-Hay que buscar un hotel para hospedarnos-. Dije un poco apenado por no decirles nada antes de salir del hospital-.
-¿Y el avión?-. Lo mire entrecerrando mis ojos con un poco de desconfianza-.
-Pensé que le darían el alta... después-.
-GENIAL FRANCESCO, AHORA HAY QUE MANTENERNOS AQUÍ, AUNQUE ELLA CORRA PELIGRO-.
-No corre peligro, ninguno de los dos, solo hay que buscar un lugar en donde pasar la noche-. Caminamos por la calle paralela al hospital en busca de algún hotel, sin embargo a decir verdad Abruzzo era una ciudad muy pequeña y había muy pocos hoteles y casi siempre tenían cupo lleno-.
-¿Pueden detenerse un segundo?-. Estaba agotada y no habíamos caminado prácticamente nada-.
-Ven siéntate aquí-. La sentamos en una pequeña banquita que habíamos encontrado-. Mejor pedimos un taxi-.
-Sabes que no hay muchos hoteles aquí, si encontramos uno con lugar va a ser un milagro-. Tome mi celular y marque el número de los taxis, prácticamente llego en cuanto colgué la llamada-. Vamos-.
-Espere dejen los ayudo a subir-. El taxista era de edad avanzada pero muy amable, nos ayudo a poner las dos mochilas en la cajuela del auto y el cerro la puerta del taxi en donde iba Sofía-. ¿A donde van?-.
-Estamos tratando de buscar en donde hospedarnos, ¿conoce algún hotel cerca?-.
-Si-. Él puso música tranquila y condujo con mucha precaución para no lastimarla con el movimiento del auto-. Pueden bajar a preguntar a haber si aun tienen habitaciones disponibles y si gustan los espero-.
-Eso es muy amable de su parte, yo voy-. Le dije a Gianluca, baje del auto y entre al recibidor ni siquiera tuve que preguntar nada; en el escritorio tenían un cartel con letras rojas que decía: "CUPO LLENO"-. Esta lleno-. El chofer condujo al otro hotel que estaba aproximadamente a 10 minutos-.
-Yo voy ahora-. Nada cupo lleno. El chofer nos llevo a todos los hoteles que existen en Abruzzo y ninguno tenia cupo-.
-Conozco una villa en donde dan cuartos por la tarde, no es muy bonito pero de que hay lugar hay lugar-.
-Nos puede llevar por favor-.
-Claro que si-.
-Condujo por casi media hora, hasta que por fin visualizamos la villa, eran casitas pequeñitas muy rusticas-.
-Vayan a preguntar-.
-Hola buenas tardes-. Al llegar al recibidor no había nadie-. ¿Están dando servicio?-.
-Buenas tardes, disculpe que lo hice esperar. Si aun tenemos lugar-.
-Perfecto, queremos hospedarnos aquí-.
-¿Cuantas personas son?-.
-Somos tres-.
-Todos nuestros cuartos tienen 2 camas individuales y un sofá-.
-Si esta bien-.
-Serian 3 euros por noche más el importe de las sabanas serian 5 euros. Villa numero 10-.
-Me entrego una pequeña llave y los 2 juegos de sabanas-. Gracias-. Sali y les indique que nos había tocado la villa 10, el chofer condujo hasta la entrada de la villa para que ella no tuviera que caminar-.
-No sabe lo mucho que le agradezco que nos haya traído aquí. ¿Cuánto es?-.
-8 euros, conozco lo difícil que es lograr hospedarse por aquí-.
-Yo pago Francesco-.
-No, tenga señor muchas gracias de nuevo-. Le 10 euros ya que tenia bien ganada la propina-. Ten Gian abre por favor-.
-Al entrar lo único que vimos eran las dos camas individuales casi pegadas unas con otras, un pequeño sofá y un radio-. Esto de verdad que no es muy agradable.-
-Es cómodo-. Dijo ella mientras entraba despacio a la villa-.
-Tendimos las camas y la instalamos a ella en la que pensamos estaba más cómoda, cerramos las cortinas y la puerta la atracamos con el sillón; ya era algo tarde para salir a buscar comida así que decidimos dormir y esperar hasta mañana para comer algo-.
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90 DÍAS CONTIGO
FanfictionGianluca Ginoble vive en Montepagno hasta que ayuda a una completa desconocida... Francesco Gabbani vive en la Toscana con su esposa y su hija de 3 años, llevan una vida feliz hasta que secuestran a su hija y el moviliza a toda Italia para encontrar...