31

7.8K 476 40
                                    

Lauren
Los Ángeles

-¿Entonces tienes su número y no te comunicaste con ella? Por dios Lauren, eres una lenta y no suele pasarte eso a ti, ¿Que tienes 15 años?
Se quejó mientras mi madre venía a nosotros. Permanecíamos sentados en el comedor.

-Baja la voz, no quiero que mamá este cotilleando de esto contigo. Exigí. Lo sabía estaba pensando demasiado en llamarla o no. Y las emociones fluían de mi sin esfuerzo. Pensaba en el encuentro que habíamos tenido hace una semana. Demasiado soso a mi parecer. Dios mío. Yo era Lauren Jauregui y mi inseguridad había ganado. Terrible. No tenía idea de como recuperarme de eso.

-Pues entonces hazlo, quiero ver que lo hagas y quedes con ella, además el niño parecía muy adorable, es que... Soportó soltar una carcajada. -Fue como un encuentro demasiado incómodo, ademas debes aceptar que los niños y yo te ayudamos un poco.
Lo miré con rabia.

-Por supuesto estupido, a que fuera más incómodo de lo que ya era.
Intenté alejarme de la silla que había ocupado a su lado. Sin llamar la atención de mi madre que entraba elegantemente al comedor. Seguida de ella estaba Keana. Los niños ya nos acompañaban.
Nos sirvieron los platillos y comíamos en silencio. Con una música suave de fondo.

-Mamá, Lauren tiene una cita ¿Te contó?
Quise asesinarlo. Intenté con la mirada y pensé en lanzarle uno de mis cubiertos.

-¿De verdad cariño? Preguntó mi madre con una esperanza viva en los ojos. Ella quería que hiciera mi vida de nuevo, con otra mujer diferente a Samantha por supuesto. No me quedó otra opción más que asentir y seguir con la mentira de mi hermano mayor. Era un imbecil por cierto.
-¿Quién es? ¿La conocemos?
Keana también mostraba entusiasmo en saber. Los niños guiñaron el ojo con su padre. Por que recordaban claramente a la mujer con quien había hablado en el restaurante.

-No la conoces, y tal vez en un tiempo no lo hagas, me gusta ser reservada y si es necesario, lo haré ¿Puedo comer tranquila ahora?

-No me respondas así Lauren Michelle. Mi madre se había ofendido por la forma en que había contestado, aunque yo fuera una mujer mayor e independiente no me quedaba de otra más disculparme. Suspiré profundo y sin dejar de ver mi plato.

-Lo siento madre, pero es como es, se los contaré si esto llega a ser importante, solo no quiero sentirme presionada, la última vez todo termino en un divorcio ¿Recuerdas?
Me miró fijamente y al final lo dejo pasar. Miré de mala a Chris y seguí comiendo.
Cuando todos habíamos terminado me excuse para salir a hacer una llamada.
Sabía que no dejaría de molestar hasta que llamara a Camila. Bien.
Pues me lo iba a quitar de encima de una buena vez. Caminé hacía uno de los jardines.

-Te sigo te sigo. Dijo y rió divertido.
Busque con dedos temblorosos el número indicado. Camila Cabello S.
Mirar esa letra al final me había desconcertado un poco al principio, pero termine por aceptarlo. El hombre tenía poco de haber fallecido, claro que ella iba a defender ese espacio. Habían sido un matrimonio feliz hasta ese accidente. Yo no podía reclamar nada.
Ella misma había registrado su nombre y así iba a dejarlo.
Marque. Pero el contestador comenzó a sonar después de tres timbres.
Sujeté mi cabello ansiosa. Chris me miraba fijamente.

-No ha contestado ¿Feliz?
Intenté pasar a su lado. Que no contestara me había puesto de malas. Ella debía cargar su móvil a todas partes. Actualmente era una herramienta indispensable para vivir. ¿Porque era descuidada con eso? ¿O tal vez suponía que era yo? Por eso no iba a contestar. Podría creer en la posibilidad de que ella fuera amable en el restaurante por que no había tenido opción y no tenia interés en saber de mí más.

-¿Que haces?

-Entraré a la casa, me ha mandado a buzón de llamadas.
Dije en un tono serio.

-Dios, ¿Te vas a rendir así? Toma de nuevo el móvil y llama. Fastidiada. Intenté pasar de el pero no lo logré. Él sacó mi móvil del bolso en un movimiento y de la nada lo acercó a su oído esperando a que alguien contestara. Tres segundos después me pasó a quién estuviera en la línea.

-¿Hola? ¿Quien habla?
Mi cuerpo se tenso y Chris me animó para que contestara algo.

-Camila, hola...soy Lauren.
Silencio un poco largo. Pensé que había colgado.

-Lauren, hola, llamaste hace un momento lo acabo de notar, estaba ocupada recostando a Atom para su siesta.
Mi corazón latía con fuerza, su tono de voz simplemente me cautivaba. La imaginaba caminando de un lado a otro con el móvil en su mejilla. Susurró para que la esperara un momento. Yo espere.

-¿Que pasa? Volvió a la línea.

-Yo...¿Como han estado? Pregunté de forma tonta. Mierda. Habían perdido la capacidad de hablar con una mujer de forma inteligente.

-Muy bien gracias, Pensé que no llamarías. Confeso en un hilo de voz.

-Lo se, lo que pasa es que tuve una semana un poco pesada solamente y...no sabía que tan pronto podía hacerlo.
Confesé lo último con sinceridad. Claramente había tenido horas para llamarla pero en cambio la había pasado mirando su nombre en mi lista de contactos, debatiéndome en lo que debía hacer.

-Claro...bien lo entiendo. Otro silencio largo.

-¿Estas disponible mañana? Podríamos salir a cenar, hablar y...

-No puedo tarde, por Atom.
Mierda. Claro, debía incluir al pequeño hombrecito también.
-Y no quiero ser algo pesada ¿Pero a que saldríamos tu y yo exactamente?
Su respuesta me impresionó como un duro golpe en la mejilla, cuando yo la llamaba antes era solo para exigirle que se presentará en algún lugar, lista y dispuesta para complacerme en lo que quisiera, negué asustada.
¿Porque sonaba tan directa? ¿Estaba molesta por que la llamaba?

-Para hablar, tenemos muchas cosas para hablar.
Dije segura. Por supuesto. Quería hablar con ella, explicarle cosas y decirle todo lo que no pude cuando nos reencontramos. También quería simplemente mirarla. Tenerla cerca. Sin embargo eso no podía decírselo.

-No lo sé Lauren. Contestó confundida.
Chris escuchaba sin entender de lo que hablaba. El no sabía que yo conocía a Camila. Ni el motivo. Y no iba a decírselo.

-Por favor, solo acéptalo ahora y si todo sale mal, entonces no hablaremos más, voy a...¿Quieres salir por la tarde? Pasear por el centro comercial, comer y llevar a Atom a distraerse con algo divertido, supongo que debe amar las cosas navideñas, son populares por las fechas ahora.
Escuche una risa corta. ¿Había dicho algo malo? O torpe. Por que Chris se dió un golpe en la frente con su mano.

-Lauren, Atom apenas tiene 10 meses. Dijo divertida.
Mierda, era verdad ¿Que otra cosa podría decir para convencerla?

-Si tienes razón pero apuesto a que las luces de un árbol si llamaran tu atención ¿Puedes mañana?
Pregunté directa. Me estaba cansando de ser tan tonta con mis palabras, quería que ella ya aceptará.
Suspiró levemente en la línea.

-Bien, si, te veo entonces a las 3 ¿Esta bien?

-Por supuesto.
Contesté un poco mas aliviada, ella dijo que si. Acordamos encontrarnos en el centro comercial cercano a la entrada de la ciudad. Para ella se facilitaba. Aunque me había ofrecido a recogerla, ella se negó. Suponía que Louis seguía ayudándola a moverse por la ciudad.
Después de una despedida un tanto incómoda. Colgué.
Chris soltó una risa divertida y yo comencé a preocuparme
¿Como mierda pensaba decirle todo a Camila?

¿QUE TEMA SUGIEREN QUE DEBA CONTARLE PRIMERO?
🤦🏻‍♀️

Mientras te tuveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora