Cartas al Amor Stony.

Preocupación.

💜 Dedicado a Susana Rodriguez 💜

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Bruce Banner no sabía para que se esforzaba.

Aún cuando ambos habían tomado carreras diferentes, no habían podido evitar coincidir con varias clases. Eran amigos desde la preparatoria.

Claro que Stark siempre estaba adelantado a sus profesores, y quizás al mundo.

Siempre le arrastraba de alocadas y disparatadas teorías como ideas, pero aunque fingía que se quejaba; le encantaba tener a un buen amigo como Tony que le entendiera.

Habían acordado que ambos trabajarían en ese proyecto juntos. Pero como siempre, su amigo llegaba tarde.

Lo dejó pasar por alto y ambos comenzaron a trabajar.

Claro que al verlo suspirar por sexta vez perdido en el espacio, no lo aguanto más.

—Dilo ya Tony. —Se cruzó de brazos. Era obvio que no avanzarían nada, por lo menos hasta que lo sacará de su sistema. —Se que no fuiste a tu departamento anoche, y ese suéter no es tuyo.

Su amigo dibujó una sonrisa en su boca y como lo esperaba, terminó de explotar.

—¡Oh, Bruce pensé que jamás lo dirías!. —Practicamente brincó de la felicidad. —¡Fue la mejor noche de mi jodida vida!

No pudo evitar sonreír mientras le contaba todo con lujo de detalles.

No había estado seguro si fue una buena decisión ayudar al rubio a encontrarle, pero ahora estaba completamente contento de haberlo hecho.

Su amigo casi brillaba de la alegría. Como había extrañado verlo así.

¿Quién pensaría que Rogers fuese tan insistente para hacer ceder a su amigo? Esa era la prueba más segura de que iban por buen camino.

—¿Lo ves? Te dije que todo saldría bien. —Le dio una palmada en su hombro. —Aunque admito que al correr del partido de esa manera enloqueció a todos.

Stark hizo una mueca culposa.

—¿Qué sucede?. —Cuestionó al ver como su sonrisa se borraba y le miraba nervioso.

—No se lo dije. —Le costó comprender a que se refería.—No hablamos de eso... Ya sabes de qué.

—¡Hey!— Detuvo sus lamentos y seguros pensamientos negativos. —Aparta eso de tu mente, no es algo que siempre deba estar presente en cada relación que tengas.

—¿Y si no es así?—Como odiaba ver su mirada llena de angustia y temor. —¿Y si no está de acuerdo? Peor, y si lo acepta y termina como antes?.

—Es diferente. —Le señaló con calma. —Apenas acaban de confesar sus sentimientos, Steve fue quien te pidió ser novios. No creo que lo hiciera sin saber todo lo que significa.

—Pero..

—Te dijo que quería ir despacio, no? —Su amigo asintió. —¿Te insistió que quería verte pronto?. —Volvió a hacerlo. —Eso demuestra mi punto, está interesado en ti. Antes de adelantarte deberías de hablar con él.

Lo vio morder su labio meditándolo, pero al final asintió con pesadez.

—Vale. —Soltó un largo suspiro. —¿Y cómo pasaron la noche?.

—Puedes preguntarles por ti mismo —Le animó con una sonrisa al castaño. —Sabes que se mueren por verte, ayudan a incrementar tu ego.

Observó de brazos cruzados como se reunía con ellos sonriendo. Conocía perfectamente como se sentía. Pero deseaba de corazón que fuera diferente.

Por el bien de Rogers, esperaba que las preocupaciones de Tony fueran pasajeras.

No perdonaría a nadie que se atreviera a lastimar de nuevo a su hermano.