90 DÍAS CONTIGO

DÍA 73 PARTE II

Ermal -Las pizzas llegaron antes de lo esperado, comimos y vimos una película, el ambiente se sentía realmente como al de un hogar. Camila se quedo dormida antes de que la película terminara, la tuve que despertar para lavarle los dientes, ponerle el pijama y recostarla. Mi hermana tenia su habitación exclusiva para ella, así que sin decir nada se fue a dormir. Sofía extendió sus brazos hacia mi, yo me arrodille y se abrazo de mi cuello con fuerza, me levante con cuidado y camine hasta la habitación principal, nos lavamos nos pusimos los pijamas y nos recostamos. Sofía se giro para quedar de frente a mi, me miro a los ojos, me beso, me sonrió y me abrazo para finalmente quedarse dormida. Yo no conseguí dormir absolutamente nada, tenia la preocupación a flor de piel (el solo hecho de pensar que no fuera compatible me provocaba insomnio pero si pensaba en que fuera compatible el remordimiento llegaba de inmediato con solo saber que mi hija dormía en la habitación de a lado). Llegue a tal punto en el que mis ojos se cerraban pero yo no dormía ni descansaba. No se en que momento logre dormir-.

***

Ermal -A la mañana siguiente, la luz que entraba por la ventana me lastimaba horriblemente los ojos, Sofía estaba acomodada de tal manera que el sol no tocaba su rostro, "maldición" pensé. Tengo dos opciones: la primera es levantarme y cerrar la cortina por completo y la segunda esperar a que mi hermana venga a molestar como siempre; absurdamente opte por la segunda opción... esperar-.

***

Sabina -Mire el reloj de la pared "09:22" demasiado temprano para levantarme. Di varias vueltas en la cama sin conseguir dormir de nuevo, con mucho fastidio me levante, busque mis pantuflas y salí de la habitación, pase por la habitación principal (coloque mi oreja en la puerta y para sorpresa mía no había ruido... de ningún tipo) que aburrido seria entrar, así que mejor entre a ver a Camila; ella dormía profundamente abrazada de un pequeño oso color marrón que Ermal tenia guardado en la casa-.

Ermal -Escuche los pasos de mi hermana y su respiración en la puerta pero no abrió, ni toco... mierda Sabina, regresa-.

Sabina - Decidí regresar y poner de nuevo la oreja en la puerta, pero el silencio seguí estando allí así que entre-.

Ermal -Que bueno que entraste, cierra la cortina-.

Sabina -Puse mis ojos en blanco y arrastrando los pies cerré la cortina-. Pareces mapache-.

Ermal -No pude evitar soltar una carcajada cuando mi hermana me comparo con un mapache debió a mis ojeras que seguramente eran de color negro-. Intentare dormir un rato, ¿Camila, sigue durmiendo?-.

Sabina -Si, afortunadamente ella si duerme no como su padre, es lo único bueno que le dejo Silvia, por no decir que es lo único-.

Ermal -Mi hermana tenia razón, después de eso salió y yo me dormí de inmediato. Cuando desperté eran cerca de la 1 de la tarde, me levante de un salto, me metí a bañar, me arregle y me dirigí a la salida, pero antes de que pudiera abrir la puerta escuche la voz de Camila decirme: "papá", me detuve en seco y retrocedí, la tome en mis brazos, bese su frente y le dije que regresaría lo más pronto posible-.