Promesa.

1.5K 186 5
                                    


💜 Dedicado a Caro La 💜


10/?


***

Steve no vio nada de la película.


Nunca apartó su vista de Stark. Grabó en su mente cada hermosa reacción suya.


Al salir, asintió a todo lo que le decía. ¿Cómo podía ser tan adorable?


—Steve, ¡Hey, Stiff!


—¿Stiff?. —Alzó una ceja. Tony desvió la mirada con sus mejillas rojas. —¿Y eso?


—Eso te ganas por ignorarme. —Se dio la vuelta ofendido.


—¡No te ignoraba!. —Le rodeó pero siguió sin verle. Acunó su rostro entre sus manos con cariño para que le viera. —Sabes que jamás lo haría.


Le fue tan difícil no reírse de su puchero mientras le veía desconfiado pero al final accedió, sólo si le compraba un helado.


Rió y aceptó gustoso. Visitaron varias tiendas. No dudaron visitar las tiendas de videojuegos. Se llevaron varias nuevos juegos.


Tony casi le salta encima de la felicidad por visitar una exposición de autos que habia allí.


¿Cómo decirle que no a esa sonrisa?


—¿Con gustos acaudalados no?. —Le picó con diversión.


—¡Oh, calla!. —Le sacó la lengua. —Me gustan, si. Pero amo las cosas sencillas y humildes, como tú.


Sino fuera porque él le arrastraba de la mano, habría caido desde hace mucho al suelo.


Tras escribirle a sus padres (con foto y todo de sus helados) le preguntó casual en dónde le gustaría pasar las vacaciones.


Tony admitió apenado que jamás habia ido a ninguno de los lugares que mencionó.


Se golpeó mentalmente. ¡¿Como no lo pensó antes?!


 No podía creer de todo lo que se había perdido por culpa de esos idiotas. Empezó a enumerar todo lo pendiente.


Ir de campamento, al zoológico, a la playa. Stark se reía al verlo tan emocionado. Incluso, mas que él.


—Ya verás, papá siempre... —Giró al notar que estaba solo. —¿Tony?.


—¡Tony!—Fue hasta él sin dudarlo al verlo cabizbajo. —¿Qué pasa, te sientes mal?


—Nada es solo que. —Forzó una sonrisa. Odio ver esa bruma de terror en su mirada. —A veces, tanta felicidad asusta.


Le abrazó con fuerza.


—No pienses en ello. —No preguntó, sabía cual era su temor.


—Pero...


—Jamás pasará. —Le tomó del rostro y unió sus frentes.—¿Sabes por qué? Porque eres nuestra familia, nadie te alejará de nosotros. Nunca permitiré que te alejen de mi.


—Steve.


—Te amo Tiny.


Disfrutó del rubor calentando sus manos, como sus iris avellanas brillaban de dicha. Su corazón saltó como loco al verlo morder su labio y asentir. Agradeció que ocultase su rostro en su pecho. 


No estaba seguro de poder resistir más las ganas de besarlo.


¿Estaba mal el amarlo de esa manera? ¿Era un pecado quererlo a su lado para siempre?


Si era así, con gusto pecaría mil y un veces. Lo amaba con todo su corazón.


Lo amaba tanto que dolía, pero jamás lo soltaría.


Cartas al Amor Stony.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora