Corazón de Dragon

CAPITULO # 41

Lo prometido es deuda. Aquí empieza la maratón de 5 Capítulos.

Quiero dedicar está maratón, a mi amiga Vikkamartinez
Feliz Cumpleaños, que Dios te bendiga
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Cuatro adultos, se encontraban discutiendo, un tema engorroso, gritando se unos a otros, buscando culpables, cuando sabían de antemano, quién era el que llevaba más culpa.

- Estoy de acuerdo, con usted Lcdo. Nott, pero no le permito, que hable así con la sra, le recalcaba el Moreno. - ni menos en mi presencia.

- Tiene usted, toda la razón, discúlpeme, doña Helen, le decía Nott, - pero creo que es necesario mantener la calma porque la situación es grave. Y hay que encontrar una solución.

- Hemos pensamos avisarle de alguna manera a Draco, pidiendo le que no vuelva, le decía Hermione.

- Helen, suspirando le dijo, - me parece lo más sensato.

- Si, por lo que dudo mucho que acepte, lo conozco, les comentaba Nott, - y se que en cuanto sepa lo que está pasando, va a volver más pronto que lo previsto.

Hermione, sollozando, le pedía a Helen, - por eso, en caso de que Draco, no quiera, habrá que convencer a Abraxas, de calmar lo, convencerlo, el derramar sangre, tía, no arregla nada, al contrario.

- yo estoy de acuerdo con ustedes, trate de hablar con él, pero está demasiado herido, les decía Blaise.

- ¿Por qué no lo llaman, tía Helen y nos permite verlo? Sollozaba la castaña.

Abraxas no está en condiciones de entender nada, se encerró en su cuarto con una botella de brandy, explicaba Blaise.

Nott preguntó, ¿Astoria y Andrómeda, se quedaron en la hacienda?

- No, se regresaron con nosotros, están en su casa, explicaba Blaise.

- Maldito el día, en que ese infeliz, se cruzó en nuestro camino, sollozaba Helen, trayendo la desgracia, ha enlodado nuestro nombre, arrojando su basura sobre nosotros, es una alimaña que no merece vivir.

- Hermione, no podía creer que su tía, a pesar de sus intentos por solucionar este inconveniente, seguía culpando de todo a Draco, y le dijo, - no puede decir eso tía.

- yo digo lo que quiero, y además es la verdad, gritaba amenazadoramente Helen.

Hermione, perdiendo los estribos, grito también, - no, no es la verdad, y usted lo sabe. La culpa la tuvimos nosotros, pero él no.

Nott tratando de calmar los impetuz de ambas mujeres, - mejor vámonos le dijo a la castaña.

- Si mejor, váyanse y ve con tu madre y la pérdida de tu hermana, gritaba Helen, - cuyo nombre estará en boca de todos, cuando Abrazas de a conocer el motivo del divorcio.

Helen vagaba por la casa como alma en pena, porque Abraxas no paraba de beber.

Blaise la atrajo hacia él y la invitó a sentarse en la sala, debía contarle el plan que tenía para deshacerse de Draco.

- Es que estuve pensando en un plan, para evitar el enfrentamiento, decía el moreno, - antes quiero que me prometas algo, en caso de necesidad, me brindes tu apoyo moral y económico.

- Helen, aceptando sus condiciones le dijo, - lo que sea, lo que haga falta. No me importa que se trate de una fortuna.

Blaise, escuchaba complacido como había convencido a la castaña mayor con sus tretas y le dijo - pero a Abraxas, ninguna palabra, de acuerdo.

Helen, asintió.

El tuerto tomaba café en la cocina de la casa de Draco, mientras esperaba a Hermione.

Se conmovió al ver cómo Neville, lo atendía y le dijo la verdad, - Draco no confía en ti, por eso te vino a buscar el Licdo. Nott para despedirte.

- Pero ¿por qué desconfía de mi?, le preguntó Neville.

El tuerto solo le respondió, - porque si.

Porque a Draco, le late que alguien te metió a su casa, le dijo el tuerto, - para espiar y como no quiere correr riesgos te vas a tener que ir.

Meche entraba a la cocina, encontrándose a los dos hombres, al tuerto tomando café y a Neville totalmente distraído por la novedad que habría sido descubierto.

El tuerto entraba a la sala, saludó al Lcdo. Nott y a Hermione.

- sra. Se acuerda de mí, dijo el tuerto.

- Claro que si, trae noticias de Draco. Le preguntó la castaña.

- Vine porque Megara, nos contó del pleito con Don Abraxas, dice que lo quiere matar.

- Así es, aseveró Nott, - hay alguna manera de avisarle.

- mañana llegan a la marina, decía el tuerto, - podemos poner un telegrama a las autoridades del puerto, y que se lo den.

- ¡si, por favor!, Pedía la castaña. Hay que decirle que no vuelva.

- Hermione, No insistas, ni te hagas ilusiones, nada de lo que le podamos decir, lo va a convencer de lo contrario, en cuanto sepa lo que pasó, va a regresar inmediatamente, la reprendió Nott.

- Pero es que él, no debe pelearse con Abraxas, son hermanos, si lo mata lo va a cargar en su conciencia toda la vida, y si muere él, dijo esto en un susurro lleno de dolor la castaña.

- además esto es absurdo, Draco no tiene la culpa de nada y si Abraxas está tan ciego, y no puede verlo, uno de los dos debe ser prudente.

Nott, resignado se disponía a salir de la casa con el tuerto, para ir a preparar el telegrama.

Hermione, tomó las manos de Nott, suplicándole, - por favor trate de convencerlo.

- y tú, busca calmarte, le susurró Nott a la castaña, que solo pudo contestar vagamente, - ¡Si!

Neville, nervioso llegó a la delegación a buscar a Slugort y tartamudeo al decirle, - ninguna novedad, ya sabe lo mismo de siempre.

- ninguna novedad, a poco me vas a decir que no sabías que Draco, salió de viajes, preguntó Slugort.

- bueno, eso sí, dijo Neville.

- porque no me lo dijistes, grito Slugort

- ya se lo iba a decir, dijo Neville

Slugort, sin una pizca de paciencia, lo cuestionó, - también me dirás qué no has encontrado nada para culparlo.

- la verdad, no jefe, dijo Neville. - me deja ver a mi hermano.

- este lo dejo bajar, y al llegar a la celda, le contó a su hermano, que fue despedido por el tuerto.

Blaise llegaba al despacho de Slugort, para planear los perjuicios que le causarían a Draco, para meterlo a la cárcel, una vez que regresará a San Pedro.

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