Capítulo 16: Dog, el guardián.

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-Estoy buscando a mi hija...

Dijo un hombre de cabello blanco, su ojo izquierdo era de un color negro y el otro de un color rojizo. Llevaba un traje negro con una corbata roja.

-Se que esta aquí, me gustaría verla y llevármela si es posible...

Decía en todo momento con una sonrisa. Los profesores quienes lo miraron con cierto temor, simplemente obedecieron y subieron las escaleras de camino a la biblioteca.

La niña estaba apretando su brazo derecho y trataba de soportar ese ardor increíblemente fuerte.

-El... Esta aquí...

Los 3 jóvenes se miraron completamente confundidos y preocupados. Tomas decidió acercar su mano derecha la cual al entrar en contacto, el dolor se desvaneció. Hubo un momento de silencio total, la niña dejo de quejarse.

-¿Como...?

-Es mi habilidad...-Interrumpió Tomas- No sirve mucho, pero para cosas pequeñas puedo hacerlo.

La niña froto su brazo un poco mientras admiraba con tristeza la marca.

-Puedes curar a mi hermana ¿no?...-Susurro para si misma-

¿Que?

Ella rápidamente negó con las manos.

-Nada, tengo que irme ya. 

Dijo con una leve sonrisa y sin decir nada salio por la puerta. Hubo un momento de silencio y los 3 jóvenes se miraron.

-Creo que deberíamos volver...

-Estoy demasiado viejo para ir y venir.

-Las profes se aburren

Los 3 suspiraron un tanto cansados y entonces, decidieron salir, sin embargo quedaron un poco asombrados. La niña que se supone ya tendría que haberse ido, estaba de pie completamente paralizada y asustada. No se movía, sus manos y piernas temblaban un poco.

Frente a ella estaba aquel hombre de traje, con una mirada muy tranquila, mostrando una amable sonrisa.

-Any, querida, aquí estas.

Ella no respondía, solamente llegó a dar un paso hacia atrás. El grupo se dio cuenta de su reacción rápidamente se acercaron.

-¿Quien es el?

Pregunto rápidamente Tomas.

-Yo soy su padre -Respondió aquel hombre de traje por la menor- Vine a buscarla.

Ella no dejaba de temblar. Los jóvenes se miraron entre si totalmente confundidos, sin embargo la expresión de la menor daba demasiada curiosidad.

-No... No dejen que me lleve...-Dijo con una voz temblorosa, con un notorio miedo- Por favor...

Atrás de aquel hombre estaba la profesora que lo había llevado, su rostro estaba completamente perdido, estaba totalmente quieta.

-Dejen que se lleve a la niña...-Dijo la mujer con voz fría y tranquila- Es su padre...

Tomas no dudo mas y se acerco aquel hombre de traje con calma, los otros 2 se quedaron con la niña. El castaño acerco su mano.

-Por favor señor, debe retirarse...-En ese momento el trataba de mostrarse respetuoso-.

Sintió un fuerte agarre, proveniente del mayor quien sostenía con firmeza su muñeca y la apretaba con fuerza, su rostro seguía siendo tan calmado y sereno, hasta el punto de dar miedo.

-Así que son ustedes...-Susurro el mayor viendo atentamente al menor- 

-¿Que...?

Estaba un poco asombrado por aquellas palabras, trataba de safar su mano, sin embargo, le sorprendía el como podía sostenerlo con tal fuerza.

-Creo que lo sabes bien... Tengo suerte de encontrarme con ustedes muchachos...-Dijo aún con calma, sin embargo, mostraba su enojo apretando la muñeca del menor- Causaron muchos problemas y esto es lo que han traído...-Su mano libre fue hacia el interior de su saco y retiro un papel, aquel contenía una dirección- Aquí, ustedes conocerán de lo que hablo.

Con la misma mano libre dejo el papel en la palma de la mano del joven y directamente la soltó. Este se alejo adolorido, agarrando su muñeca un poco. Los 2 jóvenes, quienes estaban preocupados fueron hacia el.

-¿Que paso? 

El mayor continuaba de pie tranquilamente. Eze en ese momento no dudo en lanzarse para atacarlo, simplemente queriendo darle un puñetazo, que fue detenido por la palma de la mano del hombre de traje.

-Tranquilo... No creas que tu no eres culpable tampoco...

-¿Que? 

-Los 3 son culpables...

Dijo con total calma. Eso llamo la atención de Faku, quien rápidamente lo observo con atención.

-Tu...

-Exacto -El hombre pareció reconocer al joven, fue por el que su sonrisa se amplió un poco más- Vayan a la dirección que le deje al joven de verde y sabrán a lo que me refiero...

Ya no dijo nada más, con todo eso dicho, el simplemente se retiro de aquel lugar, salió de la escuela y volvió a su elegante limusina. Al entrar, soltó una risa.

-Parece que tenemos suerte. La mocosa nos trajo ante los culpables...

2 figuras que estaban frente a el soltaron risas también.

-Dog,  ¿Que hiciste?

-No podía matarlo aún, sin saber la razón de porque estamos aquí... Así que deje la dirección de la casa.

-Y podremos emboscarlos allí...

-Exactamente...

Dijo mostrando una sonrisa.

-Ese momento sera justo para eliminarlos y llevar a cabo lo nuestro.

La menor parecía haberse relajado una vez se fue, se sentó en el suelo completamente tranquila.

-¿Quien era esa? 

Faku se quedo con ella, pero la niña notó el papel que el castaño estaba leyendo.

-¿Que es eso?

-¿Ha? -La observo de reojo y volvió a mirar el papel- No lose... Es una dirección...

Ella rápidamente se puso de pie y corrió hacia el.

-Déjame verla.

Se notaba apurada. El joven con curiosidad se le entrego y dejó que ella la leyera. Poco a poco, sus manos comenzaban a temblar y los 3 notaron como en ese momento la menor soltaba lagrimas.

Debido al miedo solo puso comenzar a decir una sola frase.

-Es... La dirección de mi casa...










The Legend Of TDonde viven las historias. Descúbrelo ahora