Novia Del Chico Millonario

•SETENTAISEIS•

Molly

Luego de terminar de bañarme y ya estar lista para salir del baño, con mi pijama puesto, me miré al espejo, cerré los ojos por unos segundos y respire profundo

Molly eres hermosa

Me repetí esas tres palabras en mi mente, abrí mis ojos sonriendo y confirmando mis pensamientos, era hermosa y no debía dudar de eso.

Pero las imágenes de esas chicas tan elegantes se repetía en mi cabeza, las palabras de Keith se convirtieron en un disco que se quedó pegado y se repetía una y otra vez.

Joder, ¿Por qué tengo que pensar en eso?

Molly basta.

Respire profundo y salí del baño antes de volver a pensar en eso.

Axel apenas me vio salir, se puso de pie con una sonrisa.

- Buenas noticias, Neitan arregló todo para que en 7 días firmemos los documentos de la transferencia.

- Que genial - hablé sin mirar sus ojos y agradecí que mi celular comenzará a vibrar - Debe ser mi madre - caminé hacia mi bolso para tomarlo.

- Okey, te dejo hablar, yo me iré a duchar - respondió serio caminando hacia el clóset, tomando una toalla y regresando al baño.

- Alo - contesté confundida.

- Molly, ¿Cómo es eso que te fuiste a vivir con Axel? - escuché la voz de Dakota y respiré profundo - Molly, ¿estás ahí?

- Sí - susurré - Lo siento, no te conté porque todo pasó hoy.

- No me pidas perdón - soltó una risa - No te preocupes, que yo soy la más feliz, ¡este es un gran paso para la humanidad! - gritó emocionada.

- ¿De qué hablas?

- De que estás madurando, o sea, ya no vives con tu madre, y pensar que antes decíamos que yo sería la primera en irme de la casa.

- Solo será por unos días.

- ¿A quien engañas? Esos días luego se convertirán en semanas, luego en meses y luego en años.

- No lo sé - respiré profundo - Dakota, ahora debo cortar, te llamo mañana, hablamos luego - corté la llamada y caminé hacia la cama

¡Dios! ¿Qué me está pasando?

Dejé el celular en la pequeña mesa de al lado y me metí entre las sábanas, tal vez si comenzaba a dormir olvidaría todo esto, porque realmente estoy pensando muchas estupideces.

No sé si Axel se bañó muy rápido o por estar pensando en estupideces el tiempo se pasó volando, pero apenas sentí el sonido de la manilla de la puerta del baño, me acomodé y cerré mis ojos haciéndome la dormida.

- Molly, ¿Ya te dormiste? - escuché su voz acercarse y solo fingí dormir - Debo recordarle a la señorita Molly que puede fingir con quien quiera, ¿Menos conmigo? - sentí como se subió a la cama y  apreté los ojos levemente - Porque sé perfectamente cuando lo está haciendo - suspiré abriendo mis ojos y encontrando su rostro cerca del mío.

Agaché la mirada levemente, pero la subí a su rostro al darme cuenta que no traía camisa.

- Estaba empezando a dormir, no fingía - mentí y soltó una risa.

- También sé cuando mientes - murmuró y llevó su mano a mi rostro para hacer mi cabello a un lado - ¿Qué pasó en la cena? - preguntó serio - Y no me mientas, eres pésima haciéndolo.