Zorros [Yaoi/Gay]

La marca

CAPÍTULO 83
La marca

Los sonidos de la mañana lo despertaron; niños jugando, pájaros, autos. Abrió sus ojos y lo primero que vio fue una cabellera rubia, Mikki estaba acurrucado en su pecho. Koh dormía en un sofá, así que ellos dos prácticamente estaban pegados.

No sabía por qué Mikki había amanecido con él esa mañana, pero lo agradecía, despertar junto a él hacía que todo su día ya fuera perfecto.

Mikki abrió sus ojos y dio un gran bostezo, pero no parecía tener planes de levantarse, al contrario, se acurrucó más en el pecho del moreno.

--¿A qué se debe que esta preciosura haya amanecido en mi súper cama hoy? -preguntó Koh

--Tenía frío -habló despacio el rubio- tu cuerpo siempre está caliente, es cómodo

--¿Esa es la única razón?

--Tuve una pesadilla y no quería despertarte así que solo me acosté aquí

--¿Qué pesadilla?

--Soñé que alguien quería matarme. Creo que fue debido a la película de terror que vimos anoche

Había pasado una semana desde que Koh y Mikki habían empezado a salir. Las cosas no habían cambiado mucho, ellos seguían llevándose de la misma manera de siempre; jugaban videojuegos, veían películas, charlaban; todo seguía igual, con una sola excepción: ahora podían besarse.

--¿Qué debería preparar para almorzar hoy?

--Se me antojan unas quesadillas -habló el rubio

--Entonces eso haré -trató de levantarse pero Mikki lo detuvo

--Quedémonos un rato más así, si te vas me dará frío

Koh dio una gran sonrisa. Tocó las mejillas de Mikki y las sintió frías.

--Tus cachetes están fríos ¿debería calentarlos?

--Sí por favor

Koh se acercó al rubio y comenzó a besarle las mejillas, Mikki solo se reía.

--Tus labios también se sienten fríos -habló el moreno, tocando los labios del rubio con sus dedos

--Caliéntalos por favor -la suave voz de Mikki salió

Koh obedeció, y comenzó a besarlo. Al principio solo eran los labios, pero después sus lenguas se encontraron y bailaron. Mikki no se dio cuenta de cómo pasó, pero cuando menos se lo esperó, Koh se encontraba sobre él, y ahora sentía mucho calor. Los labios de Koh se separaron y ahora comenzaron a besar su cuello. Mikki comenzó a jadear involuntariamente.

--Hmm... Koh...

El moreno llevó una de sus manos debajo de la camisa del rubio y comenzó a tocarle los pezones. Mikki sentía que las cosas estaban pasando muy rápido, se sentía bien pero también estaba confundido. Y entonces Koh llevó su otra mano a la entrepierna del rubio, no lo tocó directamente, simplemente comenzó a estimular la zona por encima de la tela.

--N-No... -puso sus manos sobre el pecho de Koh y lo alejó con cuidado- No sigas

--¿Qué sucede?

--Lo siento Koh, pero aún no estoy preparado

Koh se quedó un momento sin moverse y sin decir nada, pero después se alejó de Mikki y le dio espacio.

--Esperaré el tiempo que sea necesario Mikki -le sonrió y se puso de pie- iré a preparar tus quesadillas

Mikki suspiró decepcionado, sabía que Koh tomaría la iniciativa para ir más allá que solo besarse, pero jamás imaginó que sería tan pronto. Cada vez que se besaban y Koh lo tocaba, Mikki podía sentirlo, lo tocaba con cierta desesperación, como si quisiera hacer algo más. Mikki lo entendía, ya eran pareja y era normal que él quisiera hacer ese tipo de cosas, además, Koh llevaba ahí más de dos meses, la frustración sexual que debía tener acumulada seguramente era mucha.