Javrik suspiro, observando a Isobel, con la cabeza recostada sobre la ventana del carruaje, se inclino hacia delante frunciendo el ceño.
-Isobel -espero y al ver que ella no abría los ojos alargo la mano y toco las de ella -No voy a soltarte aunque te hagas la dormida.
Y ella aparto las manos bruscamente e incorporo la cabeza, mirándole molesta.
-Está bien -el paso la mano por su pelo -Te quitare el pañuelo de la boca, pero si gritas, volveré a ponerlo. -la miro -¿De acuerdo? -y cuando ella asintió, el se inclino hacia ella y con delicadeza aparto el pañuelo, dejándolo caer en su cuello. -¿Como estas?
-Que te den -ella respondió mirándole con odio.
-Lo siento, pero...-Acaricio su mejilla y aparto la mano rápidamente cuando ella giro el rostro para morderle. -Necesitamos un tiempo a solas. -espero a que ella hablara y al ver que ni siquiera le miraba, suspiro -Por favor di algo.
Ella giro el rostro, le miró durante unos segundos, después miro junto a él, una manta que había doblada en el asiento.
-Tengo frio -hablo y volvió a mirarlo.
Suspirando, el tomo la manta y se inclino sobre ella, extendiéndola, tapándola. Se quedo mirandola unos segundos, finalmente se reclino contra el respaldar del asiento y la observo. El silencio inundo el carruaje, ella mirando a través de la ventana y el mirandola a ella. Hasta que ella le miró.
-Javrik -Dijo su nombre muy despacio.
-¿Qué? - el se inclino levemente hacia delante.
E Isobel le arrojo la manta, incorporándose, dejando caer las cuerdas cortadas de sus manos al suelo y agachándose para cortar con su cuchillo la cuerda de sus pies.
-¡Mierda! -Javrik pataleo bajo la manta, intentando apartarla con dificultad. Cuando lo consiguió, ella estaba totalmente libre y había abierto la puerta del carruaje. -¡¡¿Que haces?!! -salto hacia ella, agarrándola del brazo-¡¡Te vas a matar!!
-¡Suéltame! -Isobel se revolvía, empujándole, con un pie en el aire fuera del carruaje y agarrada con su otra mano a la puerta del carruaje. El carruaje freno de golpe, claramente, el conductor se había alertado al escuchar los gritos y ver medio cuerpo de ella. Entonces Isobel tiro de la puerta.
-¡¡Ahh!! -Javrik gritó soltándola, sintiendo el golpe de la puerta en su brazo, la abrió haciendo una mueca y la vio corriendo por el camino.
-¡¡Isobel!!-salto del carruaje persiguiéndola.
-¡¡¿Señor?!! -El conductor del carruaje los miro dudando.
-¡¡Isobel!! ¡No puedes escapar! -el acelero alargando la mano, agarrando el vestido que se escurrió de sus manos -¡¡No lo pongas mas difícil!!
-¡¡Socorro!! -Ella gritó al ver a dos campesinos caminando -¡¡Ayúdenme!! -corrió hacia ellos -¡Este degenerado me ha secuestrado! -se escondió tras ellos.
-¡Isobel! -Javrik paró mirando a los dos hombres -Es mi prometida.
-Pues ella no parece de acuerdo con eso -Uno de ellos miro a Isobel -¿Es tu prometido?
-¡No! -ella negó con la cabeza.
-Sera mejor que regreses a tu camino muchacho -el otro hombre dio un paso hacia el -No te llevaras a la señorita en contra de su voluntad.
-Maldita sea -Javrik la miro frustrado -Di la verdad Isobel.
-La verdad es que no soy tu prometida y que me has secuestrado -ella alzo el mentón orgullosa.
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Los Hijos de Las Highlands.
RomanceSECUELA DE LA SAGA HIGHLANDS. PROXIMAMENTE Se recomienda leer antes la saga Highlands (La Guerrera, El Invencible, La esposa, El Conde, La Duquesa, El Laird y La Bruja) Este libro recoje las historias de sus hijos, de los descendientes de los clan...