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Una chica de cabello morado y un aspecto aparentemente gótico se encontraba saludando a sus padres y hermano menor, Zim estaba parado completamente estático en la puerta de la casa; "¡¿por qué demonios está pasando esto?!", Se preguntaba, "de todos los idiotas que pudieron venir... ¿Por qué tenía que ser ella?".

—¡Vaya!, miren quien llegó– Habló la chica al darse cuenta de la presencia del castaño —¿Como está mi primo favorito?, ha pasado mucho tiempo– Mencionó para posterioremente abrazar fuertemente al contrario, cosa que obviamente lo molestó.

El ojiazul soltó un quejido y la empujó en un intento de separarla de él; sin embargo fue totalmente en vano, pues la chica seguía aferrada al abrazo. Casi parecía que lo hacía a propósito para molestar al de vestimenta rosada.

El chico solamente deseaba subir a su habitación y no salir hasta que la chica se fuera, irónicamente (tratándose de una visita, y peor aún, de sus tíos) sus padres le pidieron que pasara algo de tiempo junto a Tak por "los viejos tiempos". Aunque era realmente obvio que al castaño no le agradaba para nada esa idea.

Estaban sentados en uno de los sofás de la sala mientras los padres del ojiazul se encontraban hablando con los tíos de este, la chica hablaba y hablaba sobre cosas que aparentemente habían pasado hace años; algunas veces golpeando al contrario a modo de "juego" (aunque era más que obvio que sólo quería molestarlo).

Después de unos minutos con una horrible tensión de por medio entre ambos parientes, Zim subió lo más rápido que pudo hacia su habitación mientras sentía que los nervios lo derrotaban. Ignorando completamente la presencia de otros dos hombres en el lugar.

—¡Hermanito!– Exclamó Gir para ir tras él, mientras sus padres se miraban con cierta preocupación por la actitud del mayor.

—¿Qué le sucede?– Preguntó el hombre de chaqueta roja, su padre respiró hondo e intentó contarles al respecto. Pues ellos no estaban enterados sobre el reciente diagnóstico del ojiazul.

—Bien, e-es sólo que...–

—Zim tiene autismo– Habló la mujer en un tono tranquilo al notar el obvio nerviosismo en su esposo.

Por conveniente o irónico que pueda sonar, Tak pareció un tanto interesada al escuchar las palabras "autismo" y "Zim" en la misma oración. Una sonrisa de diversión se formó en su rostro, al parecer tenía algo en mente.

Mientras tanto, el mencionado se encontraba en su habitación; estaba recargado junto a su cama mientras se abrazaba las piernas con ambos brazos. Su respiración estaba un poco agitada debido a los nervios, mantenía la vista el el suelo intentando calmarse.

—... ¿Hermanito?, ¿puedo entrar?– Preguntó el menor desde el marco de la puerta, recibiendo una respuesta afirmativa del ojiazul.

Gir se acercó junto al chico y se sentó a su lado —Sé que no te gusta cuando Tak se porta así contigo– Mencionó —¡Deberíamos decirles a mamá y papá que le pongan un alto!– Habló el menor en un tono decidido.

El castaño observó a su hermano de una forma un tanto incrédula; "¿como espera que lo hagamos?", Pensaba, "ella no se detendrá así como así".

A•U•T•I•S•M  AU! [Invader Zim]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora