The Way We Became Stars

XCI

Si iba a ser sincero consigo mismo debía admitir que la llamada desesperada de Jungkook por encontrar a Tae fue esperada. Había conseguido aquella información gracias a Jin, quien había ido anteriormente a su casa y tenía su dirección. Jimin no le había preguntado después a qué iba exactamente pero supuso que tampoco importaba, ya tendría tiempo de preguntarle.
Cuando estaba por coger el último tren que ya le llevaba directamente a su casa recibió una llamada. Otra en lo que llevaba de tarde, pero esta vez era de Yoongi. Algo extrañado descolgó y esperó para escuchar la voz de su buen amigo y rapero cascarrabias.
—¿Yoongi? —preguntó por si a lo mejor había escrito mal el contacto y no se trataba de él, sino de otro miembro.
—Eh, Jimin. —escuchó como si el chico fuese andando a una velocidad bastante rápida ya que jadeaba y se escuchaba el ruido característico de la ciudad de fondo. —Tengo que hablar contigo sobre Hoseok. Creo que está metido en algo, algo nada bueno.
Abrió los ojos en demasía y la señora mayor que estaba sentada en frente de él le miró extrañada. Sonrió por la vergüenza y se centró en el inminente descubrimiento de su amigo. Le había prometido expresamente que no se lo diría a nadie y Yoongi no iba a ser la excepción.
—¿Qué quieres decir? —volvió a preguntar algo asustado. No quería hablar de más, y aunque sabía a Yoongi era completamente confiable no podía arriesgarse a que uniese cabos él mismo.
—Hoseok te ha contado lo de su hermana, ¿verdad? —tragó saliva de repente, sin darse a penas cuenta de lo que hacía. Se arrascó distraídamente las muñecas ya cicatrizadas y se dio por vencido.
—Sí. Pero le dije que me ocuparía de que nadie a parte de mí se enterase de lo que pasaba. —le confesó apesadumbrado.
—Bueno, pues parece que él mismo ha sido el que no ha podido mantenerse callado. —Jimin se extrañó ante su respuesta. ¿El propio Hoseok le había contado lo que ocurría a Yoongi? ¿Qué clase de locura era esa?
—Vale. Y si ya lo sabes, ¿de qué querías hablar? —no sabía adónde quería llevar esa conversación, pero parecía como si Yoongi necesitase respuestas, a pesar de que el propio Hoseok se había encargado de dárselas.
—Esta tarde se ha quedado dormido encima de la maldita mesa.
—Ya, ha sido raro, pero es normal que esté agotado...—no consiguió acabar la frase pues Yoongi le cortó de repente.
—Nadie estando agotado se queda dormido en una jodida cafetería. Y menos con todo el ruido y hablando con personas. —hubo una pausa algo impaciente. —Entiendo que esté cansando y que de vez en cuando quiera dar una que otra cabezadita, pero es que estaba K.O.
Jimin asintió escuchando sus palabras. Tenía toda la razón, pero si no era agotamiento, ¿Qué era?
—Ya...—se quedó pensativo unos segundos. —Pero si no se había quedado dormido, tan profundamente por agotamiento, ¿Por qué era?
—No estoy seguro del todo, pero ya te digo yo que por cansancio no era. Hazme caso. —le ordenó, después se quedó unos segundos en silencio y Jimin pensó que se le había caído el móvil, o que lo había dejado en cualquier lugar. —Voy a preguntar a unos amigos para asegurarme de los síntomas son de lo que yo creo que es. Si no, ya te avisaré. —estaba por colgarle, pero él no se había enterado de nada.
¿¡Qué le pasaba a Hoseok!?
—¡Espera!
—Qué.
—¿Qué crees que le pasa realmente a Hoseok?
Escuchó un suspiro pesado y sintió como es segundos se ponía más nervioso.
—Es posible que esté tomando algún tipo de droga. O a lo mejor está tomando demasiado la misma pastilla. No lo sé.
—Vale. Si descubres algo o confirmas algo, avísame.
—Eso te he dicho que haré. Adiós.
Colgó y sintió su cuerpo más flojo. Hoseok era un completo rayo de sol y realmente no se merecía lo que estaba le ocurriendo, pero tampoco debía tomar por eso malas decisiones.
Tragó saliva y en cuanto llegó a su parada suspiró cansado.
Lo último que le faltaba en aquél momento era que el único rayo deslumbrante que parecía alegrar a los demás se apagase por unas estúpidas pastillas.