Epílogo pt. 1

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Omnisciente Pov

Nueve años después

Lauren 55

Emily 31

Selene 27

La mayor tomó el juego de llaves de la casa de su madre y abrió por la puerta principal. Desde que Camila había fallecido las cosas en la casa de su infancia eran muy silenciosas, nunca sabía a ciencia cierta si su madre estaba o no.

-¿Mamá?-Nadie contestó. Supuso que le tocaría buscarla, como otras veces. Cruzó el recibidor hasta el comedor. Se giró a su derecha encontrándose con la cocina. Entró para confirmar que no había nadie detrás del semi muro. Vió en el baño de inivitados, en el patio, y nada. Sólo quedaba la planta alta-Mamá, ¿Dónde estás?-Volvió a preguntar. Su teléfono en su bolsillo sonó. Miró el mensaje de su hermana, que le abriera la puerta. Selene siempre olvidaba su juego de llaves al venir. Se acercó a la puerta de entrada, la abrió y la menor pasó. Se había teñido el pelo de un tono más claro que el natural suyo y se lo había dejado casi por los hombros.

-¿Te gusta?-Miró a la rubia que la miraba con una expresión cansada.

-No encuentro a mamá.

-¿Cómo que no la encuentras, Emily?

-Me falta revisar arriba-Selene la empujó y subió rápidamente las escaleras. Abrió cada puerta, las de sus antiguas habitaciones, el estudio de Lauren, hasta su actual cuarto. Todas las habíataciones se sentían sin vida, como si no existieran.

-No está, revisa tu teléfono-Emily encendió la pantalla y vió la notificación de un mensaje de la ojiverde. O abrió y se lo mostró a su hermana-¿Quiere que revisemos el correo?

-Eso parece.

-Pedazo de inútil, te lo envió hace dos horas.

-Tal vez sea sólo un recordatorio. A veces me envía recordatorios, siempre está dispersa.

-¡Está dispersa desde que murió mamá!-Se hizo un silencio entre ambas.

-Sabes que necesitas relajarte.

-Sí, cancelé una cita que tenía con una rubia para morirse por venir a ver a mamá que sólo me entretiene con un juego.

-¡¿Pero y si esto es importante?!

-¡¿Eres idiota o qué?! ¡Mamá sólo se fue a dar una vuelta, sola, sin avisarle a nadie, luego te escribió un mensaje sin sentido, y tú no lo entiendes!

-¡Entonces revisemos el correo, Selene!

-¡No lo haré, esto es una perdida de tiempo!

-¡Pues yo iré!-Emily y Selene chocaban demasiado. Ambas tenían pensamientos y formas de ser muy distintas, además de la diferencia de edad. La mayor caminó hasta fuera y abrió el buzón. Tomó toda la correspondencia y la llevó dentro de la casa. Se sentó en la mesa del comedor y comenzó a separar todo. Facturas de luz, agua, gas, impuestos y entre ellas, otras tres cartas atadas con un hilo todas juntas. De ellas desprendía una nota-"Cada una lee la que le corresponde, hay una individual para cada una y una para ambas. Mamá"

-Te dije que esa mujer necesitaba terapia.

-¡Selene!

-¿Qué? No te preocupes que ya no te pueden devolver-Emily quitó el hilo y le dió su carta a Selene. Cada una la abrió y leyó lo que había dentro.

Recuérdame [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora