Capítulo 11

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Cuando terminé de firmar las cartas de aceptación, Gieran se las llevó para colocarle los toques finales. Y entonces comencé a escribir otro tipo de cartas.

"Ya casi es hora." Me dijo Akrina. Él había sido también parte de los examinadores.

"Ah, ya voy." Repliqué terminando las últimas cartas.

Escuché que irían a poner las listas así que fui a acicalarme un poco, después de todo ese mismo día sería la bienvenida. Para evitarme todo el peo de dar un discurso de consuelo, puse una nota al final de todo de que, si de verdad querían algo, que lo intentasen el año siguiente y tal vez, solo tal vez, lo lograrían.

"¿Puedo preguntar algo, general?" Escuché detrás de mí. La pregunta la había hecho un capitán de uno de mis generales.

"Claro."

"¿Cómo van a ser los beneficios dentro de la academia?"

"Ah, eso es interesante. Como nada es gratis en esta vida, aquellos que tengan un mejor desempeño tendrán mejores cosas. Todos empezarán por lo básico y tendrán que ganarse las cosas. Nada tendrá un cupo limitado a menos que sea un evento para ello. Hay cosas que sé que harán las cosas más interesantes."

La idea de la academia era también hacer algo parecido a un internado ya que sabía que algunos no podían ir como quisieran a sus casas debido a sus limitados recursos.

Cuando realizaba el discurso de bienvenida expliqué las normas del lugar. Previo a realizar el examen, todos tenían que haber leído y firmado un papel que se les había entregado sin embargo conocía cómo era la gente y sabía que la mayoría sólo había firmado. De todas las cosas que sabía que tenía que dejar en claro una de ellas era prioritaria.

"Una cosa más," le dije al grupo de cien personas, "lo que más valoro en un soldado es la lealtad. Y quien no lo sea, será mejor que se retire." Miré a tantos rostros como pude. "Porque no creo que quieran saber qué le pasa a los traidores."

Están murmurando sobre su juicio, me informó Kalous.

No me sorprendía en lo absoluto.

Uno de los estudiantes levantó una mano. "Permiso para hablar, General Sebrin." Asentí. "¿Cómo nos vamos a dividir?"

¿Se me olvidó decir eso?

, escuché a mis tres acompañantes.

"Me alegra que preguntes. Serán divididos de acuerdo a sus áreas de mejor talento para terminar de explotarlo. Aquellos que hayan tenido un buen puntaje, por ejemplo en la realización de venenos, pero fallasen en la prueba escrita, serán enviados directamente al área donde se realizan los venenos. Ahora, si quieren formar parte de otro curso, son abiertamente bienvenidos a intentarlo. Sin embargo," cambié mi tono de voz, "la excelencia es algo que espero de todos y cada uno de ustedes. Lo difícil no es entrar, señores, lo difícil es mantenerse acá dentro. Y si alguien quiere rendirse a mitad de camino, pues... les recomiendo que no lo hagan. No se salgan a mitad de entrenamiento, porque no los dejaré. Se irán cuando termine la primera fase. ¿Entendido?" Asintieron. "Perfecto."

Más tarde, mientras me encontraba revisando las líneas y estrategias de defensa de las fronteras, tocaron a mi puerta. Cuando invité a pasar, entraron dos criados. Uno con un arreglo floral y el otro con un cofre entre sus manos. Ambos colocaron todo en mi escritorio e hicieron una reverencia. "Su Majestad le pide que disfrute los obsequios." Dijeron y se retiraron.

Adregon estaba haciendo un intento, sí. Pero me parecía un intento tan banal y tan cliché, que solo pude enarcar una ceja. Tomé el cofre en mis manos y saqué una pulsera. Era muy linda, pero suspiré al devolverla a la caja. Era linda, pero no era mi estilo. Me recosté en mi asiento y comencé a jugar con la cadena de mi zarcillo de Asho-Rastra. No me molestaba que intentase disculparse, pero me enfurecía que no me entregase los regalos él -sabiendo que estábamos en el mismo castillo- y que de paso, fuese con los mismos métodos con los que felicitaba a sus amantes en alguna fecha. Sabía también que capaz era la primera a la que pedía disculpas, pero en esa ocasión valoraba las palabras tanto como valoraba las acciones.

Una General en JefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora