Francesco -Me levante a poner el café y preparar el desayuno para todos; mire por la ventana de la cocina y lo único que vi fue la niebla espesa que había debido a la terrible helada que estaba haciendo. Cuando termine de preparar los desayunos, empecé a subirlos uno por uno; cuando llegue a la puerta de Sofía toque suavemente para no asustarla-. Cariño, prepare el desayuno-. Decidí abrir la puerta yo mismo y me encontré con nadie-. ¿Ermal?-. Dije mientras caminaba en dirección a su habitación-. ¿Ermal... Sofía esta contigo?-. Abrí la puerta de su habitación y nada; puse mis ojos en blanco y toque con brusquedad la puerta de Gianluca, quien abrió casi de inmediato-. Yo deje la puerta abierta de la entrada-. El me miraba tratando de fingir sorpresa-. Porque la cerraste con llave Gian-. Corrí lo más rápido que pude, abrí la puerta y salí, el aire calaba mis huesos y de inmediato empecé a temblar, así que regrese a la casa me abrigue lo mejor que pude y volví a salir-.
Ermal -Mi cuerpo se aferraba a su cuerpo cálido como si fuera la ultima cosa en este mundo. Al mirar su cabello vi que tenia escarcha, ¿acaso nevó anoche? Mis ojos se cerraban pero no porque tuviera sueño; escuche que alguien golpeaba la ventana de la camioneta, pero estaba tan débil que no pude dar la vuelta y mirar quien era-.
Francesco -Están hipotérmicos-. Gianluca, trae todas las frazadas que encuentres y dile a Fiorella que baje-.
Gianluca -Puse mis ojos en blanco y pensé para mi "ojala eso lo haga entender que Sofía debe ser mía". Tome todas las frazadas que me encontraba mientras llegaba a la habitación de Fiorella-. Puedes bajar ayudarnos por favor es urgente-.
Fiorella -El tono de voz de Gianluca sonó tan monótono-. ¿Qué pasa?-.
Gianluca -Se quedaron a dormir en la camioneta y ahora "según Francesco" están hipotérmicos-.
Fiorella -Me levante de un salto y me asome por la ventana-. Coño, pero que les pasa-.
Francesco -¡ERMAL! ¡SOFÍA!-. La puerta estaba congelada y era imposible abrirla; vi que Fiorella venia corriendo y Gianluca traía una pila de cobijas-. Necesito romper el cristal pero, necesito que ellos se cubran el rostro... pero creo que están desmayados-. Tome el mazo y me quede mirando la camioneta fijamente por unos instantes-. Romperé el vidrio de enfrente-.
Gianluca -Fran... espera tengo una mejor idea-. Tome un fierro que me encontré y comencé a hacer palanca en la puerta trasera, por fortuna a los poco intentos la puerta se abrió-.
Francesco -Una mejor idea hubiera sido dejar la puerta de la entrada abierta para que ellos pudiera entrar-. Fiorella miraba a Gianluca con un poco de rencor pero en el fondo se que ella se estaba riendo imaginando la escena que habrán hecho estos tres anoche. Entre a la camioneta tratando de que no entrara mucho del aire gélido-. Bueno al menos están respirando, dame una frazada Gian-. Para mi sorpresa Sofía estaba tan cálida-. No me dejes Ermal, por favor resiste... pronto entraras en calor. Otra cobija-. Su cuerpo tenia tantos espasmos que me era muy complicado el cubrirlo-. Ermal... piensa en tu hijita... no la puedes dejar su papá-.
Sofía -Se escuchaba mucho ruido adentro de la camioneta-. Pero que esta sucediendo-.
Francesco -Ermal esta...-.
Ermal -Estoy bien-.
Francesco -Gracias al cielo-. Lo abrace y note que poco a poco empezaba a tomar color su rostro-.
Ermal -¿Y Sofía, esta bien?-. Sabia que ella seguía en la camioneta pero Francesco no me dejaba verla por que estaba literal encima de mi cuerpo para que yo recuperara el calor-.
Francesco -Si. ella esta como si hubiera sido una noche de campamento-. Paso bastante tiempo-. ¿Crees poder salir caminando Ermal? Te cargaría pero estas demasiado alto-. Salimos los tres de la camioneta, envueltos en mil cobijas; Ermal se recargo en mi costado y Gianluca se puso a un costado de Ermal como intentando ayudarlo a lo cual Ermal lo ignoro por completo-. Voy a prender la chimenea-. Lo senté con cuidado en el sofá y Sofía se sentó a un lado de el, lo abrazaba de una manera que me hizo recordar a su mamá y a mi cuando éramos novios-.
Gianluca -Puse mis ojos en blanco al ver que no había salido como yo esperaba, ahora estaban más unidos que antes-.
Ermal -Mire a Gianluca en sus ojos se veía poco arrepentimiento. Sin hablar en voz alta o emitir ruido alguno, únicamente con el movimiento de mis labios le dije "CELOSO", el entrecerró sus ojos y después puso su mano sobre su rostro-.
Fiorella -Tengan sus desayunos-. No pude evitar soltarme a reí-. Gian pierdes tus puntos que te había dado la otra vez, no puede creer que seas tan toxico, ellos casi mueren de frio allá afuera-.
Gianluca -Yo no soy toxico-.
Ermal -Tienes razón solo eres un imbécil-.
Gianluca -El único imbécil aquí eres tu-.
Francesco -Basta, no quiero peleas en mi casa, quiero que los tres coman tranquilos-. Ser papá por poco tiempo no me dejo nada bueno, no sabia como evitar que se pelearan o se ofendieran. Terminando de comer sonó el teléfono de la casa, respondí y para mi sorpresa eran los de la oficialía diciéndome que los resultados de paternidad estaban listos para que mañana pasara por ellos, mi estomago se me revolví de los nervios, solo era esperar una noche más para saber si en definitivo Sofía no era mi hija o si tendríamos que hacer la prueba de desempate-.
ESTÁS LEYENDO
90 DÍAS CONTIGO
FanfictionGianluca Ginoble vive en Montepagno hasta que ayuda a una completa desconocida... Francesco Gabbani vive en la Toscana con su esposa y su hija de 3 años, llevan una vida feliz hasta que secuestran a su hija y el moviliza a toda Italia para encontrar...