga.- Dijo David serio, giré la cabeza para mirar a Taylor que estaba con una sonrisita. No sabía que decir, me quedé en blanco. Taylor estaba a punto de soltar una carcajada pero él me salvó de aquel momento incómodo, del que iba a salir llorando.
-Princesa vamos, tenemos mejores cosas que hacer, antes de estar con putas y subnormales.- Dijo Harry cogiéndome del brazo y llevándome a la mesa más alejada de ellos, que estaba al lado de una ventana.
-Gracias.- Dije mirando a la ventana.
-No me las des, te dije que siempre estaría ahí, para lo bueno y para lo malo más todavía, así que mira, te voy a dar una copia de las llaves de mi casa, para cualquier problema que tengas, ven y me lo cuentas.- Dijo dejando la copia de llaves en mis manos.
-Gracias Harry, no tienes por qué hacerlo.- Me levanté para abrazarlo con todas mis fuerzas.
-Lo hago porque me importas.- Dijo separándose.
Me senté de nuevo y vino el camarero. Pedimos lo que queríamos y esperamos a que nos lo trageran. Comimos, pagamos y salimos de allí. Fuimos directos a la casa de Harry. Entramos y nos sentamos en el sofá.
-Oye, quería decirte algo...- Dije nerviosa.
-Claro dime.- Dijo acercándose.
-Pues...que si somos mejores amigos, nada de besos en la boca ni cosas como "me gusta tu trasero", a no ser de que sea de broma.- Dije seria.
-Está bien.- Dijo no muy convencido.-Pero...¿Nos damos el último?- Dijo haciendo pucheros.
-Vale.- Dije dudosa.-Pero aún así yo soy mejor haciendo pucheros.- Dicho esto, me besó de una vez. Me cogió la nuca para que no pudiera separarme e introdució su lengua en mi boca sin avisar ni nada. Pero aún así me encantó. Empecé a acariciar sus rizos y él comenzó a acariciar mi espalda. Notaba que debía parar o sino pasaría algo que no debería pasar. Empezó a desabrocharme la camisa botón a botón, tenía que parar pero había algo que no me dejaba, no quería parar. Me quitó la rebeca azul y la camisa ya desabrochada también, haciendo que quedara en sujetador. Empecé a subirle su camisa hasta quitársela. Esto ya estaba llendo demasiado lejos. Me desabrochó el sujetador y estaba a punto de quitármelo cuando reaccioné.
-No, para, hemos dicho un beso.- Dije abrochándome el sujetador.
-Pero tengo que aprovechar que no volveré a hacerlo contigo.- Dijo como niño pequeño.-Yo tengo ganas, tú también, ¿por qué no?- Dijo sujetándome por la cintura y atrayéndome a él.
-Porque no.- Dije borde.
-Eso no es una explicación.- Dijo en mi oído. De repente me mordió la oreja.
-No hagas eso.- Dije nerviosa.
-¿Te gusta que lo haga?- Dijo con su preciosa voz ronca.
-Si, osea, no, no sé.- Dije más nerviosa.
-¿Te pongo nerviosa?- Dijo de nuevo.
-...- No dije nada. Él empezó a reirse un poco. Tenía la mano en mi rodilla y empezó a subirla hasta el borde de mis pantalones, estaba a punto de desabrocharlos cuando decidí hablar.-Deberías de dejar de pensar con Dick y pensar con el cerebro.- Dije quitando su mano de ahí, pero él la entrelazó con la mia.
-Pienso con los dos.- Dijo con una sonrisa.
-Madre mia...- Dije negando con la cabeza y riéndome a la vez. Volvió a intentar desabrocharme el pantalón.-Estate quieto.
-Venga, solo un poquito, que llevo sin hacerlo desde el día de la casa de campo de los padres de Louis.- Dijo guiñándome el ojo.
-¿Y?- Dije poniendo mi mano en su pecho y empujándolo.
-Que necesito hacerlo.- Dijo con cara pícara.
-Eres un depravado y un pervertido.- Dije con voz de niña pequeña.
-Y ahora voy a ser un pederasta pequeña niña.- Dijo poniendo de nuevo la mano en mis pantalones, pero esta vez si le dio tiempo a desabrochármelos.
-Harry no, hoy no, por favor.- Dije ya en serio.
-Está bien.- Dijo resignado poniéndose su camiseta.
Me puse mi camisa y la rebeca y me abroché los pantalones. Estuvimos viendo un rato la tele hasta que empecé a aburrirme, noté que Harry también se aburría hasta que empezó a cantar. Al empezar, supe cual era, Isn't She Lovely de Steve Wonder. Hizo una seña con la ceja y empecé a cantar junto a él. Terminamos de cantar y empezó a hablar.
-Te quiero.- Dijo abrazándome.
-Yo también, no te imaginas cuanto.- Dije aun con el abrazo.
-¿Quieres ver una peli?- Dijo de repente.
-Si, claro.- Nos quedamos un rato pensanso de nuevo.
-¡"EL DIARIO DE NOA"!- Dijimos de nuevo los dos a la vez.
Se levantó y puso la película. Nos encantaba aquella película. Me pasé prácticamente toda la peñi llorando en el pecho de Harry. Cuando terminó, me sequé las lágrimas y miré la hora en mi móvil. Eran las 20:00 pm. Me levanté del sofá y me di cuenta que ese mismo día había quedado con Brad para comer, bueno, pasado lo de anoche, necesitaba tiempo para volver a hablarle. Iba a irme pero oí la voz ronca de Harry.
-¿Te vas? ¿Tan pronto?- Me di la vuelta y tenía la cara un poco apenada.
-Si...bueno no sé.- Dije nerviosa.
-Quédate un rato más por favor.- Dijo mientras se acercaba y me cogía por la cintura.
-Está bien, pero solo un poco.- Dije esquivándolo.
Noté que hizo un pequeño gruñido. Estuvimos haciendo la cena, cenamos y lavamos los platos entre risas. Miré de nuevo la hora y eran las 23:00 pm. Ahora si devía irme.
-Me voy Harry.- Dije sonriendo mientras me acercaba para darle un abrazo.
-Y si...¿Te quedas a dormi? Podemos hacer una fiesta de pijamas.- Dijo riéndose.
-¿Otra vez quieres que me quede? Ya he pasado todo el día contigo.- Dije sonriendo.
-Por favor...- Dijo como niño pequeño.
-Está bien.- Dije no muy convencida.
Subimos al piso de arriba y entré directamente a la habitación de invitados. Harry entró y dejó una camisa de cuadros roja ahí. Me quité mi ropa y me puse la camisa. Me di cuenta de que me llegaba por las rodillas. Me acosté y tardé un poco en dormirme, ya que no me sentía bien durmiendo en otra cama que no fuera mia, pero conseguí caer en un profundo sueño.
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~Bajo el mismo cielo~ (Harry Styles Terminada)
Fanfiction-¿Bajo el mismo cielo?- Preguntó rozando nuestras narices. -Bajo el mismo cielo, siempre.- Dicho esto, lo besé, y no estaba dispuesta a dejarlo ir, nunca.
