Recuérdame [CAMREN]

Capítulo 6

Lauren Pov

Camila se había encerrado en el baño hace una hora. Ella cree que no, pero aquí todo se escucha, en el pasillo, en el baño y dentro de la misma habitación.

Es demasiado sensible, yo al menos no puedo llorar durante una hora en un baño que ni siquiera es el de mi casa. Lo único que se escuchaban eran sollozos de su parte, susurrando mi nombre, esperando a que fuera a consolarla, solo que no lo haré.

He llegado a una conclusión en el poco tiempo que llevo consiente: estoy fuera de tiempo...o al menos de este. Como si me hubiera quedado más tiempo atrás con los recuerdos y en mi cabeza. Desde dónde yo recuerdo, al menos estaba estudiando.

En ellos no había ni registro de Camila. Por suerte, cuando ella se fue quedé completamente aburrida y sola. Me dió tiempo para pensar e intentar recordar algo. Por alguna razón luego de ver de los supuestos hijos de Ally algo en mi cabeza se iluminó.

Recordé cuando ella estaba saliendo con un chico y había quedado embarazada, por ahora era lo único. Era algo muy borroso, un recuerdo para nada claro en ningún sentido.

Seguí mirando las demás fotos. Había muchas de viajes que al parecer habíamos hecho juntas. La realidad es que siempre me han gustado los niños, pero de ahí a tener uno, no gracias.

Intentaba pensar y buscar algún indicio de dónde podría haberla conocido, o algo clave que pudiera desbloquear algún recuerdo más. Las fotos con Camila eran interminables, y todas son distintas entre sí.

Todavía intento entender cómo es que caí enamorada con una mujer así. No es secreto que he sido lesbiana desde antes de tener consciencia de lo que la palabra significa. No es raro para mí saber que tenía una pareja mujer antes de todo.

Además, me casé. Es decir, me comprometí con alguien que no puedo recordar quién es. Camila por lo poco que me ha demostrado es demasiado emocional, es compulsiva y egoísta en algún punto. No es por ser hija de puta, pero también está rota por dentro.

Camila no está bien emocionalmente, no sé por qué pueda ser, es su problema. Lo que sé es que nunca estaría con una mujer quebrada por dentro. Dónde se hunde una lo hace la otra con ella, y yo no pienso hundirme con nadie, ni siquiera con mi propia familia.

Me incorporé en la cama y tomé el vaso de agua a mi lado. Bebí un sorbo y volví a dejarlo en su lugar. Miré el techo devastada, este lugar es aburrido.

¿Por qué habré sido yo la que se embarazó? Si odio todo lo que tiene que ver con un embarazo. Del solo hecho de pensar en las nauseas, los antojos, las estrías, la hinchazón, la hinchazón en los pies por dios, y para culminar la que podría ser la "mejor" parte, el parto. Solo de pensar en esa escena en la que podría ser la protagonista me da escalofríos. Solo tengo tres opciones para eso; terminar con la vágina completamente destruída y deformada, una cicatriz quién sabe que tan grande la cual tardará por lo menos un buen tiempo en cerrarse, o la que no sé si es la mejor o la peor, morir en el intento. Hermoso el comienzo de la maternidad sin duda.

Luego es vivir prácticamente para una pelota que solo come, duerme y caga. Conclusión: no duermes, eres una esclava de lo que se supone que debería alegrarte, eres alimento y cuando son más grandes tienes que corretearlos todo el día. Lo de ser madre sin duda no es para mí, además mi paciencia es inexistente. Según Ally, que trabaja con niños, debes tener mucha pero mucha paciencia con ellos.

Camila salió del baño finalmente, ovbiamente con el rímel corrido. Metió la mano en su bolso y sacó algo, pero ni siquiera le presté ateción a aquello.

-Tú muñeca-Ella me miró confundida y luego lo que había señalado.

-Sí, es un tatuaje, tú tienes muchos.

-No, no es eso. Lo he visto en tu muñeca ahí antes.

-Lauren estoy aquí hace dos días contigo consciente. Ya lo debes haber visto.

-Los demás días has estado usando pulseras, bastantes que lo cubrían.

-No lo sé-Ella volvió a caminar al baño.

-¡No!-La interrumpí-Ven aquí por favor-Ella se sentó a mi lado en la cama y tomé su muñeca observandola.

-No entiendo que pretendes.

-He visto tu tatuaje-Ella quitó su muñeca de mi agarre y tomó la mía.

-Aquí lo has visto-Yo tenía un tatuaje igual, no lo había notado.

-No, pero...Lo he visto antes-Pensé un momento y mi cabeza se iluminó-Lo ví cuando fue el impacto-Ella se sorprendió.

-¿El impacto de qué?

-En...En el accidente-Tartamudeaba apenas. Recordé la horrible escena. Recordé como Camila había impactado con sus brazos hacia adelante y segundos después el airbag se disparó, aunque el golpe en el pecho ya había sido.

-Ay dios...-Llevó su mano a su boca-¿Que recuerdas?

-Cómo te hiciste mierda contra el volante-Ella suspiró-¿Por qué nos tatuamos un corazón?

-Fue en nuestro primer aniversario, tú querías un tatuaje conmigo y yo algo sencillo. Así que decidimos un corazón.

-¿Cuántos tatuajes me hice y cuáles contigo?

-Solo tienes uno más conmigo-Ella corrió su cabello dejando al descubierto una "L" en la parte de atrás de su oreja-Tú tienes una "C". Aquí-Señaló en el mismo lugar. Puse mi mano ahí sintiendo la marca de la tinta.

-¿Puedes tomarme una foto para verlo?

-Claro-Ella sacó su celular y tomó la foto para luego mostrarmela. Era lo más simple del mundo, una tipografía sencilla y limpia. Es lindo.

-¿Cómo puedo asegurarme de qué hemos tenido sexo y que simplemente no te hagas pasar por mi esposa?

-Te diré algo que solo una persona con la que hayas tenido relaciones sabría.

-A ver.

-Tienes un lunar en el pezón izquierdo.

-Eso da miedo. Dime otra cosa-Ella pensó un momento.

-Tienes otro lunar en la ingle.

-¿Cuál?-Desafié.

-La derecha, casi llegando a tu culo.

-Okay, esta vez si me espanté.

-¿Te asusté? Conozco tu cuerpo de arriba a abajo.

-Realmente sí.

La puerta nos interrumpió. Básicamente toda mi familia entró.