XXI

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Era una cafetería muy acogedora.
Se sentaron en una mesa y pidieron comida y bebida. Mientras esperaban algo raro ocurrió, un extraño se acercó y se sentó en su mesa.
—¡Hola Jin! —le dijo Tae cuando le vio sentado en la mesa.
—¿Qué tal? ¿Cómo estáis chicos? —Jungkook y él le dijeron que estaban bien y que el lugar era muy bonito. Sabía que Jin trabajaba allí, por lo que le había contado Tae y que amaba el lugar.
—Soy Park Jimin.
—Y yo Jeon Jungkook. —se presentaron ante él y Jin hizo lo mismo.
—Soy Kim Seokjin. —les respondió con una sonrisa.
Tae sonrió y sacó un folio que le entregó de repente a Jin. Este sonrió y comprobó que la hoja estaba como la recordaba.
—¡He descubierto quién es ese rapero que buscabas! —le dijo entusiasmado Tae.
—¿A sí?—preguntó Jin sin poder creérselo.
—Sí. Dicen que se llama Agust D.
—He oído hablar de él. —dijo Jungkook. —Es un rapero que se está haciendo conocer por mi barrio.
—¡Sí, genial! Esto es perfecto. —les dijo Jin emocionado. —Veréis he conocido unos chicos que van a hacer un grupo de música y están buscando a ese rapero para que se les una. Ya veréis, son geniales.
—¿Van a venir aquí? —preguntó.
—Sí. Les he dicho que así os podían conocer y hablar sobre lo que sepáis de él. —contestó mirando a Jungkook directamente. Él negó varias veces intentando que le dejasen de mirar.
—Yo no sé nada más. Nunca le he visto. Solo he oído hablar de él, así que debe ser conocido entre los grupos callejeros.
—Ya veo...—se decepcionó Jin. Después miró a Tae esperando que éste tuviese más información. —¿Tu sabes algo más de él?
—La verdad es que solo me han dicho su nombre. —se encogió de hombros.
Después de eso dos chicos, uno muy alto y el otro más bajo se acercaron, saludaron a Jin y se sentaron en la mesa junto a ellos. Una vez hechas las presentaciones empezaron a hablar de ese que se hacía llamar Agust D.
—Entonces no tenéis más información de él. —dijo Namjoon estirando la arrugada hoja con la canción.
—Bueno al menos sabemos cómo se llama. —le contestó Jin con una sonrisa. La verdad es que se estaba creando una verdadera orden de búsqueda con aquél chico.
—¿Y ahora qué vais a hacer? —preguntó Jungkook tímidamente.
Namjoon se encogió de hombros y se echó hacia atrás en la silla. Parecía cansado de la situación.
—Supongo que esperaremos a que aparezca por las calles. O nos lo encontremos por casualidad. —respondió Hoseok.
—¿Y el grupo iba a ser solo de tres miembros? —preguntó Jimin curioso.
Notó como Hoseok fijaba su atención en Jungkook y éste intentaba mirar hacia otro lado haciendo como que no lo veía. ¿Se conocían?
—De momento sí. No necesitamos a nadie más. —soltó Namjoon mientras se reincorporaba en su asiento.
—¿Un cantante, a lo mejor? —preguntó Jin.
—¡Jungkook es cantante! —gritó Tae de repente. Todas las miradas se dirigieron al pequeño del grupo.
—¡Cállate! Solo doy clases de canto.
—Espera tú eres el chico que me encontré en la academia hace unos días, ¿no? —le preguntó Namjoon fijándose en su cara más detenidamente.
—Y tú eres el chico que bailó conmigo en la calle y que luego salió corriendo. —continuó Hoseok.
—Yo...
—Chicos, por favor. Estáis agobiando a la estrella. —les dijo Tae riéndose. Todos le miraron y él con una sonrisa cambió el ambiente.
—Bueno es que me daba vergüenza hablar contigo. Eres muy bueno bailando. —le dijo con sinceridad mientras bajaba poco a poco la cabeza.
—Gracias. —respondió Hoseok felizmente.
—¿Y yo? Me trataste un poco mal cuando nos vimos.
—Bueno es que...—al ver que no continuaba hablando Jin decidió hacerse notar.
—Chicos, ¿podemos volver al tema Agust D? —preguntó Jin, salvando a Jungkook de la situación.
—Sí, pero sólo sabemos su nombre. —le dijo. —Además nunca lo había oído antes.
Namjoon y Hoseok la cogieron y se pusieron a leerla.
—Lo peor de todo es que no tenemos la canción entera, ésta es solo la última parte. —soltó Hoseok de repente.
Una pequeña bombilla se encendió en su cabeza. ¿Podría ser...? Sería mucha coincidencia. Pero de todas formas quiso asegurarse.
—¿Me podéis dar la hoja? Quiero leer la canción también. —era demasiada coincidencia que precisamente Yoongi hubiese perdido la última parte de la canción que le había regalado por haberle salvado la vida. Leyó la letra y se quedó sin aire.
Se tiró como un loco a su mochila de deporte, donde había guardado las hojas que le había regalado Yoongi y las sacó todas. Los integrantes de la mesa se le quedaron mirando mientras sacaba los papeles. A medida que lo hacía se lo fue lanzando a Namjoon quien lo cogió algo sorprendido.
—Lee. —dijo simplemente y le hizo caso de inmediato.
Sus ojos se fueron agrandando a medida que leía a toda velocidad la letra.
—¿Cómo conseguiste el resto de la canción? —le preguntó el rapero sorprendido.
—Le conocí el otro día. —toda la mesa se giró para mirarle atentamente. —Se llama Min Yoongi.
—¿En serio Jimin? —le preguntó Tae. Dirigió su atención a su cara que estaba más que reflejando sorpresa.
—¿Qué pasa? —preguntó desconcertado.
—¡Le conocías y no has dicho nada! —le reprochó.
—¿Cómo iba a saber que él era Agust D?
—¿No era tu amigo?
—Sí pero la gente normal cuando se presenta te dicen su nombre verdadero. —Tae rompió a reír al igual que el resto de la mesa.
Al final no había sido tan complicado encontrarle.
—Bueno, ya solo tienes que contactarle o enviarle un mensaje y podríamos hablar con él. —le sugirió Namjoon.
Jimin hizo una expresión extraña.
—Va a ser complicado. —le respondió. —¿Porqué? —preguntó Jin.
—No tiene móvil.
Escuchó como alguien metía todo el aire dentro de su cuerpo. Miró hacia quién había sido y era Tae.
—¿Cómo puede vivir? —le preguntó al cielo.
La mayoría se rieron aunque no quisiesen y cuando se calmó el ambiente Jimin explicó las cosas.
—He quedado con él para dar una vuelta esta noche. Podéis venir y hablar con él cuando sea la hora.
—Sí, eso sería perfecto. —respondió Hoseok.
Ya estaba todo casi listo para que por fin se juntasen e hiciesen música.
Casi.

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