Cigarros y cervezas

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CAPÍTULO 85
Cigarros y cervezas


Mikki estaba en el supermercado. Koh le había dado una lista de todas las cosas que hacían falta en la casa, le había tomado su tiempo pero finalmente había encontrado todo. Pasó por el área de bebidas y metió algunas cervezas, Koh no las había puesto en la lista, pero el rubio pensó que sería un bonito detalle llevárselas, también le llevaría cigarros.

Fue hasta el área de farmacia, se había lastimado su pie en la última clase de baile, no era nada grave, solo necesitaba unos parches. Se acercó al mostrador y no pudo evitar centrar su mirada en el área de los condones, preguntándose si debía comprar unos. No es como si él estuviese esperando a que "eso" pasara, pero después de lo que Koh y él habían hecho hacía unos días, tal vez solo era cuestión de tiempo, y quería estar preparado. Se acercó más al mostrador y miró todas las marcas y presentaciones, él jamás había comprado condones así que no sabía cuál era la mejor opción. Al final se decidió por el que tenía la presentación más bonita. Bendita mercadotecnia.

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Alec dio un gran suspiro, mirando todo a su alrededor, iba a extrañar su cuarto. Se encontraba empacando las cosas que se llevaría, finalmente había llegado el momento de mudarse. Se sentía nervioso y a la vez emocionado.

--¿Entonces sí te irás? -escuchó la voz de su madre, ella se encontraba en la puerta, su voz sonó resignada- ¿Sí vas a abandonarme?

--Ya hablamos de esto mamá. Por favor no lo hagas más difícil

Alec continuó con lo que hacía. Estaba feliz de vivir con Iker, pero eso no significaba que no le importaba lo que su madre le decía. Le dolía el tener que dejarla y más aún que ella no entendiera sus razones.

--Dile a Iker que regrese a la casa

--¿Qué?

--Dile a Iker... -inhaló profundo- dile a Iker que yo digo que quiero que él regrese

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Noisy estaba en la casa de Camila, su hermana. Ella vivía en un pueblo cercano a Vigrid. Noisy solía visitarla cada semana o cada quince días, pero en esa ocasión había pasado un mes sin verla. No había podido visitarla antes, con lo de Bataca y la marca simplemente no había sido posible, su hermana no debía verlo lastimado o comenzaría a hacer preguntas.

Ella estaba en la cocina, lavando los trastes del almuerzo. Noisy limpiaba la mesa.

--Ahora que tengo un trabajo de todos los días estoy ganando más dinero -habló el castaño- no me pagan mucho pero es más de lo que solía ganar. Si tienes problemas económicos yo podría ayudarte

--Estoy bien, gracias -respondió Camila en voz baja. Se secó las manos con una toallita y fue a sentarse a la sala

Camila cada día se veía peor. Desde que le habían prohibido ver a su hija ella había entrado en una especie de depresión. Noisy hacia lo que podía, pero no estaba seguro de estar logrando algo.

--No la he visto desde hace... Casi un año -habló Camila- casi un año sin ver a mi niña -sus ojos se pusieron llorosos

--El abogado dijo que después del año podíamos intervenir Camila, lograremos que nos aprueben las visitas otra vez

--¿Te has dado cuenta? -dio una sonrisa con ironía- antes yo estaba luchando para que ella pudiera vivir conmigo, y ahora lucho para que me dejen verla aunque sea una vez por mes

--Un paso a la vez Camila, vamos a recuperarla

--¿En serio crees eso? -lo volteó a ver, dejando salir una lágrima- ¿Cómo vamos a conseguir eso? Rodolfo tiene dinero y contactos. Voy a gastarme la vida tratando de recuperar a mi hija

--Lo vamos a lograr

--¿Crees que ella está olvidándome?

--Por supuesto que no, Paola te ama, nos ama

--Pero... ¿Y qué tal si le han estado hablando mal de mí? ¿Qué tal que cuando la vuelva a ver ella no quiera estar conmigo?

--Eso no va a pasar. Paola regresará con nosotros y no será dentro de años, será pronto. Te lo prometo

....................

Mikki estaba subiendo las escaleras del edificio donde vivía. Había comprado muchas cosas así que las bolsas estaban pesadas. Cuando llegó al departamento, dejó todas las cosas en el suelo y sacó su llave. Koh fue a ayudarle apenas el rubio abrió la puerta, se acercó y cargó todas las bolsas.

--Gracias -dio un suspiro de alivio, caminó hasta el sofá y se tumbó ahí- espero reparen el elevador pronto. Cargar eso no fue fácil

--Tal vez no debí darte una lista tan larga

--No fue cosa de la lista, es que yo compré otras cosas. Te traje cervezas y cigarros

--¿En serio? -la sonrisa de Koh fue enorme

--Mi chica merece lo mejor -Mikki le dio un guiño

Koh casi salta de la alegría, Mikki solía comprarle cigarros, pero rara vez le traía cerveza. Comenzó a hurgar en todas las bolsas y encontró algo que definitivamente se robó su atención: una caja de condones. La agarró, pues pensó que tal vez se estaba confundiendo, pero no, realmente eran condones. Volteó a ver a Mikki y cuando el rubio se dio cuenta de lo que Koh llevaban en sus manos, abrió los ojos como si hubiera visto un fantasma, y no solo eso, su rostro se puso tan rojo que hasta se veía adorable. De inmediato se puso de pie y trató de decir algo pero se detuvo.

--¡N-No vamos a usarlos! -fue lo único que pudo decir- digo s-sí los usaremos p-pero... -dio un grito de desesperación, odiaba el tener que decir incoherencias, y todo por haberse olvidado de guardar los malditos condones- ¿Podrías entregármelos? -dijo al fin, más avergonzado de lo que hubiera querido aparentar

Koh también estaba bastante sonrojado, un poco halagado, pero apenado, tampoco sabía qué decir. Se acercó al rubio y le entregó los condones.

--No te hagas ideas equivocadas -dijo el rubio

--Claro que no -respondió el moreno

¿No hacerse ideas equivocadas? Condones = sexo. El mensaje era clarísimo.

Zorros [Yaoi/Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora