V e i n t e

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—¡Que hiciste el amor con Pablo Alborán y no te acuerdas de nada! —exclama Coral. Después de que ambas se fueron de espaldas al enterarse de ello, les pedí que fuéramos a mi casa para tratar este tema con discreción y calma.

—¡Shhhh! ¡Parece que no te oyeron los de la otra cuadra! —reprendo molesta.

—Calmate.

—¿Cómo quieres que me calme?

—Primero... gracias por no ocultarnos el hecho de que pasaste una noche de sexo, calor y vicio con el Pablete —me guiña un ojo Andy. 

—¡Tómense las cosas con seriedad! —espeto.

Aunque, los pocos recuerdos que tengo le hacen ver que... fue realmente una muy buena noche.

—Pues lo has pensado. Estoy empezando a pensar que nos ha mentido y si te acuerdas de lo que pasó.

—¡No! —decido no contar los vagos recuerdos de la noche que viví, y cuento lo que pasó al día siguiente y lo de las flores.

—¡Qué hermoso! No cabe duda que él es un amor.

—Pues... fue un imbécil y arrogante.

—Eso ni te lo crees tú, mira nada más la notita que te mandó junto con las flores. No cabe duda de que... ya sabes... ¿Y si lo remedia haciéndote el amor como si fuera la primera vez? —comenta Coral y mis mejillas se tornan rojas.

—Yo...

—Sería muy lindo.

—Excepto que no tiene mi número telefónico y que ahora estaré muy ocupada con mi nuevo trabajo.

Y eso es lo que deseo.

—¿Y cuándo conocerás al famoso?

—El próximo lunes.

—Creo que será un encuentro muy interesante.

—Si sueñas con que mi jefe sea Pablo Alborán pues puedo decirte que estarás muy equivocada. Las dos estarán muy equivocadas.

O... ¿No?

BrokenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora