Heart's Smash

Capítulo 29.

Tara estaba vestida con aquel aireado vestido rojo de espaldas a él. Se veía tan dulce que a Zayn se le hizo la boca agua. En aquel momento no quiso otra cosa que poder pasar su lengua por cada parte de su cuerpo.

Estaría loco si era capaz de contenerse con aquella figura delante de él.

Avanzó hacia ella tras tragar saliva y se colocó en su espalda, cogiéndola de la cintura y pegando sus labios al oído de la chica.

―Que sexy te has puesto...

―Cierra la boca―De un golpe brusco pero riendo lo apartó de ella, dándose la vuelta para mirarlo con media sonrisa y las mejillas rojizas.

Zayn no podía quitar la marcada curva de sus labios.

―Te lo digo en serio―Inquirió―Ese vestido es...―La recorrió con la mirada y el pulso de su corazón se aceleró―Alucinante. Estás guapísima―Quiso acercarse para darle un beso adormecedor en la boca pero ella lo miró insegura e incrédula y luego lo obligó a permanecer en su sitio.

―No me adules como si fuera una piedra preciosa―Le recriminó.

A Tara nunca le habían gustado los cumplidos, la mayoría de la gente solo los hacía para quedar bien y estaba harta de escuchar tonterías saliendo por la boca de la gente.

Era consciente de que tenía buen cuerpo y era guapa. No Miss Universo pero lo suficiente como para que muchos chicos fueran detrás de ella en busca de refugio en su entrepierna.

Lo que no le extrañaba era que esas cosas salieran de la boca de Zayn. Él siempre le había hecho creer lo hermosa y bella que era y se había enfadado con ella cada vez que había hecho comentarios negativos sobre su cuerpo, pero esta vez se había negado a asentir con tal de provocarlo. Quería jugar con él. Lo quería con ella.

Quería tentarlo.

―Vale, como quieras...―Zayn pareció rendirse y Tara se sorprendió por un instante―Estás horrible―Dijo después reprimiendo una carcajada.

Tara abrió la boca en forma de "o" y el gracioso coraje que aquello le produjo la incitó a arrearle un endeble bofetón a Zayn, pero en cuanto ella levantó el brazo, Zayn la agarró por la muñeca, parando así su idea de hacerle daño y la atrajo hacía él.

Sus brazos eran fuertes y reconfortantes. El corazón de Tara se disparó cuando su cuerpo rozó el de Zayn. Pecho contra pecho.

La cogió por la barbilla con dos dedos y con pasión la obligó a mirarlo a los ojos. Ambas temperaturas corporales empezaban a arder.

Entonces él bajó la vista hasta que sus ojos quedaron clavados en la boca de Tara, en sus labios entreabiertos. Ella inspiró con fuerza y antes de tiempo la feroz boca de Zayn se había abalanzado sobre la suya con una fuerza y una lujuria imparable.

Zayn la empujó con fuerza contra el mueble que había detrás de ella y Tara soltó un gemido ahogado. Sintió que en cualquier momento Zayn la haría explotar, su lengua saboreaba con ansiedad cada rincón en su boca. Los labios del chico apretaban con fuerza contra los de ella, robándole todo el oxígeno.

Zayn se apretó más contra Tara y esta le rodeó el cuello con los brazos, enredando sus dedos en el sensual pelo de él. Sus bocas se movían al compás de los latidos de su corazón, tan acelerados, tan rápidos... Zayn besaba tan bien que era imposible creer que fuera real y Tara tenía un sabor único, tan perfecto, que Zayn dudaba que a partir de aquel momento pudiera vivir sin él.

Le recorrió las caderas y le acarició una pierna. Luego le agarró el muslo, se lo elevó y se apretó más contra ella si cabía. Tara gimió más alto cuando su intimidad sintió la dureza del miembro de Zayn. Se le había olvidado por completo donde estaba.