Heart's Smash

Capítulo 32.

Zayn abrazó a Tara contra su cuerpo, se balanceó con ella y terminaron los dos tendidos en la cama entre risas y caricias.

Minutos después, ambos salían de la ducha, vestidos y arreglados. Tara recogió sus cosas y las metió en el bolso mientras Zayn se abrochaba los cordones de los zapatos, sentado en el borde izquierdo de la cama. El móvil de Tara empezó a sonar, procedente de la mesita de noche.

―Cielo, tú móvil―La avisó Zayn.

―Ya voy―Tara se subió a gatas en la cama, arrastrándose por detrás de Zayn. Se estiró y alargó el brazo para coger el teléfono.―Es Anna―Dijo cuando vio su nombre en la pantalla.

Zayn se dio media vuelta y bajó la mirada hasta Tara, quien estaba tumbada tras su espalda, en el colchón, con las piernas hacia arriba, cruzadas entre ellas.

―Dame un beso antes de contestar. ―Le pidió.

Tara sonrió abiertamente. Alzó la cabeza y fue al encuentro de los labios de Zayn. Él le robó un beso. Otro. Y otro. Una vez que tenía posesión de su boca no podía dejarla ir. Su sabor era tan adictivo, sus labios tan suaves, tan finos y sedosos, tan rosados y perfectos...

―Has dicho uno―Otro beso―. Para―Otro―. Anna va a colgar. Para―Se apartó de él entre risas y se llevó el móvil al oído―. ¿Anna?

―¿Tara?―La voz de la que consideraba su segunda hermana atravesó el altavoz.

―Sí, soy yo. ―Contestó― ¿Qué pasa? ―Anna sabía que Zayn y Tara estarían pasando la noche juntos, sumidos en la pasión. Si llamaba era por algo importante. Anna sabía cuándo debía molestar y cuando no.

―¿Estás bien?―Preguntó ella.

―Sí, sí. Estoy con Zayn, ¿recuerdas?―Tara alzó la mirada hacia Zayn, quien le estaba sonriendo. Llevó una mano a su cabello y la acarició suavemente―Estoy bien. ―"Más que bien", pensó.

―Tienen que volver.―Ordenó inmediatamente, con un tono de voz seco pero firme. Aquella era la manera en que Anna dejaba claro que algo no iba bien.

―¿Por... Por qué?―Zayn miró a Tara con una ceja enarcada. Ella se incorporó en la cama y se pegó a él para que también pudiese escuchar la conversación―¿Qué ocurre?

Anna se mantuvo en silencio unos minutos, miró lo que tenía en la mano y bufó con preocupación.

―Tus padres están recibiendo cartas con la misma tinta negra que hay en las fotos que recibí yo.

El corazón de Tara dio un vuelco y la mano que sujetaba el móvil empezó a temblarle. Zayn se lo arrancó y tomó el relevo.

―¿Qué has dicho? ―Preguntó a Anna.

―Ellos no han llegado a verlas―Empezó a explicar con la voz baja―. Esta mañana han salido temprano y me han dicho que tenían que marcharse unos días por cuestiones de trabajo. Estamos a cargo de Hayley, pero...―Volvió a mirar las cartas que había en su mano y por toda la mesa y se estremeció―Deberían volver y comprobar por ustedes mismos lo que hay escrito en esos papeles.

―Escúchame―Zayn cogió el rostro de Tara entre sus manos cuando llegaron a su casa. Se bajaron del coche en silencio. ―Iré a mi casa a por mis cosas y volveré enseguida, ¿de acuerdo? Avisaré a mis padres de que me quedaré esta noche en tu casa.

―Bien...―Tara le agarró una mano con las facciones encogidas por la preocupación―Ten cuidado.

―Lo tendré―Zayn se inclinó sobre ella y le besó la frente.

―¡Estoy en casa! ―Gritó Zayn cuando llegó, pero todo estaba sumido en el silencio. Sus padres no estaban. Hizo una mueca y cerró la puerta de entrada.

Fue directo a su habitación. Tenía que coger ropa de recambio, el neceser, y preservativos por si acaso. Sacó una maleta del interior del armario y empezó a meterlo todo dentro tan rápido como pudo. Cuando estuvo listo, se acercó a la habitación de sus padres para comprobar que no estuviesen allí durmiendo, aunque obviamente, no iban a estar acostados a la una del medio día, aún así, entró en la habitación, echó un rápido vistazo y no visualizó nada, excepto un trozo de papel sobre la cama.

Con curiosidad, se acercó después de dejar la maleta en la puerta y lo examinó.

Era un sobre. No había escrito más que el nombre de sus padres. El remitente era desconocido. Frunció el entrecejo. Abrió el sobre, sacó el papel y lo desplegó.

Veintisiete de Enero de 2010.

¿Qué significaba aquello?