Novia Del Chico Millonario

•NOVENTAIDOS•

Axel

Me quedé mirando el celular mientras sonaba y el nombre de Molly aparecía en la pantalla.

Dejó de sonar hasta que cortaron la llamada y desvíe mi mirada a la caja que estaba a un lado del escritorio.

Todo el día había pensado en las fotografías de esa caja, se veían tan reales que miles de teorías surgieron en mi cabeza, me costaba creer que Molly se las haya tomado bajo su responsabilidad, ella era tan tímida y se ponía nerviosa con tan solo usar poca ropa, recordaba que me había dicho que yo era el primer chico que la veía en ropa interior y que con su ex no había pasado nada.

Pero, ¿Y si me mintió? ¿Y si no es la chica que yo creo que es?

Respiré profundo dejando mi celular sobre la mesa y refregué mi rostro, no podía seguir pensando en teorías que tal vez no eran reales, no podía juzgar a Molly por lo que hizo o no hizo, no podía culparla por su pasado o por algo que tal vez es una confusión.

Dejé de pensar estupideces y tomé el celular para devolverle la llamada

- Axel - habló apenas contestó - ¿Estás muy ocupado? - su voz sonaba extraña y apagada, completamente diferente a como había sido en la mañana.

- No - respondí sin dejar de mirar la caja - ¿Ya estás en tu casa? - pregunté desviando mi mirada.

- No - susurró - Me fui recién.

- ¿Pasó algo? - pregunté confundido - ¿Ahora dónde estás?

- Llegando al cementerio - respondió - ¿Puedes venir? - preguntó despacio

- Claro que sí, espérame ahí, llego en unos minutos.

- Okey, aquí estaré - susurró antes de cortar la llamada.

Nuevamente respiré profundo olvidándome de las teorías que surgían cada segundo en mi cabeza, confiaba en Molly y sé que es una gran chica, no puedo confiar en las palabras de su ex y no en ella.

Apagué el computador, me puse de pie tomando mis cosas y la caja con las fotografías, caminé hacia la salida apagando las luces de la oficina y salí hacia el ascensor.

Subí al ascensor y miré nuevamente la caja, la iba a abrir, pero el ascensor se detuvo en el piso de abajo y las puertas se abrieron dejando ver a Neitan junto a Petter.

- ¿Y tú? - preguntó Neitan mientras entraban - ¿No qué te quedarías hasta tarde? - preguntó

- Cambie de opinión - respondí.

- ¿Entonces irás a cenar con nosotros? - preguntó Petter - ¿Y traerás a Molly?

- No creo - respondí - Tal vez otro día.

- Pero si vendrán a mi cumpleaños, ¿Verdad?

- Claro que sí - afirmé - ¿Crees que me perdería ver tu cara llena de pastel? - pregunté y soltó una risa.

- Oh, hablando del pastel, ¿Papá ya lo mandaste a hacer? - le preguntó a Neitan - Quiero un pastel gigante y que sea de Fornite.

- ¿Qué pasa si es pequeño y no es de Fornite? - le preguntó.

- Dijiste que si iba a la escuela tendría el pastel que quería - habló cruzándose de brazos - Tú dices que es malo mentir.

- Okey, aún me quedan unos días - habló riendo - No te preocupes.

- Tío, tu dijiste que Molly cocinaba, ¿Ella sabe hacer pastel? - me preguntó.

- Sí, es la mejor.

- Papá, pídele a ella que lo haga - habló emocionado.