―¡Terremoto! ―Gritó Lucas desde el hall de la casa―¡¿Estás lista?!
―¡Sí! ―Contestó, apareciendo en lo alto de la escalera con un bikini azul celeste y un flotador. Llevaba dos coletas y unas gafas de sol de color rosa fosforito demasiado cucas. Lucas rió en cuanto la vio.―¡Ya voy!―Hayley empezó a bajar los escalones tan rápido como pudo. Cuando llegó abajo, saltó a los brazos de Lucas y él la abrazó.
Aquella mañana, mientras desayunaban, habían decidido que irían a pasar el día al lago que se encontraba no muy lejos de la casa de campo. Las cosas podrían quebrarse de un momento a otro, pero Lucas les había hecho entender a los demás que, mientras las cosas estuvieran tranquilas, debían aprovechar el tiempo y no quedarse de brazos cruzados, ocultos en una casa en medio del bosque porque el miedo se superponía a cualquier otra sensación que pudiera traerles felicidad.
Ninguno había puesto pegas, de hecho, lo que necesitaban era pasar un día al aire libre, con las personas a quien amaban, relajarse y sentir que las cosas podían ser tan maravillosas como lo habían sido algún día, olvidarse de todo.
En cuanto vio a Anna sonriéndole desde lo alto de la escalera, el corazón le empezó a latir con fuerza. Dejó a Hayley en el suelo y se acercó a ella para tomarla de la mano y acercarla a su cuerpo una vez hubo bajado.
Lucas inclinó su rostro hasta el suyo y después de que sus narices se rozaran, la besó en la boca lentamente.
―Buaj―Se oyó decir no muy lejos de ellos.
Se separaron y miraron al suelo, desde donde Hayley se había dado la vuelta y se dirigía hacia la puerta. Rieron. Anna se apretó contra Lucas y dejó reposar la cabeza en su pecho.
No mucho más tarde, Zayn apareció corriendo escaleras abajo y a Tara detrás de él tirándole almohadas. Uno reía y el otro parecía echar humo por las orejas.
―¿Qué pasa? ―Preguntó Lucas.
Zayn contestó mientras reía como un loco.
―Le he dicho que se ha levantado con cara de loca y se ha puesto así.
―¡Imbécil!―Tara le tiró otra almohada y luego corrió tras él hasta alcanzarlo. Lo empujó y lo tumbó en el sofá. Él la agarró de la cintura y la llevó consigo, robándole inmediatamente un beso y cogiéndole las manos para impedir que se moviera.
Lucas negó con la cabeza mientras sonreía y soltó a Anna de la cintura para tomarla de la mano. Luego se acercó a Hayley y con la que le quedaba suelta, la agarró a ella.
―Nos vemos en el lago, chicos. No se entretengan―Les avisó.
―En seguida va... ¡Ahh!―Zayn soltó un grito cuando Tara le mordió el labio inferior―¡Calma, tigresa!
―La próxima vez que me vuelvas a molestar de esa manera cuando me levante, te juro que no saldrás tan bien parado, Malik. ¿Entendido?
―Bueno...―Hizo una mueca graciosa―Esto no está tan mal―Tara estaba sobre él, con las manos en su pecho, cubierto por una camiseta negra. Zayn colocó las manos en sus caderas y luego las deslizó hasta sus posaderas. Agarró su trasero y lo apretujó entre sus manos.
Tara soltó un gritito y él rió.
―Pervertido―Le acusó ella, dándole un golpe en la mejilla.
Zayn rió y le besó la punta de la nariz antes de que Tara se levantase.
―¿Pervertido yo? No fui yo quien anoche me metió la mano dentro de los bóxers y empezó a acariciarme, susurrándome en la oreja que se moría de ganas por tomarme en su boca.
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Heart's Smash
Fiksi PenggemarElla siempre había sido su mejor amiga... Hasta que se dio cuenta de que la deseaba. Escritora: Verónica.