El calor empieza, la ciudad empieza a quejarse de esto, con bebidas de agua bien frías y pasos mas lentos y cansados que de costumbre, es normal, pues el calor saca las ganas de continuar para cualquiera, incluso para nuestros 3 protagonistas.
Una mañana calurosa, Tomas solo miraba el techo de su habitación con fastidio, ni siquiera había podido dormir, su cuerpo estaba desparramado en la cama, solo suspiro un poco. Su celular sonaba, la alarma indicando que debía levantarse.
Estaba pensando si realmente se levantaría, pero no le quedaba de otra, era casi fin de año, faltar a clases en este punto solo haría que tuviera más mala suerte, por lo que se sentó en la cama, suspiro con pesadez y se levantó, dirigiéndose al baño.
Se dio un baño con agua fría con tal de poder relajar un poco el calor de su cuerpo. Y tras unos minutos, salió con una toalla rodeando su cintura, cubriendo la parte inferior de su cuerpo. Se sentó en una silla y suspiro, viendo enfrente suyo el nuevo televisor que los habitantes de Mar De Plata les habían dado, no era algo que estuviera muy orgulloso de tener, pero no quería rechazarlo.
Lo encendió y solo fue pasando de canal buscando que ver, solo dejó el canal de noticias y tomo su celular.
-"Y hoy tendremos un día de mucho calor, así que todos con piel sensible por favor tengan mucho cuidado, usen protección, tomen mucha agua, y gorras para el sol, así no sufren ninguna consecuencia"
El joven decidió ignorar eso, dejando el televisor de fondo, decidió entrar en su celular a ese blog, donde se vio que la ultima actualización había sido hace unas 15 horas. Entre todas las historias fue a la ultima, donde allí contaba todo lo que ellos habían hecho en la ciudad.
Soltó una risa leve mientras leía, recordando todo lo que había pasado y fue a la sección de comentarios, donde se quedo leyendo, muchos comentarios de apoyo, mucha gente que creía que era una historia inventada e incluso gente que supuestamente lo había visto y era real.
Se levantó y se dirigió a la cocina, donde se preparo un café con leche, el cual una vez preparo se puso a beber viendo su celular, revisando redes sociales o buscando tonterías para pasar el rato, en eso le llegó un mensaje de su chófer.
"¿Quieres que pase por ustedes?"
Tomas solo sonrió tranquilamente y contestó con lo siguiente:
"No te preocupes, hoy quiero caminar".
Una vez enviado dejo el celular a un lado y se puso de pie, entrando de nuevo a su habitación donde comenzó a buscar algo de ropa para vestirse, pues aún continuaba desnudo y en toalla. Se vistió rápido con algo típico, una playera rojo oscuro, unos jeans azules y zapatos blancos con algunas franjas rojas.
Una vez cambiado, tomo su mochila, sus llaves, su celular y sus audífonos. Y claro, la tarjeta especial para poder pagar el transporte. Con todo eso, salió de su departamento.
Su camino a la escuela era el de siempre, ir a la parada del transporte y tomarlo. Un viaje que a pesar de verse normal, era muy rápido, sus pensamientos perdidos en la música y en el paisaje de la ciudad, hacían que el tiempo se acelerase, como si el mismo tuviera alguna extraña habilidad especial.
Tan pronto llegó donde debía bajarse, comenzó a caminar, aun le faltaban unas pocas cuadras para llegar, en su camino, sintió alguien que constantemente parecía estar pisandole los talones, haciendo que de vez en cuando las zapatillas se le salieran y eso en un punto lo fastidió.
Volteo rápidamente, solo para encontrarse al rubio allí, con una sonrisa.
-¿Que pasa? ¿Quieres pelear?
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The Legend Of T
AçãoTomas es un joven normal con extraños poderes. A sus 16 años inicia en una nueva escuela, sin embargo, ciertos acontecimientos revivirán una vieja meta que se impuso desde niño. Conseguir un equipo y salvar al mundo.