•CIENTOTRES•

33.2K 2.4K 1.5K
                                    

Abigail

Apenas salí de la pastelería suspiré mirando el cielo y las pequeñas gotas que caían de las nubes.

Justo cuando llovía mi hermana no me prestaba su auto y dejaba que me mojara, aunque me dijo que llevara un paraguas, la ignoré pensando que no caería ninguna gota y ahora estoy pagando las consecuencias.

Me puse la gorra de la chaqueta y comencé a caminar rápido hacia la parada de buses, no quería mojarme y mucho menos mi cabello o a los segundos parecería un espantapájaros.

Poco a poco comenzó a llover más fuerte, como si las nubes se pusieron de acuerdo para llorar.

Me reí sola al pensar que las nubes lloraban y por eso llovía.

Pero miré molesta a las personas, todas estaban con paraguas o en auto, la única que se estaba mojando era yo.

Aceleré mis pasos sin importarme chocar con alguna que otra persona, solo quería llegar al paradero para dejar de mojarme.

Apenas llegué me puse debajo de y respiré profundo quitándome la gorra.

Amaba la lluvia, pero no me gustaba irme toda mojada a casa, porque sabía que luego me daría flojera cambiarme de ropa.

Miré la hora en mi teléfono, el último bus debía pasar en unos minutos, por lo que me senté mirando a las personas que caminaban tranquilamente con sus paraguas.

Mi vista se fijó en un pequeño niño que llegó corriendo al paradero, se quedó parado y se cruzó de brazos mirando a su alrededor.

Al sentir mi mirada, bajó la suya dándome la espalda, pero pude ver perfectamente que estaba todo mojado y parecía como si no supiera donde estaba.

Miré alrededor, nadie venía con él y tampoco se veía que alguien lo estuviera buscando, pero el niño miraba la calle como si estuviera buscando a alguien.

- Hola pequeño - hablé llamando su atención - ¿Te puedo ayudar en algo? - pregunté - ¿Buscas a alguien o alguna dirección? - negó con la cabeza ignorándome completamente.

Me quedé callada por unos segundos, pero se notaba que estaba perdido y no podía quedarme de brazos cruzados.

- ¿Estás perdido? - pregunté poniéndome de pie - ¿Quieres que llame a alguien? - levantó su mirada hacia mí y dio un paso hacia atrás - Tranquilo, no te haré daño - afirmé sonriendo.

Pero seguramente parecía una loca recién salida del manicomio y si yo fuera ese niño, ya habría salido corriendo.

- Soy Abigail - me presenté - Espero el bus, ¿Tú esperas a alguien?

Nuevamente me ignoró y me quedé callada, claramente yo era una extraña y no hablaría conmigo, si yo fuera él, tampoco lo haría, pero no podía hacer como si no estuviera aquí.

- No me tengas miedo, no soy una secuestradora, asesina o... - me detuve al ver que probablemente lo estaba asustando más - ¿Te parece si nos sentamos? - pregunté tomando asiento - Podemos charlar mientras espero el bus, así no estás tan aburrido y yo tampoco.

Nuevamente me ignoró y me sentía como una estúpida tratando de hablar con él.

No sabía cómo sociabilizar con un niño, no quería asustarlo, quería ayudarlo, pero parecía que cada cosa que decía lo asustaba y me miraba como si fuera una loca.

Pero me sorprendí cuando se sentó casi a mi lado y agachó la mirada moviendo sus pequeños pies.

- ¿Esperas a alguien? - pregunté despacio - ¿O estás perdido? Porque no creo que a un niño tan pequeño como tú, lo hayan dejado estar solo por aquí y mucho menos con lluvia - hablé rápido.

Novia Del Chico MillonarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora