Mejor vida (II)

Capítulo 53

— Tengo que asistir a la reunión? — pregunté justo antes de salir de la oficina.

— Sí, te necesito allí para algunas cosas. ¿Sigues castigada? — preguntó con burla y sarcasmo.

— Ja ja, fíjate que sí. Que esa pareja fuera gente normal y corriente causó una demanada gigante para Foster. Y supongo que nunca me va a perdonar.

— Que se joda. Estás trabajando, el dinero que ganas no llega de a gratis. Y para conseguirlo tienes que ganarlo y con ella imponiendo reglas absurdas no es fácil — los primeros días lo tome como si nada. Pero cuando pasaron las semanas y las nuevas reglas continúan, me di cuenta de que esto va para largo —. Por cierto, estás muy guapa. Me alegra que estés comiendo más, ya se nota en como te queda la ropa.

Me sonroje por el comentario. Es verdad, estoy ganando peso otra vez, y estar obligada por mi jefe a comprar ropa decente me ayuda a sentirme mejor conmigo misma.

— Estoy cumpliendo órdenes, comer más, dejar de fumar y vestir bien. Una secretaria obediente — últimamente bromeamos mucho sobretodo un poco. Puede parecer loco, pero siento que Daniel se comporta como un padre, y eso me hace sentir genial. Quizá si me hubiera adoptado, no fuera igual.

— Todo esto es por ti niña. Me alegra que estés usando más seguido esa cabecita tan inteligente que tienes.

Dimos fin a la conversación al entrar en la sala de juntas. A diferencia de Adonai, Daniel me trae a todas y cada una de las reuniones. Aunque solo soy aprendiz y no secretaria fija, él cree que la mejor forma de aprender es asistiendo aquí y observando todo lo que pasa. Luego me hace un pequeño cuestionario para saber si presté atención, y siendo sincera, ha funcionado.

— Disculpen está junta tan improvisada — comenzó a hablar educadamente, presentando así la razón de estar aquí —. Hay un motivo muy importante que ya les haré saber. Primero, mi secretaria les entregará los informes de un proyecto que está en marcha desde hace un par de meses, que es fundamental para entender el resto — eso hice. Entregué a cada uno una carpeta con toda la información resumida, incluído está su hijo — Camila, por favor explica la iniciativa del proyecto.

Esto no estaba planeado.

— Bueno, para resumir un poco la información que tienen allí. Se trata de un proyecto de ampliación que nos va a permitir conseguir mucho más que ahora — estoy sudando, temblando y no tengo ni idea de cómo hablar sin grabarme. Pero no puedo quedar en ridículo, eso jamás —. La iniciativa de este proyecto se debe a lo provechoso que será ampliar los mercados. Permitiendo más empleo y una gran cantidad de demanda publicitaria, por la oferta producida mediante medios digitales alternos a los que estamos acostumbrados a usar.

— A lo que venimos señores y señoras — interrumpió mi explicación y le agradecí internamente —. Hace u tiempo les comenté sobre esta idea de expandir y modernizar la empresa. Llegó el momento de abrir una sala de operaciones dónde trabajaremos todo lo digitalizado y enfocarnos más en grandes campañas. A mayor amplitud, mayores son las ganancias.

— Por lo que veo ya tienen vistos los pro y los contra de esta iniciativa — comento uno de los accionistas.

— Afirmativo. Aquí Camila se encargó de hacer una encuesta digitalizada enfocada en lo que queremos mejorar en la empresa. Cómo pueden ver son más las ganancias que las posibles perdidas — respondió seguro y sereno —. Es un proyecto muy grande, que necesita mucha organización y dedicación. Por eso estamos todo aquí.

Hubo un silencio general de algunos segundos, mientras Daniel se toma su tiempo en beber agua y preparar las palabras.

— Entrego el puesto de CEO para encargarme de esta nueva etapa de modernizar la empresa — otro silencio se apoderó de la sala, un poco más tenso.