CAPÍTULO # 17

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- Pues si mi madrina lo ordenó - ud se va a meter en un lio - dijo la joven castaña.

- No se preocupe Santa Hermione - pero el problema - ¡es mio!

Hermione - dijo pero yo lo metí, es mi culpa.

Draco dio media vuelta y quedó frente a Hermione - dijo - ¿quiere que le diga una cosa?

- ¿Qué? - preguntó la joven castaña.

- Antes que nada quiero pedirle una disculpa - dijo el rubio.

- Por lo que le dije en la mañana - como se habrá dado cuenta, de caballero no tengo más que - la ropa,

La castaña bajaba la cabeza avergonzada.

Draco que era mucho más alto que la castaña bajo la cabeza, quedando a su altura.

- Miró a sus ojos - dijo si yo la hubiera tenido a ud, solamente volviendo me ciego, sordo o imbécil, la habría dejado por otra, mucho menos por una zorra, como su hermana.

El peón de la hacienda llegó corriendo hacia ellos.

- ¡patrón! - gritó el peón.

- ¡Si - contestó el rubio.

Perece que Hagrig se fue al campo, pero hay unos reos en la bodega.

Draco se acercó al rostro de Hermione y se disculpo.

Hermione se quedó unos minutos viendo lo marcharse y se retiro.

Draco bajó junto al peon, hacia las bodegas y al bajar, se encontró con Valentine, el tuerto y Harry, estos al verlo lo abrazaron.

En el despacho, se encontraban Abraxas y Blaize.

Blaise le pedía que despida a Draco, ya que lo veía como un rival.

- Si lo alejas me quitas un rival - que podría volverse, muy molesto - aseveró el moreno.

- ¿Un rival? - Preguntó el castaño.

- Me refiero a Hermione,

- Tú sabes que me gusta y que mis intenciones son serias.

- ¡No creo que Draco, se atreva! - dijo el castaño.

- Yo creo que se atreverá a cualquier cosa - en la mañana los vi - caminando juntos - muy platicadores

- Bueno Hermione es muy hermosa - respondió el castaño - y no dudo que le haya llamado la atención a Draco.

Pero estamos hablando de una srta. decente, de buena familia, que sabe cual es su posición.

Ella jamás se fijaría en un tipo como Draco.

- ¡Abraxas! Por Dios, no seas tan ingenuo - gritó Blaise.

- Además me sorprendes, ambos sabemos muy bien, que cuando la sangre, se calienta.

- La clase, el apellido y los perjuicios no son ningun freno.

- Que acaso no has conocido a más de dos damitas criadas en el seno de familias distinguidas.

- Que se han entregado a cualquier galán, audaz,

- Draco es un tipo bien parecido.

- Si - pero Hermione es incapaz - aseveró el castaño.

Hermione caminaba por la casa, embelezada pensando en las palabras de Draco y su cercanía,

Que le hacía temblar las piernas.

Hasta que se le acercó Astoria.

- ¿Ya arreglaste tu problema de la escuela? - preguntó su hermana.

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