90 DÍAS CONTIGO

DÍA 22

-Si yo entiendo que tienen que ir por los demás cantantes pero lo mío se los juro que es una emergencia... mañana... perfecto muchas gracias-. Estuve hablando con los encargados del transporte de Sanremo para ver si podían venir por nosotros un poco antes y lo único que conseguí fue un día menos de espera pero, bueno un día es un día-. Dicen que pasan por nosotros mañana-.

-Esta bien Fran, sabes que su trabajo de ellos también es algo pesado tienen que volar casi por toda Italia prácticamente sin descansar-.

-Si pero esto es una emergencia... Sofía, ¿Cómo te sientes?-.

-Estoy bien, la espalda me sigue doliendo pero solo eso-. De verdad que su instinto paternal lo tenia demasiado desarrollado, me pregunto si tendrá varios hijos o aunque sea uno-.

-Bueno, aquí solo hay baño pero no hay donde bañarse-.

-Nos tendremos que duchar hasta que lleguemos a tu casa-.

-Si aunque eso no es lo que me preocupa-. Tenía la sensación de que esos tres sujetos los habían estado siguiendo, que sabían en que hospital había estado internada, que nos habían seguido en el viaje que hicimos por encontrar en donde hospedarnos y que sabían que estábamos en la villa-.

-¿Que te preocupa?-. Le pregunte con mucha intriga-.

-Que ellos sepan que estamos aquí, suena extraño pero siento que ellos saben en donde esta ella, así que estaré más tranquilo en cuanto el avión llegue y nos lleve a la Toscana-.

-Pues si Fran, casi nadie en donde vives, aparte de que vives en plena montaña rodeado de arboles-.

-Tal vez es la sensación que me quedo de cuando paso lo de mi hija y... bueno tu sabes todo lo demás-.

-Es muy temprano para que estén despiertos-. Aún no había salido el sol y ellos ya estaban discutiendo y charlando. Estos hombres no descansan nunca pensé-.

-Lamento que te despertáramos pero tenia que hacer esa llamada de urgencia-.

-Descuida, ¿pudieron descansar?-.

-Algo así, de hecho casi no dormimos; había muchos moscos y mucho ruido-. Para el tamaño que tiene la ciudad de Abruzzo si que había sido una noche muy ruidosa-.

-Trata de dormir un rato, a penas son las 5 de la mañana, aparte pasaremos otro día aquí-. Le dije mientras me acercaba a ella para volverla a tapar, acaricie su cabello con mucha suavidad y comencé a susurrar una canción de cuna que siempre había funcionado con mi hija, ella se durmió pronto-.

PD: SE QUE ME FALTARON CAPITULOS PARA ACOMPLETAR LA MARATON PERO LOS SUBIRE A LO LARGO DE ESTA SEMANA.

NO OLVIDEN COMENTAR QUE TAL LES VA PARECIENDO LA HISTORIA HASTA AQUÍ O QUE LES GUSTARIA QUE INCLUYERA, TAMPOCO OLVIDEN SU ESTRELLITA.