C i n c u e n t a i t r é s

245 33 7
                                    

Melissa

No puedo creer que haya dicho todo eso de mí... ¿Por qué lo hizo? ¿Realmente soy una mujer de un noche?

Lo peor de todo, es que seguro no vendrá detrás de mí, por la simple y sencilla razón de que estamos guardando las apariencias.

Al salir al lobby, me encuentro con Mariola y Espe, junto al resto de la banda.

—¿Todo bien?

—Perfectamente, creo que mejor nos adelantamos ¿No? —me miran extrañada— los caballeros están hablando de cosas muy importantes.

Me creen y nos vamos en nuestros respectivos coches. Cuando veo que todos se van, me pongo a llorar dentro del auto ¿Cómo fui tan tonta? Sólo busca acostarse conmigo, y yo le empecé a amar. Me entregué a él, claro, vaya coincidencia el que se irá a Málaga por un tiempo...

Momentos después, golpean la ventana. Es él.

—Tenemos que hablar Mel —logro escuchar, bajo la ventanilla.

—No hay nada que hablar, allá dejaste muy en claro que sólo soy mujer de una noche.

—Mi amor... no fue así. Te lo juro.

—¿Entonces necesitas más de una noche conmigo para desfogarte? Porque creo que es para eso que iré en tres semanas a Málaga.

—Es para estar juntos... sabes que...

—No sé. Porque... ¿Sabes? Es extraño que hayamos hecho el amor el día anterior al que te vas.

—No... yo... Lo estás malinterpretando, por favor créeme.

—Déjame...

—Mel...

—Ya... creo que con esa noche te basta, ahora déjame en paz —no digo más, sólo arranco mi auto y tomo valor para ir al restaurante.

Eres un idiota, Pablo.

BrokenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora