Mientras te tuve

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Camila
Los Ángeles

No quería que ella me viera llorar por solo sus palabras.
Por un momento sentí que seguía siendo la amante de Lauren, me sentí acusada y tenía un montón de palabras en mi garganta, pero ¿En que momento me había vuelto tan vulnerable? Pensé que todo lo qué pasó con Dylan y el embarazo me hacían un poco mas fuerte. Resistir acusaciones que debí recibir hace años.
Fui al baño para secarme las mejillas sin importarme que Lauren se quedará ahí con ella.
Enfadada salí al primer lugar al aire libre donde pudiera recuperarme del todo.
Tenía la respuesta. Estaba vulnerable lo sabía, pero por que el amor me hacía actuar así, Lauren me había atrapado de nuevo, sentía que la amaba y que todo ahora dependía de ella. Y ahora no solo yo, si no también mi hijo.
Respiré profundo y me recargué cerca de un arbusto. No quería que nadie me viera y viniera a preguntar que pasaba.

Imagine lo cruel que sería para mi si en realidad Lauren siguiera viendo a otras mujeres. Por dios no. No podía dudar de ella de esa forma, no lo merecía.
Un enfado conmigo misma comenzó a crecer, necesitaba encontrar a Lauren para hablar y pedirle una explicación ¿Porque me había traído cuando sabía que su ex mujer estaba aquí?
Justo al dar el pasó para volver a entrar choque con un cuerpo. Me hizo saltar del susto.
Unos ojos verdes intensos me miraron fijamente.
Por instinto de protección retrocedí hasta quedar fuera de sus manos que intentaron tomarme por la cintura.

-¿Porque te fuiste? Preguntó sin dejar de mirarme. Rogaba por que ninguna lágrima saliera de mis ojos, eso podría complicar todo.

-No tienes derecho a enfadarte Lauren, tu eres la culpable de esto, de que me sienta incómoda a tal grado, no iba a quedarme frente a ustedes mientras ella movía todas sus palabras en mi contra ¿Porque lo hiciste? ¿Porque me obligaste a mirarla?
Se quedó en silencio un rato.

-No sabía que estaría aquí, sus padres y yo quedamos en un acuerdo, ella no podía estar en los eventos de la empresa, créeme lo que menos quiero es verla y mucho menos a ti, a sido totalmente de sorpresa.

-Fue terrible, no estaba preparada para recordar lo que había sido para ti.

-Ya basta Camila, es diferente ahora y es lo que importa, por favor. Sus manos tomaron las mías lentamente buscando que yo dejara atrás lo qué pasó. Pero me sentía angustiada y terriblemente irritable.
Yo no la miré. Quería quitar mucho de las palabras que esa mujer me había dicho. Pero yo era tan tonta.

-¿Que pasará cuando hagas lo mismo que le hiciste a ella?
Al instante me arrepentí de preguntarlo. La Lauren de ahora no lo haría jamás.
Su cuerpo se tensó y lanzó una energía totalmente feroz al ambiente. Sus ojos Se oscurecieron de nuevo y soltó mis manos de golpe.

-No puedo creer que tan solo lo insinúes, Samantha es una mujer enferma, se lo que le hice y fue contigo pero mira...yo me di cuenta de por que lo hacía, te amaba y lo reconocí un poco tarde, te lo dije Camila, te dije que te iba a dedicar mi tiempo y que me iba a esforzar para convencerte de que quiero estar con ustedes, te amo y amo a Ati, no quiero estar con alguien más...

Intenté interrumpirla para retractarme pero ella no me dejó. Sabía que no lo iba hacer cuando dio varios pasos hacia atrás para irse.
-Lau...

-Es lo que he hecho ¿Porque dudas de mi? No tienes derecho ¿Crees que no me doy cuenta en tu mirada? Dudas todo el tiempo Camila y eso me lastima demasiado.
Terminó de hablar cuando su voz se hizo débil y se entrecortó. Dios no.
Lauren salió del lugar dejándome ahí sola.
No iba a seguirla, mis pies se quedaron clavados en el lugar. Sentía que mi cuerpo estaba débil. Dios. Suspiré profundo y mis lágrimas cayeron.
Dudas. Sé suponía que ya no las tenía. Quería estar con ella. La amaba.
Pero cuando caminé dentro del hotel para buscarla, no di con ella, se había ido. Con un saludo incómodo salude a los lejos a Chris y Keana que intentaban a averiguar que pasaba.
Pero me rendí, me sentía cansada y no quería toparme de nuevo a esa mujer.
Pedía con todo mi corazón que Lauren fuera al departamento. Necesitaba disculparme, hablar con ella y besarla.
Tomé mi abrigo y bolso para salir.
En la puerta el hombre que conducía el auto que nos trajo me detuvo.

-Sra. Cabello, la Sra. Jauregui me encargo llevarla a casa.
Con un nudo enorme en mi garganta asentí. Me había dejado ahí pero sabía que no tendría como regresar.
Entré al auto con su ayuda.
-Pasáremos primero a la mansión Jauregui por su hijo.
Ella tal vez no iba a volver con nosotros. Mi corazón dolió demasiado. Y saqué mi móvil con manos temblorosas para marcar su número.
~Por favor contesta Lauren~ Rogué en mi mente.
Al llegar a la casa de Clara, la niñera esperaba atenta con Atom en brazos y su pequeño bolso. En nada de tiempo Ati y yo llegamos al departamento. El se había quedado dormido en el camino y el hombre elegante me ayudó hasta la puerta, donde se despidió.
Entre apenas y busqué con la mirada alguna señal de Lauren estuviera aquí.
Pero lo sabía, sabía que no iba a volver esa noche.
Lo que no imaginaba era que no solo sería esa noche, si no otras tres más.
Tres noches en la que había hecho el último intento para que me contestara, mandaba el mensaje número veinte con un montón de palabras.
Había intentado localizarla, llamé a su hermano, a Keana y Clara pero ninguno de ellos sabía donde se había metido. Esas tres noche había llorado como nunca en mi vida. Ella nos hacía tanta falta y la amaba demasiado.
En el silencio de la oscuridad en la tercera noche, recordé lo que me había pedido, ella quería que le demostrara que de verdad la amaba.
Sabía que dudar de ella no demostraba nada.

💔 ES DRAMA BUENO ¿VALE?