•CIENTO CINCUENTA Y SEIS•

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Axel

Apagué la alarma y dejé el celular sobre la cama.

Ni siquiera sabía para qué seguía poniendo alarma, si ya me había acostumbrado a despertar a las 5 de la mañana

Caminé hacia la cocina para tomar una lata de bebida energética y la llevé hacia la sala donde estaban todas las máquinas del gimnasio.

Subí a la trotadora dejando la lata a un lado, comencé a trotar fijando mi mirada en el ventanal y en el sol que poco a poco iba saliendo

Luego de dos horas de ejercicio, fui a darme una ducha con agua fría

Por mucho frío que hiciera, mi cuerpo ya se había acostumbrado a bañarme sin agua caliente, sentir el agua helada recorrer mi cuerpo se había vuelto parte de todas mis mañanas

Terminé de ducharme, sequé mi cuerpo tirando la toalla al suelo y comencé a vestirme.

Miré la hora en mi celular, eran casi las 7:40, guardé el macbook junto con unos documentos en mi maletín y salí del departamento.

Apenas salí, sentí como la puerta del departamento de Jessy se abría.

- Oh, Axel, que coincidencia - habló con una sonrisa - Siempre nos encontramos a la misma hora

- No me fijo en ello - respondí - Permiso - comencé a caminar hacia el ascensor y a los segundos sentí sus pasos a mi lado.

- ¿Hoy que harás? - preguntó - Es sábado y me han invitado al club, ¿Quieres ir?

- No - subí al ascensor y entró detrás de mí

- Axel, anda, no seas aburrido, vamos a divertirnos - se acercó quedando frente a mi - Podemos tomar unas copas - susurró llevando su mano a mi pecho - Bailar y...

- Ya te lo he dicho en reiteradas ocasiones Jessy - la detuve quitando su mano - No quiero ir a ningún lugar y mucho menos contigo

- Bien - me interrumpió - Entonces no saldremos, vamos a mi departamento o al tuyo y disfrutamos de esta noche

- Que no...

- Como amigos - volvió a interrumpirme - La última vez me comporte y la pasamos bien - suspiré - ¿Entonces nos vemos esta noche?

- No - respondí

- Dios, Axel, que aguafiestas, eres tan amargado y frío - se quejó - Pero no me rendiré, en algún momento aceptarás mis ofertas - aseguró acercándose rápidamente para besar mi mejilla - Nos vemos, querido - se despidió apenas las puertas del ascensor se abrieron.

Respiré profundo saliendo del ascensor y limpiándome la mejilla, seguramente me había dejado marcado su labial, odiaba que hiciera eso, mi paciencia se estaba acabando y en cualquier momento la sacaría de este edificio.

- Good morning mister Axel - saludó el portero.

- Good morning, Deborah is out yet? - pregunté

*Buenos días, ¿Deborah ya salió?

- No, but there it comes - indicó y me giré para verla

*No, pero ahí viene

- ¿Traes los documentos? - pregunté apenas se acercó

- Good morning - saludó al portero - Y buenos días Axel, ¿Qué tal amaneciste?

- Al grano Deborah, necesito los documentos

- Uy, de malas como siempre - murmuró - Ten, aquí esta todo - me dió una carpeta y apenas la tomé me giré para salir del edificio.

Caminé hacia mi auto mirando de reojo los papeles que estaban dentro de la carpeta.

Novia Del Chico MillonarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora