Capítulo 95: FINAL

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~ Aarón ~
La vida lucía mejor si estaba contigo

16 de enero del 2026
Un mes después...

Derek me había llamando para celebrar que podía poner a funcionar la constructora sin ningún impedimento. Estaba de visita y no pude rechazarle una copa. Era muy insistente y se lo había dicho, a lo cual sólo respondió que se lo debía a la esposa que escogió.

Lo invité a Eclipse, los papeles ya estaban a mi nombre así que era técnicamente mi negocio rentable y de donde mi padre supondría que era mi fuente de ingresos. La supuesta cara de la constructora era Derek, alguien que apostó por hacer su propio imperio en Norteamérica, aunque yo manejaba todo desde las sombras, a Derek no le importaba hacer del dueño y lucirse en cenas o pedir disculpas por faltar, aunque me advirtió que no podría seguir haciéndolo por mucho.

—Mis viajes no serán tan seguido y tus socios necesitan alguien en quien confiar.—asentí de acuerdo—Tendrás que hacerte cargo o enviar otro representante, porque así es como me he presentado.

—Está bien. Entiendo. Ya cumpliste tu parte, el resto es un favor como amigo.—señalé de acuerdo tomando un trago de mi bebida.—Solo quería despistar a mi padre, que creía que la constructora era mía. No le importaría mandar a derrumbar el edificio.

—¿Uno de siete plantas? Es un dineral y...tu padre ya no puede darse ciertos lujos.—sonrió con esa malicia que lo caracterizaba.

No nos quedamos por mucho más tiempo. Al día siguiente debía ir a la oficina a ver qué todo siguiera en marcha. Todo lo programado iba sobre las riendas pactadas, ya que el funcionamiento fue antes de lo esperado bajo la insistencia de Derek Hoffman, quien me prohibió desligarme del proyecto cuando aún estaba a tiempo, no me importaba regalarle el dinero, que se quedara con la constructora, ya no tenía fuerzas para continuar y me instó tanto que para que se detuviera seguí no sé cómo apresurando cada detalle.

La constructora iba con todo en orden y aunque tenía algunos planos que revisar para modificar y calzar mejor con lo que los contratistas pedían no pude concentrarme, no era una prioridad y aún tenía plazo así que no me forcé a trabajar como lo había hecho durante todo ese mes.

No dejaba de darle vueltas en donde podría estar Julietha, pasé varias veces por la casa de la playa creyendo qué tal vez podría haberse escondido allí, pero ni rastro de ella. Dominik no recibió mensaje alguno, Logan tampoco e incluso contacté con Kaleb para saber si se había comunicado con él, y no tenía noticias suyas hacía tiempo.

Ya era un nuevo año, era 16 de enero y ese día se cumpliría un mes exacto desde que Julietha parecía haber desaparecido de la faz de la Tierra. Hacía unos días había cumplido cuatro meses de embarazo según me indicó Dominik y si no calculaba mal las fechas.

Cada día que no sabía nada de ella, era un día perdido para ver crecer a nuestro hijo. No pude evitar sentirme algo resentido con ella por haberme prohibido vivir esa etapa a su lado. Sentía el corazón duro aunque igual de enamorado e idiota cada vez que pensaba en que estaría haciendo en ese momento.

Observé el cuadro que tenía colgado en una de las paredes de la oficina, por encima de un juego de sillones con una mesita en el centro. Eran unas sombras abrazadas de dos personas mirando el mar, éramos nosotros dos, y maldije en silencio por no estar así en ese instante con ella. El telefonillo de mi escritorio hizo que me controlara y la voz de Idoia interrumpió mi silencio.

Contigo hasta el infinito (INFINITO #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora