DÍA 3

105 11 1
                                    

Francesco Gabbani

Toscana, 1997

Voy a llevar a la pequeña al parque un rato y de paso compramos la cena. Le dije a mi esposa que estaba en la sala viendo la televisión.

Si amor, solo no vayan a tardar mucho de acuerdo.

Tome a mi pequeña de la mano y salimos caminando por la acera, eran aproximadamente las cuatro de la tarde y el sol comenzaba a ocultarse por entre las nubes, era un atardecer perfecto y más aún porque estaba con mi copo de nieve, le decía así mi hijita porque su piel era muy blanca casi transparente, tenía unos ojitos azules tan profundos como el color del océano o del cielo en verano, tenia bastantes pecas en sus mejillas y su nariz y su cabello pelirrojo era el complemento perfecto.

Caminamos por el parque, siempre la sujetaba fuertemente de la mano pero esa tarde... esa tarde... cambio nuestras vidas para siempre.

Por mi trabajo casi nunca estaba en casa pero cuando estaba aprovecha todo el tiempo para estar con mi hija, desde que nació he tratado de estar junto a ella para que mi ausencia la sienta lo menos posible, debido a las giras, presentaciones de discos, entrevistas, Sanremo, firmas con disqueras y las grabaciones.

Ella apenas estaba comenzando a hablar, sabia decir mamá y papá lo que cualquier niño de 3 años sabe decir pero, ya caminaba bastante bien y casi no se caía, tal vez ese fue el motivo por el cual yo me descuide ese día.

Había bastantes padres con sus hijos en el parque, todo era tan normal como cualquier otro día en que la había llevado, sin embargo no lo era.

La lleve a que hiciera castillos de arena con los demás niños y... solo fue... un instante... que... le quite... los ojos de encima... y cuando regrese mi mirada ella ya no estaba, y debo decir que era niña que destacaba entre los demás.

¡¡¡ISABEL, ISABEL!!!

Todos me veían pero nadie se ofreció a ayudarme a buscar a mi hija, la busque por todo el parque, por las calles de alrededor pero, nunca la encontré...

90 DÍAS CONTIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora