No sé cuánto tiempo ha pasado desde que ella se ha quedado dormida en mi cama. Estoy aún sentado en el borde, me giro por momentos tratando de admirar a esa mujer que me ha vuelto loco ¡Se ha vengado por los celos que provoqué!
Claro, al menos tuvo algo de piedad. Si no se hubiese cubierto con el edredón, ya estuviera al borde de un ataque.
Vuelvo a acostarme, pues el sueño me está ganando y dudo que Melissa se despierte para quitarme estás esposas. Mientras miro el techo, pienso en lo maravilloso que ha sido estar con ella, incluso en nuestros momentos de pelea. Tal como dijo, hubiese deseado que las cosas terminaran de otra manera esta noche, pero por precipitarme, terminó así.
Cierro los ojos, mi cuerpo ya no soporta más.
—Ya ha sido demasiado —escucho decir, pero estoy tan agotado que ni siquiera abro los ojos, sin embargo, sé que es ella— estoy loca, no debí llegar a tanto.
Oigo como se deshace de las esposas y como el resto de mi ropa cae.
—Debe estar incómodo —siento la calidez de su cuerpo y unos labios posándose sobre los míos- te amo y lamento que pasemos por esto. Aunque también es su culpa.
Lentamente abro los ojos y me encuentro a ella frente a mí, me incorporo; le miro a los ojos.
—Hola...
—Melissa... ¿Hace mucho que te levantaste? —la verdad es que estoy cansado de venganzas y mejor pregunto sobre ella.
—No mucho -recorro su cuerpo con la mirada— lo siento, ehmm... me pondré algo que me cubra.
—Estás preciosa ¿Cuándo aprendiste a ser así? —noto que empieza a sonrojarse.
—Apenas hoy.... yo sólo pensaba encerrarte en la habitación y hablar y después... bueno ya sabes. Pero después del encuentro con Cristina pues...
—¿Ella te dio la idea?
—Pues... sólo dijo que podía manejar las tensiones a mi favor —me acerco a ella y miro de pies a cabeza. Una de mis manos se posa en la parte baja de su espalda y la otra en la mejilla.
—Lo hiciste muy bien —acaricio con el dorso de mi mano- era muy tentador tenerte aquí y no poder tocarte.
—Lo sé... para mí también fue una tortura. Me moría por estar contigo —mis dedos bailaban sobre la espalda— Pablo...
—Honestamente, debería torturarte pero —me acerco a su oído— muero por hacerte el amor —mordisqueo el lóbulo de su oreja—, no quiero seguir así, por favor preciosa.
Beso la parte de atrás de su oreja y desciendo hasta llegar a su cuello. Noto su piel estremecerse y su respiración entrecortarse. Mis manos empiezan a adorar cada parte de su cuerpo desnudo, sus respiraciones se convierten en jadeos. Caminamos con lentitud a la cama, pero antes de tenerla en mis brazos, necesito que me diga que también lo desea tanto como yo.
—Pa... —no permito que me diga más y la beso con pasión.
—Necesito estar en ti, dime mi amor... dime que soy tuyo —rozo el valle de sus pechos y sus manos quieren recorrerme—, dime que eres mía.
—Lo soy, soy tuya y deseo respirar en ti.

ESTÁS LEYENDO
Broken
FanficNo ha nada más que hacer. Estoy rodeado de recuerdos vacíos que, alguna vez, fueron importantes para mí. ¿De qué sirve revivir lo que ya está muerto? Esta es la historia de una relación que terminó por muchas razones. Pero sobre todo... es la his...