•CIENTO CINCUENTA Y OCHO•

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Axel

Bajé del auto y miré la agencia de modelaje que Keith y Jackson habían creado.

No tenia planeado venir, pero Deborah tenia razón, mañana debía venir al testamento de mi abuela y no pasaba nada si adelantaba el viaje

No le respondí a Jackson y estaba seguro que pensaría que ya no vine, el evento empezaba a las 8 y ya eran casi las 10 de la noche

- Está hermosa - habló Deborah bajando de su taxi y acercándose hasta mi - Te dije que se veía mejor en persona.

- Hiciste un buen trabajo - admití

- Keith hizo el boceto y quedó tal cual querían - suspiró feliz - Vamos, hay que entrar o ya todos se irán.

Asentí con la cabeza y caminamos hacia la entrada

Entramos al lugar y los meseros nos guiaron hasta un gran salón donde estaban todos

Mi vista solo se fijó en el salón, era elegante y amplio, realmente habían hecho un buen trabajo al crearlo y sabía que Jackson y Keith estaban felices por el resultado.

Bajé mi mirada cuando Jackson se acercó hasta nosotros con una sonrisa en su rostro.

- Hermano-primo - estiró su mano y la estreche con la mía - Mejor tarde que nunca

- Felicitaciones Jackson, todo luce muy bien - afirmé.

- Ni siquiera me avisaste que vendrías, querida Deborah, ¿Qué tal? - se acercó a ella saludándola

- Todo muy bien, el vuelo se retrasó por eso llegamos tarde.

Jackson iba a hablar, pero se detuvo cuando Keith llegó a nuestro lado junto con Molly

Sentía su mirada sobre mi, pero no quería mirarla y tampoco lo iba a hacer.

- Han llegado, que felicidad - Keith se alejó de Molly y saludó a Deborah.

- Felicidades, todo se ve muy bien - respondió

- Gracias a ti y a Axel - se acercó a mi dándome un suave abrazo - Gracias por venir

- Felicidades - respondí sin decir nada más

- Ya tendremos tiempo para conversar, pero Deborah, nos preguntaron por ti - señaló Keith y miró de reojo a Jackson

- Ah si, te queremos presentar a... - miró a las personas - A los demás, vamos

- Claro - aseguró y Keith tomó su brazo haciendo que caminara.

Sabía perfectamente lo que habían hecho, querían dejarme a solas con Molly, pero yo no quería estar frente a ella, no sabía que estaría aquí y no estaba en mis planes encontrármela

Sin dudar me giré para irme, pero apenas iba a dar un paso, su mano tomó mi brazo.

Me giré dando un paso hacia atrás para alejar su brazo, levantó la mirada conectándola con la mía y en una fracción de segundos mi corazón se detuvo completamente.

Molly, la chica de la que me enamoré completamente, pero también es la chica que me falló y decepcionó completamente y eso no lo iba a olvidar.

Su mirada seguía exactamente igual, reflejaba todo lo que sentía y por un instante sentí la necesidad de terminar con nuestra distancia y abrazarla

Pero dejé mis pensamientos de lado, no iba a hacer esa estupidez,  no podía olvidar todo lo que sucedió y no iba a retroceder todo lo que había avanzado.

Había aprendido a ocultar mis sentimientos, pensamientos y emociones a la perfección y por ningún motivo volvería a mostrarlos y mucho menos a Molly

Novia Del Chico MillonarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora