•CIENTO VEINTICUATRO•

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Axel

Willy se quedó dormido por la medicina que le dió la enfermera, lo miré mientras dormía y respiré profundo sin creer todo lo que estaba pasando.

Salí de la habitación y Ashley se puso de pie apenas me vió.

- Willy se acaba de dormir - le indiqué antes que me preguntara - La enfermera me dijo que es probable que duerma hasta mañana.

- Sí, lo mismo me dijo el doctor, pero quería hablar con él antes que se durmiera - suspiró cruzandose de brazos.

- Ahora me voy, pero regresaré mañana temprano, avisame si pasa algo durante la noche.

- De acuerdo, te avisaré cualquier cosa - asentí con la cabeza - ¿La prensa sigue afuera?

- No lo sé y no me interesa - respondí - Eso deberías solucionarlo tú.

- Axel, no están aquí por mi, están por ti, quieren saber qué pasa contigo, yo...

- Ashley - la detuve, porque no quería discutir - Tú solo evitalos y yo haré lo mismo.

- Bien - desvió la mirada.

- Y sobre Molly, no quiero que vuelvas a culparla ni a hablarle como lo hiciste.

- No fue intencional, estaba asustada por Willy, pero me disculparé con ella cuando pueda y...

- No - la interrumpí - No te acerques a ella, solo mantente al margen.

- No quiero dañar a Molly ni la relación que tienes con ella - explicó - No te preocupes por eso y si Molly será la madrastra de Willy, me gustaría tener una buena relación con ella.

- Solo no la molestes, porque si lo haces, no me quedaré de brazos cruzados.

- Lo tengo claro, no te preocupes.

- Bien, avisame si le pasa algo a Willy - asintió con la cabeza y me alejé de ella para ir al estacionamiento.

Ignoré a los periodistas que notaron mi salida, solo subí rápidamente y apenas logré alejarme de la clínica, marqué el número de Molly.

Me extrañó que no haya respondido la llamada, por lo que aceleré para llegar antes a la casa.

Luego de unos minutos sonó mi celular y sonreí al ver el nombre de Molly.

- Molly...

- ¿Ya vienes en camino? - me interrumpió rápidamente.

- Sí, ya voy en el auto, te llamé, pero no respondiste, ¿Pasó algo? - pregunté al notar el sonido de su respiración agitada.

- Solo quería saber dónde vienes - respondió luego de unos segundos - ¿Te fue bien con Willy? - preguntó cambiando de tema.

- Sí, lo primero que me dijo era que quería otro pastel, pero sin nueces - respondí recordandolo - Pero se ve mucho mejor y no está decaído ni triste, al contrario, está muy hablador.

Doblé hacía la cuadra de la casa y aceleré al notar que se quedó callada sin responder.

- Molly, ¿Me escuchas? - pregunté viendo si se había cortado la llamada.

- Lo siento, mejor hablamos cuando llegues, ¿Te falta mucho?

- No, ya estoy afuera - respondí deteniendo el auto en la entrada.

- Iré a abrir - cortó la llamada rápidamente.

Bajé del auto y me acerqué a la puerta, iba a abrirla, pero sentí como quitaban el seguro del otro lado y abrió la puerta.

Novia Del Chico MillonarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora